De "nazi romántico" calificaron muchos al ministro de Propaganda del III Reich. Esperanza Aguirre le acaba de gratificar con el sambenito de genio del Mal en una de sus andandas contra Pablo Iglesias y en un contecioso que se va revistiendo a marchas forzadas de todos los trazos de una disputa personalísima entre dos figuras de la clase política española el uno ermgente, y la otra ya veterana y a los que separan tantas cosas . Nadie le ha pedido tanto a la ex-presidenta. ¿Será acaso esa fijacion obsesiva de tantos cargos y políticos del partido en el poder con el nacinalsocialismo y el III Reich algo más que una tentaiva de conjurar el propio pasado familiar, e incluso individual en algunos casos, como lo ilustró el ejemplo de Francisco Umbral que tengo estudiado en mi reciente libro?El candidato ganador de las primarias del PSOE, "un tal Pedro Sánchez" rezaba la noticia de ayer de Yahoo (en español)- es un tipo bien parecido, con aires de galán cinematográfico. "El guapo" le llaman sus correligionarios. Psicológicamente es un detalle todo menos trivial y de lo más pertinente incluso a la hora de definirle (o catalogarle) en la medida que le pone a años luz -así a primera vista (aunque por otra parte muestre gran parecido físico con el líder griego de Syriza) - del perfil de desaliño que se ganaron a pulso los del 15-M.
Y ese tufo (a marginalidad) de una manera u otra -aunque se trate de un desaliño estudiado (y de cierto desastramiento) – lo llevan a rastras cada cual a su manera los dos exponentes más destacados de la sensibilidad indignada en la clase política actual, tal y como se vería renovada en recientes elecciones, y me estoy refiriendo a Pablo Iglesias, el de la coleta –como de mendigo del tardofranquismo (que algunos somos un poco más viejos que él y nos acordamos bien de ciertas siluetas de otra España y de otra época)- y a Alberto Garzón el de la barbita a lo primavera árabe (integrista islámica o islamizante)
Sé poco del nuevo secretario general del PSOE -mayormente lo que he leído de él por internet a toda prisa- y de su curriculum retengo un dato y es su paso por la ULB (Universidad Libre de Bruselas) donde obtuvo un máster en Economía (por lo que leo) y por donde también transitó a rachas o intervalos el autor de estas líneas -lo que me hace pensar que acaso coincidiésemos y nos cruzásemos allí sin conocernos incluso.
Y a riesgo de que se me tome por fanfarrón o pretencioso, se me ocurre también que con todos los fregados en los que en la dicha universidad me vi envuelto, de una manera u otra les preparé o les allané el terreno tal vez a su paso por allí a él y a otros estudiantes o becarios (Erasmo) españoles bastante más jóvenes que yo (como él) y por supuesto con más credenciales democráticas -llegado el caso- que las mías (o políticamente más correctas, y sin el sambenito que yo arrastraba por supuesto)
Sé poco ya digo de Pedro Sánchez, aparte de sus orígenes extremeños (de esa España del Sur que arrastraba loso señuelos del socialismo en amplias capas de su población como un atavismo de generación en generación que decía mi difunto padre, o como una segunda natura)
La parabola del rey desnudo en versión de nuestros días (políticamente incorrecta) Al gobierno mundial de los Sabios (financieros) se le ve el rostro -sionista, judío- y no sólo el plumero desde hace un buen rato más de la cuenta, pese a las cortinas de humo de los movimientos indignados, sus simples marionetas. ¿Soros, un mago ilusionista y electrón por libre apenas como nos lo presentan los medios, tirando liqudez (desde un helicóptero) sin ton ni son a manos llenas como lo preconizaba su amigo Bernanke (y más que amigo) "Helicóptero Ben" (de Ben Salomón) como se le conoce en los States? ¡A otro perro con ese hueso. Tentáculos mas bien uno y otro de la Reserva Federal, "inyectando liquidez" entre los suyos, y ni un céntimo a los extraños (¡estaría bueno!) "Yo no le regalé nunca un doblero a nadie. ¡Pero qué se han creído!" Declaró una vez Juan March, amigo de Franco, espía inglés y judío de Mallorca(...)Las declaraciones de nuevo y flamante secretario general del partido socialista que acaba de hacer en dirección del partido Podemos, fulminantes y sin el más mínimo de los rodeos invitan a circunspección y a seguirle la pista atentamente (por propios méritos) en lo sucesivo.
Y es sobre todo esa alusión suya a los riesgos que siguen planeando sobre España y los demás países occidentales de una Gran Depresión como la del 29 con propuestas radicales y demagógicas -emblemáticos en extremo del partido de Pablo Iglesias- de dejar de rescatar lo bancos y de no pagar la deuda así por las buenas.
Con la esperanza secreta o con todas sus confianzas -que eso no lo dicen- puestas en los milagros y panaceas de la democracia (real, e universal) que en el supuesto de un escenario catástrofe como el que están propiciando y que anhelan con sus fuerzas, al final acaba fatalmente revistiéndose de los perfiles y trazos inhóspitos e inquietantes -para muchos entre los que me encuentro por lo menos- de mecenas judíos como ese del que ocupé en mi entrada de anteayer, que financio a chorros de dólares -como quien los arroja desde un helicóptero en el símil que hizo (ruidosamente) celebre al anterior residente de la Reserva Federal Americana Bernanke (Benjamín Salomón de su nombre y Ben de diminutivo conocido en los medios financieros como Helicóptero Ben- la movida del 15-M y que a todas luces (y salvo prueba de lo contario) cubre ahora también de su manto protector de rey Midas (o de rey David o Saúl más bien) al partido Podemos y su mesías Pablo Iglesias. Así sí que se puede dormir tranquilo, no me digan, y mirar el futuro con tranquilidad aunque estallen mil burbujas en el planeta y se hunda todo en redor.
¿Viva el FMI pues? No tan rápido que no he dicho eso ni me lo harán decir tampoco. La prensa de hoy trae la noticia con gran destaque del acuerdo concluido ayer al margen del Mundial del Fútbol en Brasil entre cinco grandes países emergentes -Rusia, el Brasil, la India, China y África del Sur- que se presenta como una alternativa (creíble) al orden monetario internacional -que estudiamos y nos aprendimos como palabra de evangelio en mis años de estudiante de Ciencias Económicas en la Complutense- fundada en Bretton-Woods -donde se consagro la hegemonía anglosajona en las postrimerías de la segunda guerra mundial, tras la victoria sobre los nazi fascismos.
Dónde esta Putin, se preguntaba sin duda muchos sin duda hasta ayer apenas. Pues ya ven donde estaban dándose un garbeo por el Mundial con una escala en Cuba que aquí ya comenté, que el premier ruso -nuevo zar le llaman algunos- se ve que no da puntada sin hilo él tampoco. ¿Una alternativa creíble en germen al orden actual monetario y financiero internacional en vigor por donde nos vino la crisis?
El tiempo lo dirá pero se merece una oportunidad de muchos los que padecen la crisis y que por más que acepten teorías del caos en la ciencia económica juzgan suicida e irresponsable –y criminal- el especular sobre el caos al socaire de la globalización como acostumbran hacerlo ciertos sabios y magos magníficos y como parecen propiciarlo los de Podemos y sus corifeos en los medios y en los sectores universitarios y académicos.
La crítica del nuevo secretario del PSOE al partido de Pablo Iglesias me parece desde luego mucho más objetiva y equitativa y responsable que la andanada políticamente tan correcta que acaba de lanzar atizando viejos fantasmas entre ellos el de aquel genio de maldad -válgame un demonio de palo como habría dicho (al revés) Don Ramón- que fue el ministro de Propaganda del Reich, Goebbels, según Esperanza Aguirre.
¿Hasta cuándo vamos a tener que seguir soportando esa manipulaciones tan groseras dela historia a las que acostumbra el partido del gobierno y sus principales figuras, sobre todo mujeres, en cuanto que se les suelta la lengua? Si Goebbels fue la encarnación del mal, que empiece barriendo en casa propia la antigua presidenta de la comunidad de Madrid, que tuvo entre sus antepasados inmediatos a no dudar más de uno que les puso velas (y más que eso) a aquellos genios del mal en sus momento.
En el tema del control de los medios lo tiene sin duda muho más fácil -a la hora de argumentar y de convencer (incautos)- el líder de Podemos que no deja así –dicho sea de paso- de tirar piedras contra su propia tejado. Porque de qué otra figura de la política española actual se podría decir que sea una criatura tan perfecta como lo es el de los medios, incluso de algunos de ellos (como la difunta Intereconomía) en las antípodas ideológicas de las posturas que él viene enarbolando
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