LOS ESTADOS UNIDOS DE JAMES ELLROY (una vision incorrecta). ( II )

Se me hace un tanto cuesta arriba (lo reconozco) el ponerme a escribir sobre ciertos temas el dia de Nochebuena precisamente, que en en mi abordaje de la obra incadescente de James Ellroy hay ciertos asuntos, figuras, personajes verdaderamente insoslayables. En la primera parte de su trilogia inacabada sobre los bajos fondos ("underworld" USA), "American tabloid" -traducido al español por "America"- el autor norteamericano embiste con exito y sin piedad a la vez contra el mito superintocable de la familia Kennedy y digo que se me pone cuesta arriba contribuir o jalear o comentar siquiera ese empeño tan irreverente en periodo navideño porque es cierto que John Fitzgeral Kennedy (JFK, las mismas iniciales que las mias...siempre me dejo perplejo...) fue como digo un poco como un regalo de navidad para el mundo, que me diga el mundo/libre a inicios de los sesenta, encandilante...y (mortalmente) envenenado: con su pelambrera rubia y boscosa echada hacia delante, sus porte atletico y a la vez un tanto fragiil y desgarbado, su cara y su risa de niño grande que debian derretir literalmente a sus legiones de admiradoras en el ancho mundo, y sobre todo -en lo que a España se refiere- estabamos ya digo en 1960-, con su eetiqueta -en la frente-, luminosa, brillante rutilante como un talisman magico e irresistible de catolico/romano...norteamericano o irlandes/norteamericano.

La familia Kennedy acompaña o circunda o sobrevuela desde el principio hasta el fin el "American tabloid" como un hilo conductor, fatal e omnipresente. Los Kennedy a finales de los cincuenta los representaba sobre todo su padre el viejo Joe (Joseph) Kennedy, embajador USA en Inglaterra en visperas de la segunda guerra mundial con etiqueta de pacifista, "verbigratia" pro/nazi, o si se prefiere contemporizador pro/Munich en aquellos momentos tan curciales de la que se apresuraria of course a deshacerse despues a toda prisa y a toda costa. Su imagen de viejo lobo de la politica norteamericana, comerciante de whisky irlandes, padre y abuelo de familia (catolica) numerosisima como nos vendio desde siempre a los españoles la revista Hola (entre otras), sale tocada del ala -lo menos que se puede decir- de la apaosionante lectura que nos ocupa: por sus rencores partisanos e ireconciliables que le llevaba a castigar, en publico escarmiento, secundado por sus queridisimos hijos a enemigos personales como Howard Hugues, multimillonario (como el) protestante/mormon de confesion y amigo de Richard (Dick) Nixon, rival de su hijo John y esperanza de los republicanos; por ello como digo y sobre todo por sus lazos -hoy archiprobados y confirmados- con los bajos fondos del crimen organizado, que contribuyeron no poco a la victoria electoral (familiar) de 1960, y a los que debia sin mas su cuantiosisima fortuna.

Su hijo John era el hijo de su padre (o de su papa); no el primogenito, muerto en combate en la Segunda Guerra Mundial, si encambio el mayor que le quedaba...y en el que tenia puestas todas sus esperanzas. De John Fitzgerald acierta a dar James Elroy una imagen compleja, en claoroscuro, interesante...de un individuo troncalmente inseguro, atormentado, (y marcado por la guerra que le dejaria secuelas en forma de dolencia); y por encima de ello, del retrato plasmado en la novela se yergue inrresistible otro retrato (robot) de un predador sexual...a imagen y semejanza de su sucesor en la presidencia USA, el odiado Bill Clinton, blanco del "odio" (sic) de James Ellroy conmo este mismo lo confesaba en el 2001 en una entrevista parecida en la prensa belga. De alguien en todo caso que no estaba en modo alguno a la altura -en aquella encrucijada tan preñada de interrogantes, de riesgos y de pleigros de inicios de los sesenta aun en la guerra fria- de la altisima funcion y de las responsabilidades supremas tan abrumadoras que la suerte elctoral le habia deparado.

Imagen postuma ya imborrable desde luego de un niñato (de papa) presidente/por carambola -de Franco que en parte tambien lo fue, jefe de estado me refiero, dijo el Innombrable que "estaba en la Historia como Pilatos en el credo", JFK como el buen ladron en cambio, "mutatis mutandis"...-, de alguien en definitiva que se habia hecho demasiados enemigos en la trayectoria un tanto tortuosa y desafortunada que le llevaria a la cita fatal de Dallas, una cita (mas) en definitiva, la ultima en la larga (larguisimas) serie de todas las citas -medio publicas,medio privadas...- de su vida...precisamente en Dallas, etapa nada trivial para nadie en los Estados Unidos, y a comenzar para el mismo, como lo ilustra fehaciente la novela (tan irreverente): republicanos aislacionistas y protestantes, mafiosos italianos o italo/americanos, anticastristas y anticomunistas americanos (de los Estados del Sur) frustrados y traicionados; sectores de la CIA y del FBI a los que creia haber subyugado y encandilado como a los otros, y ademas una ristra ensordecedora de "cacerolas" de lo mas ruidosas (como dicen los franceses) sobre su vida privada o su vida doble o triple o lo que fuera que no hacia de el mas que una figura aun mas vulnerable...e indefendible.

La provocacion, la figura immortal, imperecedera del provocador (a sueldo, o de profesion) surca "pari passu" la trilogia USA (inacabada) de james Ellroy. Y yo diria mas aun glosando el tema: la provocacion en el centro o en el fondo y en lo mas hondo del misterio (obscuro) de la Historia y enparticular de la Historia (secreta, subterranea) de los Estados Unidos y del concierto internacional a finales de los cincuenta y en la decada de los sesenta. Agentes provocadores, en accion de la CIA, del FBI, bulliciosos incansables a traves de las paginas de la trilogia, y "pari pasu",la presencia no menos omnipresente de un poder -o contrapoder- provocador por naturaleza o por definicion, encarnado en el otro bloque, en la Union Sovietica... Eses apecto aislacionista, "republican" de anticomunismo primario, irreductible, y de tufo inconfundible a guerra fria es lo que mas desazona y desconcierta a ciertos admiradores de la obra de James Ellroy en sectores europeos de extrema izquierda sobre todo en lengua francesa, que alaban en el, de lo mas impresiados, la carga irreverente, desdmitificadora, "revolucionara" en suma de sus novelas.

La revolucion cubana blanco del acoso y de una conspiracion poliforma (y policroma) de fuerzas contrarias, y hostiles no deja de ser sin duda en la vision o en la presentacion de (lo mas correcta) que ofrece James Ellroy -de la espiral de enfrentamiento que llevaria a la aventura tragica (coronada por el mas clamoroso y sangriento tambien de los fracasos) de Playa Giron y de Bahia de los Cochinos-, uno de los enfoques mas correctos y a la vez por parajodico que parezca mas desconcertante de la trilogia. Y lo ilustra el hecho que en una obra, en un novelista nato autentica revleacion en la creaccion de imperecederos personajes y en el retrato de lo mas genial e imborrable de los mismos, la figura en cambio de Fidel Castro, brilla (casi) por su ausencia, como una sombra o una silueta sin rostro...

Como un espantajo o espantapajaros a lo sumo, "el Barbudo"...Perseguido sin descanso u oscurecido (aun mas) en cambio por una nube de espectros , que me diga por las cabezas cortadas y alzadas en picas -como en la revolucion francesa, como en la guerra civil española- de los anticastristas vencidos, y alineados en la arena de la playa boca a bajo y decapitados...tras el desembarco, en una de las escenas mas logradas de "America".

LOS ESTADOS UNIDOS DE JAMES ELLROY (una vision "incorrecta"). ( I )

Abordar la figura -en cuarto creciente- del norteamericano James Ellroy, autor (de lo mas atipico) de novelas/policiacas, amigo personal del Presidente Bush...y niño mimado a la vez -por arte de varita magica se diría casi....- de la prensa de opinion (de izquierdas) del despues/de/Saddam en lengua francesa (?!), no es empresa facil desde luego. Y ello aunque solo sea por el estado de choque (sic) que a algunos como yo habra logrado literalmente infligirles...con algun tiempo de retraso. Yo -lo confieso-llevaba siglos (decadas) a años luz de la cultura americana y en general anglosajona: o lo uno o lo otro, o Europa o el otro lado del charco, que era esa en verdad la alternativa cultural (y existencial) que se nos ofrecio hasta hoy a muchos españoles avidos y a la vez curiosos(como yo) de nuevos rumbos, desde que nos vimos -hace ya un rato- en el brete (iay dolor!) de poner tierra por medio en nuevos cielos y nuevas tierras...

Habia dejado en el desván hacia ya como digo mi interes y mi aprendizaje de la lengua inglesa, y sobre todo una desgana de lo mas preocupante me iba ganando "in crescendo" de lo que fue siempre mi gran pasion salvadora y devoradora a la vez de lector voraz, insaciable e impenitente, como si estuviese al canzando ya, en mi espiritu, en mi cerebro -sintoma depresivos, de senilidad precoz?- el umbral de una cierta saturacion, como si ya me hubiese leido por demás todo lo que me era dado leer, en español sobre todo...y en frances...Y de repente ioh sorpresa! me topo o me doy de bruces o digamos que me pegan de frente por primera vez los rayos -de amanecer?- de ese astro ascendiente y rutilante del "thriller" USA muy cerca ya por lo que se me antoja de su fase de zenith, entre signos innúmeros de lo mas prometedores de un nuevo mediodía cultural cosmopolita, internacional al que de pronto -con cierto retraso ya digo- me siento llamado asi por las buenas, como si me encontrase (sin de ningun modo estarlo...) entre la lista de los invitados...

No leia ya nada o casi nada -a parte de la prensa o de la literatura digital- desde hacia ya un rato ya digo y de pronto por obra y gracia del norteamericano James Ellroy, de sus ingtrigas, de sus paradojas desconcertantes y sobre todo de su vision nueva y "al revés" (entre paréntesis de lo mas irreverente of course, "revisionista" a la vez y politicamente de lo mas incorrecta, derribando sin piedad mitos tan intocables, de piel tan dura y tan tenaces como el de la familia Kennedy...) de la historia reciente contemporanea de su gran pais, los Estados Unidos e America, me veo immerso desde hace meses como digo en la lectura en traduccion -en francés y sobre todo en neerlandés- de su obra, en plena fase de maduracion, y de perfiles y contornos se diria cada vez mas amibicioso e imprecisos: una autentica tetralogia (como la de Wagner, sin demereceerla en modo alguno es cierto) sobre Los Angeles y sus bajos fondos ("L.A. quartet"), dos trilogias, -la de "Loyd Hopkins" y "la trilogia negra"- y una tercera en fase de acabamiento -"Underworld USA"- llamada sin duda a ser su obra cumbre, que es la que mas me ha bra ocupado estos ultimos tiempos.

La Historia (secreta) en las dos últimas decadas de los Estados Unidos de America en version "thriller" policiaca es ni mas menos lo que se habra propuesto y conseguido James Ellroy con sus novelas y sobre todo con sus dos ultimas, "America" ("American tabloid") y sobre todo "Seis de los grandes" ("Six thousands dollars") Y si eso es posible, si es cierto que se puede volar sin acabar estrellandote hasta las mismas cumbres de una gran literatura de pretensiones sin limites...por unas pistas de despegue tan modesta (de "subliteratura"), como las que siempre o casi siempre ofreció la novela policiaca, por qué no lo debería ser la denuncia politica o ideologica -como la que llevo practicando hace ya años por las vias del internet- sirviendome precisamente de la critica literaria (y no solo) de autores atipicos, de un genero bajo o menor como el que aqui me ocupa.

James Ellroy es un autodidacta a todas luces, un perfecto "self/made/man" de los Estados Unidos, capaz de alcanzar en una encarnacion completa del sueño americano (version de los sixties, "California dreaming") las más altas cumbres, la gloria y la fama sin íimites...tras un descenso (atroz)/a/los/infiernos...Hijo unico de padres divorciados, "kid del año" (1958) como me atrevo a afirmar que lo debio ser sin duda, gracias a su fotografia -con solo diez años de edad- en las primeras planas de la prensa en los Estados Unidos tras el asesinato de su madre (brutalmente despedazada y arrojada en la via pu blica, lo que hasta hoy nunca seria esclarecido), James Ellroy atravesó una adolescencia dificil flirteando con la delincuencia y con las drogas, compartiendo asi la suerte de gran parte de la juventud de entonces y transitando no menos por vias a la vez de lo mas atipicas: joven de su tiempo, y sobreviente al mismo tiempo de su generacion (como asi nos lo sentimos siempre tambien algunos otros....), "hippie" (a medias)...de pelo corto e ideas y militancia (sic) de extrema/derecha (?!); experimentando con drogas blandas y a la vez peligrosas ("lisérgicas") que le llevaron al borde del precipicio de la locura -en la que llegó a caer incluso, cuestion de horas...- y de lo que consiguió apartarse de verdadero milagro, e iniciándose a la vez en unas aventuras peligrosas, de pequeña delincuencia en solitario o casi que darian con el en la carcel...a su manera tambien (no poco atipica).

Me he estado leyendo "Mi parte de sombra" su novela propiamente autobiografica, como una version contemporanea de las Confesiones agustinianas, no se si menos profunda pero desde luego no menos credible, y me habra detenido un poco como es logico en los párrafos donde relata sus experiencias carcelarias, y lo menos que se puede decir es que James Ellroy (dentro del infortunio de su infancia tan traumatizada) habra sido al final un individuo con mucha suerte, en sus estancias en la cárcel como en su problemas de drogas...James Ellroy -el mismo lo confiesa- conocio (aun) el universo penitenciario norteamericano USA (su umbral a penas digamos), de antes de lo que el califica "la gran fractura," de los grande motines raciales de finales de los sesenta, en los Angeles, en Chicago, en Nueva York, en Alabama; de preso protegido por cierto("en la confianza" dicen los portugueses) en prisiones o centros de detencion de poco fuste y cabida, lo que le permitio "contarlo" en verdad y aprender no poco tambien, cierto, aunque mucho menos desde luego que lo que le habria enseñado (en caso de contarlo repito) el paso y la estancia por una gran penitenciaria (USA) no muy diferentes se me antoja de las de Europa, por lo menos antes; de las pentinciarias como de "las prisiones de maxima seguridad" que de este lado del charco así las llaman: la Penitenciaria de Lisboa de despues de Abril (antes de que la cerraran) por ejemplo, o Vale de Judeus en donde complete mis tres y medio años de carcel en Portugal -de años/luz yo diria-a seguir a Fatima...

Pero el gran descenso a los infiernos de James Ellroy, su via "iniciática", de revelacion lo habra sido, no su estancias fugaces episodicas ya digo en las carceles nortemaericanas, sino el viaje interior, de introspeccion sobre todo, como un largo y doloroso calvario, del que su fase de drogadiccion -con todo lo lacerante y decisorio- no habra sido mas que un episodio a penas, que le acabo llevando a reabrir treinta y tantos años despues de los autos el dosssier criminal y judicial del asesinato no esclarecido de su madre a manos de un desconocido. Estuve dudando un rato despues de leerlo, lo confieso -"Mi parte de sombra" me refiero- ante lo que ofrecia todos los visos de una violacion flagrante del deber sagrado de memoria, a su propia madre, en un autor que en ello precisamente, en su explotacion literaria habrá cimentado una carrera fulgurante, como un crimen matricial, padre y madre a la vez de todos los crimens de su novelas....Y acabé concluyendo que no, al contrario, que James Ellroy es hoy por hoy uno de los grandes autores memorialistas del panorama cultural (y literario) internacional de los tiemposo que corren: oráculo de una memoria USA, intima e indivudual para comenzar (feten, de verdad y no postiza o de prestado o de encargo a penas, como acontece en otros paises, entre nosotros...), y "pari passu" colectiva; periodistica, y "urbi et orbe" divulgada... y a la vez criptica y secreta. James Ellroy empieza contando con pelos y señales -sin callarse el mas minimo detalle por sordido y escabroso que fuera-, del asesinato capruloso del que fue victima su propia madre y habra acabado literalmente embelasandonos en el relato novelistico -de vistas a fuera y tambien en sus bastidores y tras el telon como quien dice-, de los grandes magnicidios USA de la decada de los setenta.

Autor "incorrecto" si los haya James Ellroy: su rostro atipico, en sentido literal incluso, es sin duda lo que de el más me habra llamado la atencion, el cebo irresistible que me habra llevado a tirarme de cabeza por asi decir en el mar de paginas de su obra tan atipica, mas aun que el pertenecer a mi misma generacion (la del 68...) Ambiguo y ambivalente a la vez, pero de una ambiguedad y de una ambivalencia perfectamente creíbles (no como la de otros tampoco...) que le habra ganado el interés y el reconocimiento unanimes e incluso criticas benevolentes, y entusiastas incluso a derechas y a izquierdas; no hay mas que repasar para convencerse las paginas digitales dedicadas o reservadas a su nombre. No sé lo que piensa ahora mismo sobre la guerra en el Irak, que en sus declaraciones de hace unos meses al Nouvel Obsevateur (donde di con el por primera vez) no soltaba prenda: si esta en contra me da que se lo calla, por que? sus razones tendrá sin duda...de americano y de patriota, como asi se lo proclama, sin complejos, en las declaraciones periodisticas que de el lei, -"que si amo a mi pais? si, of course, punto- y como así lo respira en definitiva el conjunto de su obra...Por detras de sus ambivalencias y de sus paradojas...

Tal vez por eso que su nombre suene en España poco o por lo menos mucho menos que en otros sitios. Entronizar en la opinion -como lo hicieron en la época de Felipe con los autores de la escuela de Frankfort- a un autor "sui generis" norteamericano (en los tiempos que corren), de simpatias pro/republicanas (!) y que arrastra a su vez un pasado juvenil tan incorrecto? Mucho pedirle tal vez a la clase politica y cultural de la España de hoy, de la presidencia de Jose Luis (Rodriguez) Zapatero...Y la razon sin duda tambien del poco aprecio (es solo un decir) que le mostraron antes los populares a pesar de su pro/atlantismo...tan democratas, tan "neoconsevadores" y tan "correctos" ellos....

El Mal (supremo) de los Estados Unidos -¿de la decada de los sesnta, hasta hoy también?-,tal y como lo da entender James Ellroy en sus denuncia "novelada", lo es no obstante -dira de immediato ya alguno- el crimen organizado representado y simbolizado en la Maffia italiana y en materia de historiografía nortemaericana no hay nada (dirán aún) de más correcto (y pro/demócrata) Las cosas no son tan simples me temo...ni en la realidad, ni en la historia reciente, ni en la obra de James Ellroy tampoco.

(Como cuento demostrarlo, ilustrarlo y explicarlo, lo prometo: continuará, por cierto)