(El Hombre? -pero sí, hombre!-
el Destino de la Mujer?
que ellas lo van diciendo
por casualidad, sin querer)
Lo que me venía a la mente
viéndote desfilar (tú y tu stress)
en la pasarelas aquellas,
brillante y rutilante (en la Red)
o perorando en congresos
de tu esplendor (tu pelo y tez)
de tu sonrisa felina
tan sibilina (pura miel?)
Sirena del alma mía,
cual la diosa Par-the-no-pé!
dueña de una grande ciudad,
su reina voluptuosa y cruel,
centro de las miradas
polo de la Elipse (Mère),
y es la que llevas tras tuya
entre Pasión y Desdén
Que quieres, di, que te pasa?
no llores Tú, mi bebé!
ven, siéntate mi muñeca,
te gusta así, te sientes bien?
y así me bebo los vientos
después de verte una vez,
y asi me paras tú el Tiempo,
Tú, locura de mi Vejez
Que en este mundo global
donde todo se puede ver
"cosas veredes", me digo,
que "lo posible es" (díxit Heidegger)
Que el amor todo lo puede,
y mueve montañas la Fe,
y no pierdo yo la esperanza
de yo tenerte (a la de tres!)
Vanitas (de) vanitatis.../..."
bueno, sí, y a mí eso qué?
que me quité de complejos
viéndote así (y volé y volé) (...)
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