viernes, septiembre 06, 2024

NOMBRAMIENTO APACIGUADOR EN EMMANUEL MACRON


Michel Barnier rostro nuevo y flamante de la burguesía y de su discreto/encanto en el país, nota bene donde aquella nació, con sus trajes y corbatas flamantes y sus puños y gemelos (yo imagino) irreprochables como los de antes, y sus déslices de lenguaje -de clase- que no le perdona ni la izquierda ni el obreraje, gracias al cual Francia habrá salido de la crisis, con la ayuda y la caución del RN de Marine LE PEN.  Bajo el signo del apaciguamiento social y político, el nombramiento de Míchel BARNIER. Último parte de guerra de la interminable guerra civil europea. Tan interminable como nuestra guerra civil

A qué sirve un gobierno en democracia, en países de Estados en pleno funcionamiento y no fallidos me refiero (y no hago alusión a ninguno en concreto, mi palabra) y la pregunta parece encontrar su respuesta cabal en la crisis más larga de toda la historia de la V República francesa, una especie de carrera contra reloj con un límite o una meta bien a la vista de todos: la aprobación del presupuesto en las próximas semanas, por aquello sin duda que el dinero es el nervio de la guerra, que como lo decía Clausewitz y lo recordé en mi última entrada, no es más que la política por otros medios. O sea, que la política en un régimen democrático, es en parte el funcionamiento automático del sistema, con gobierno o sin gobierno, y en parte, la orientación o dirección o cambio de rumbo,  de la máquina estatal que se le antoja darle o acierta a imprimirle nollens vollens, el gobierno en funciones simplemente técnico o puramente político. Y es lo que se acaba de ver en Francia con el presidente MACRON, contra las cuerdas, en la última semana ante las presiones de la izquierda, queriendo imponerle sus candidatos, su candidata me refiero, que por un pelo no habrá sabido superar la rampa y habrá acabando estrellando su sonrisa déntrífica contra el asfalto de los números  y de las cuentas y cálculos y maniobras. parlamentarias. Y a la de tres o a la de cuatro, el presidente francés, habrá acabado encontrando el remedio a sus desdichas en un político y alto funcionario a la vez eurócrata si tacha ni reproche de los que tanto gustan las nuevas de generaciones de jóvenes españoles, que habrán encontrado en la UE el colmo de todas sus dichas y esperanzas. 

O sea que el nuevo presidente es un burgués sin tacha de un país donde nació la burguesía, que solo a partir de ahí consiguió esparcir su discreto encanto (de la que hablo creo recordar Buñuel o Saura, lo mismo me da) . Un look o una facha de presidente o de primer ministro más que de ministrable o de presidenciable la de Míchel BARNIER, el elegido -o el « tapado » de Emmanel MACRON, con su estatura impresionante y sis trajes y corbatas impecables -puños y gemelos incluidos, como los de antes-, « le physique de l’emploie » como ellos dicen, y también ese toque de clase inconfundible en sus expresiones o forma de hablar, como eso de las gentes « d’en bas » -de clase baja-, que habrá hecho trinar de rabia al obreraje como diría Umbral, y a toda la izquierda en bloque en general, su líder MELENCHON a  la cabeza que se habrá rasgado estridentemente las vestiduras, hablando de humillación. Que no se sabe como tratarles o sea, sin que se destierre ipso facto el hacha de la guerra social o de la lucha de clases, en Francia, como en España igual? Humildes, menestrales -Umbral dixit- clases bajas o modestas, un ir pisando huevos -o « cogiéndonosla », como decía el Caudillo, « con papel de fumar »- en el lenguaje en cuanto uno se adentra en el terreno fatal (de las clases, de « lo social ») Y por ahí es por donde el flamante nuevo primer ministro podría naufragar, pero no es seguro, por aquello de verdad allí, mentira del lado de acá, que diría PASCAL. Y el escenario así plantado, queda un poco en la sombra o en segundo plano lo que los medios al acecho no habrán dejado de resaltar, y me refiero al papel jugado en la crisis por el RN de Marine LE PEN, que sale del trance de árbitro supremo (faisant le roi) después de abandonar su actitud de censura permanente ante los nombres -de ministrables- que iban surgiendo en el tablero, y en particular el de Xavier BETRAND, rival directo de Marine LE PEN en la misma región -Nord- donde tanto el uno como la otra gozan de implantación electoral, acusado por los del RN de « insultante » y excesivo a su respecto, en lo que parece abundar su rostro a la perfección, de semblante torvo, sombrío y preocupado en permanencia, y su talante agresivo y desafiante como el rostro vivo de la guerra de memorias, guerra civil europea, tan interminable allí como lo es aquí. Todo lo cual, que acabo de exponer, habrá desatado la ira de las izquierdas y de sus voceros más destacados -en Francia como en Bélgica- de cara a la opinión, denunciando lo que les parece un golpe de estado. En un diálogo de sordos, no me digan, de por el otro golpe de estado electoral (sic) que practicó (escandalosamente) la izquierda francesa en las últimas elecciones segunda vuelta con su técnica de barrer. el paso al avance del RN y de su líder, Jordan BARDELlA, el político más votado y el mejor valorado en la opinión, tal como lo denunciamos en este blog. Último parte de la guerra de memorias o lo que me es igual, de la lucha de clases Bajo el signo del apaciguamiento político y social -pese a sus deslices, en el hablar, indigeribles para el obreraje- el nombramiento del nuevo primer ministro de Emmanuel MACRON, en la interminable guerra civil europea ta interminable como nuestra guerra civil

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Al final los franchutes se han librado del nuevo frente popular; los españoles nos lo tragamos con patatas todos los días......

Anónimo dijo...

Barnier....¿Hablará tambien de la "racaille"?