jueves, junio 25, 2015

ENTRE FILO SEFARDISMO Y ANTI SEMITISMO FRANQUISTAS A ASUMIR TOCAN

CEDADE –Circulo Español de Amigos de Europa (1966-1993)- fue un fenómeno primordialmente barcelonés, que como tal seguí siempre a distancia. Como fuera, no dejaban de recoger –y asumir- una tradición española entre filo sefardismo primorriverista y anti-semitismo franquista (primera época) que hay que acabar asumiendo si queremos salvar la memoria de esas décadas de historia española, y de régimen de Franco y del anterior, de Primo de Rivera. En su carta al Papa -sobre Auschwitz (de 1979)- Leon Degrelle no hacía más que recoger observaciones de sentido común a partir de datos históricos irrefutables, como lo compruebo tras leerla sólo ahora, algo de lo que me retuve hasta hoy por una cuestión formal y era por el acatamiento que profesaba el autor en su misiva hacia la figura del papa polaco, que se contradecía abiertamente con el contenido del texto, de lo más franco y desenvuelto, al límite de la burla (y del desacato) Y ni siquiera el Tribunal Constitucional le condenaría por sus afirmaciones de orden histórico sino por una consideración de orden no poco subjetiva, a saber, el haber herido (sic) los sentimientos de las víctimas. Víctimas las hubo en los dos bandos durante la Segunda Guerra Mundial. ¿Alguien me lo podrá negar en su sano juicio? Y el acatamiento (nominal) de la carta al papa -que no obtuvo respuesta alguna-, hay que comprenderlo (un poco) Degrelle acabó encontrando al final refugio en medios españoles próximos del Opus Dei, y un colocarse abiertamente al margen de la iglesia hubiera hecho peligrar (seriamente) su refugio en España. Tan simple como eso
El contencioso que opone Jean Marie Le Pen a su hija las horas que corren es en el fondo una querella de orden íntimo, personal y familiar pero no se puede negar que se reviste a la vez de profundas líneas divisorias de orden histórico, referentes sobre todo a la Segunda Guerra Mundial, las que siguen dividiendo hoy a los franceses –aunque mucho menos que la guerra civil del 36 lo siguen haciendo entre españoles-, entre la Colaboración y la Resistencia.

Lo viene a recordar un artículo en la prensa francesa de hoy sobre el cambio de estatutos que intenta llevar adelante Marine le Pen –para así poder suprimir el cargo (vitalicio) de presidente de honor del partido que ostenta su progenitor- y en el que se evoca el redactor de versión primera de aquellos, a saber Victor Barthélémy un nombre que no dice sin duda nada o muy poco a la mayor parte de los lectores de este blog, y que sin embargo se ve estrechamente ligado a nuestra historia española y en particular a su capítulo de guerra civil del 36 que fue número dos de Jacques Doriot que tampoco les dirá mucho tal vez aquí algunos aunque poco ms sin duda alguna, por tratarse de una de la figuras más destacadas de la Colaboración en Francia, de una trayectoria particularmente atípica e interesante en la medida que fue uno de los fundadores del partido comunista francés, en el periodo de entreguerras, tras la primera guerra mundial en la que combatió, y que acabo rompiendo en con el partido y pari passu con el comunismo soviético en los años treinta ya en la época de Stalin.

Víctor Barthélémy, antiguo comunista también como Jacques Doriot al que siguió en las fila del Partido Popular Francés (PPF) que este fundó, permaneció largo tiempo en España en zona nacional durante la guerra y permaneció fiel siempre después a ese compromiso suyo español, ideológico y sin duda del orden de lo personal e intransferible.

Según el artículo al que aludo más arriba el Frente Nacional habría copiado los estatutos y la estructura del partico comunista francés de los orígenes al que pertenecieron tanto Víctor Barthélémy como Jaques Doriot, dándose una estructura rígida y autoritaria a base de un secretario general y un comité central a imagen y semejanza de los partidos comunistas en la era soviética acorde a los trazos más emblemáticos que se les conocen. Y el reto que lanza ahora la hija a su padre en el plano organizativo lo es también como digo en los planos históricos e ideológicos.
Ramón Serrano Suñer fue exponente emblemático de la etapa anti-semita del régimen de Franco. Un anti-semitismo intelectual, doctrinal, ideológico, exento –en la práctica- de persecución y si se persiguió a algunos judíos lo fue por izquierdistas o por masones o institucionistas –miembros de la Institución Libre de Enseñanza (donde a fe mía que abundaban los judíos)- y no por su confesión religiosa (judía) o por sus orígenes raciales. Un pasado que hay que acabar asumiendo, si queremos acabar ganando a medio o a largo plazo la batalla de la memoria
Lo que se trata –siempre con el norte puesto en la (inalcanzable) des diabolización del partido fundado por su padre- es de proseguir con la desnazificación o desfascistización de Frente Nacional ofreciendo prendas y más prendas de credibilidad a los encargados de repartir credenciales democráticas en la política francesa actual, que siguen siendo siempre mas o menos los mismos (de padres a hijos) Y quien dice desnazificación piensa de inmediato –como un sambenito de infamia imperecedero e imborrable- en anti-semitismo y en anti-semitas.

Para Marine le Pen, su (honorable ) padre se ha vuelto de pronto el diablo en persona, y un diablo además –se diría que por definición-, incorregiblemente antisemita, sin redención posible (ni en esta vida ni en la otra) Y sin duda por aquello que más sabe el diablo por viejo por el diablo Jean Marie Le Pen, padre de Marine, se la habrá devuelto ahora cambiada, acusando a su hija –mientras se desarrolla el voto correo de los militantes- de convertir al frente Nacional en escudo protector de la comunidad judía en Francia. No me caso con nadie, huyo (por instinto) de las sectas y de las escuelas (en francés “école”) y el anti-semitismo en Francia –me refiero al antisemitismo contemporáneo- creó sin duda escuela, a seguir a la revolución francesa.

Los legitimistas franceses de la Restauración acusaban de fautores principales de la Revolución a los masones, y en un clásico en la materia que me leí en mis años de Ecône del abate (abbé) Barruel -sobre los orígenes (sic) del jacobinismo- no se hace mención de los judíos en particular, una o dos generaciones más tarde no obstante, surgiría un anti-semitismo francés de estirpe laica o republicana más bien que acusaba de todos los pecados de Israel, a los judíos y en particular a los judíos refugiados en aluvión en Francia tras la guerra franco-prusiana (1870)

La Acción Francesa de Maurras venia de otros horizontes y arrastraba otras raíces históricas e ideológicas, pero unos y otros, antisemitas de izquierdas y anti-judíos de derechas se darían la mano con ocasión del célebre affaire Dreyfus, que según Maurras –un Maurras primera época- desató en Francia un fenómeno de efervescencia social entre los pro Dreyfus –de indignación callejera cabria llamarlo hoy- que él comparaba en sus trazos más emblemáticos y característicos al nacimiento del cristianismo primitivo (léase del judeo cristianismo) Anti semitismo, una tradición francesa. Y en la medida que el nacionalismo francés pretende asumir todo el pasado o la historia de su país en bloque –como postulaba Napoleón (“en bloc”)- estaba fatalmente l obligado o destinado o sentenciado a asumir también esa tradición, por francesa más que otra cosa.

No vemos pues en Jean Marie Le Pen –lo que aquí quiero venir a decir- un horroroso anti-semita sino un espíritu libre, alguien que pretende al menos liberarse –tanto en su forma de pensar como de expresarse- de interdictos y de tabúes, que se ven erigidos en el panorama político e ideológico francés –y del mundo actual-, herencia ineluctable del final de la Según Guerra Mundial en el 45. Las ideas -ideas solares las llamo Rafael Sánchez Mazas- en la estela del dominico italiano Campanella- ¿son acaso condenables?

El debate y la polémica están servidos con la persecución –que continúa- del antisemitismo histórico –léase el negacionismo o el revisionismo- en base a unas leyes de excepción que se fueron sucediendo las últimas décadas en los diferentes países europeos, España incluida.

Leon Degrelle hacia el final de su vida se vio condenado en España –en una sentencia ratificada por el Tribunal Constitucional- por delito de anti-semitismo, por iniciativa de una judía húngara residente en España que ni siquiera tenía la nacionalidad española (mientras que Degrelle sí que la tenía), y la condena sin duda marcó un precedente y creó jurisprudencia. La jurisprudencia democrática es no obstante un rio de aguas revueltas que se sale de madre por donde menos se espera, y así, casos sonados de estos últimos años se vieron saldados por absoluciones o desestimaciones en apelación, o en primera instancia.

En los comentarios aparecidos en la red con ocasión de la condena a un ex diputado belga a la que me réferi ayer en este blog, en mi última entrada, se habrá hecho observar la ley del embudo que parece presidir la comparación de la Shoah con otros genocidios de la era contemporánea como el de los tutsis en Ruanda –hasta dos millones de víctimas inmoladas en cuestión de días (por no decir de horas a golpes de machete sin uso armas de fuego siquiera) y en nombre nota bene del papa Juan Pablo II– y del genocidio armenio, que lo fue sin lugar a dudas, y que en pocos países occidentales se ve reconocido hasta ahora.

Madre del cordero el genocidio armenio. Porque si hay que creer a lo que el profesor Nolte escribe en uno de sus libros fue nada más y nada menos la copia original –Uhrmodel en alemán- de las matanzas y los genocidios que se sucederían en la era contemporánea. El Gulag, modelo original, Auschwitz, la copia apenas. Esa fue la fórmula que el historiador alemán habrá hecho célebre.

De los escritos de Nolte no obstante se deduce que al genocidio armenio fue el precedente primero tanto para nazis y soviéticos. Von Scheubner, uno de los compañeros de Hitler de la primera hora, caído blanco de las balas de la policía en el putsch de Múnich mientras marchaba al lado del Fuhrer, antiguo oficial del ejército, había sido en la primera guerra mundial agregado militar prusiano en Turquía y como tal, había sido testigo de primera mano del genocidio armenio, así lo afirma Nolte en su obra “Guerra civil europea”

En España y antes de que se impusiese en la transición un filo judaísmo política e históricamente correcto y a la vez intratable e intransigente –como lo demuestra el caso de Degrelle y de otras condenas por delito de negacionismo-, el régimen de Franco se vería caracterizado por una oscilación conforme a los azares y vaivenes de la política internacional, del discurrir y desenlace de la Segunda Guerra Mundial y de la guerra fría, a partir de un filo sefardismo que inauguró el General Primo de Rivera en 1924 –acordando a los sefardíes la nacionalidad española- hasta un anti-judaísmo que llegaría por momentos a confundirse con un anti-semitismo explicito, acantonado no obstante –salvo excepciones- en el plano propagandístico, y del que la figura más emblemática lo seria Serrano Suñer, cualquiera que fuera su trayectoria con posterioridad a su cese –en Septiembre del 42 (inicios de la batalla de Stalingrado)- de ministro de exteriores del régimen de Franco.

Un pasado que tenemos que asumir los españoles, si queremos salvar en la memoria del bando vencedor el Primero de Abril y las décadas del régimen de Franco que no fueron un paréntesis como lo pretende la ley de la memoria histórica –y sus voceros (entre ellos el 15-M y los de Podemos)- sino parte integrante de nuestro pasado, y si queremo, en resumidas cuentas, poner fin de una vez a la guerra civil interminable.

Como acabamos asumiendo todos –sin distinción de izquierdas o de derechas (tal y como se comprobó en el Quinto Centenario)- el legado de los Reyes Católicos


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sobre las restricciones realmente escandalosas al acceso a la información puedo hacer constar que en los ordenadores para uso público quecontrola el Principado de Asturias es imposibla acceder
a multitud de páginas web que evidentemente no son del agrado del PSOE.
Asi por ejemplo no se puede acceder a direcciones como
www.elmanifiesto.com

Incluso a una pagina del grupo PRO VIDA de Asturias, por el hecho de ser "anti-abortista", está bloqueado su acceso.

http://aborto.cc/asociaciones-provida-en-asturias.html

Esto es lo que he leído en esta dirección:
Con ocasión de haber leído en LA NUEVA ESPAÑA como Asturias, como el conjunto de España, Italia, Alemania, (y en general toda Europa) son los pueblos o naciones que menos natalidad tienen en todo el mundo...

...considero interesante informar que hoy, en la plaza de la Escandalera, de Oviedo, tiene lugar un acto publico --autorizado-- en denuncia de los más de cien mil abortos que se practican cada año ...solo en España....

En Asturias mueren cada año el doble de personas de las que nacen...

La convocatoria del citado acto público ( a las 18 horas) es a cargo de

Asociación Asturiana en Defensa de la Vida
C/ Pérez de la Sala 26, entresuelo puerta 3
33007 Oviedo
Teléfono: 985259131
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...En la plaza de la Escandalera hay una pancarta que proclama que ABORTO ES TERRORISMO....!

yo diria que ABORTO es GENOCIDIO...
pues se impide el nacimiento de seres humanos necesarios para que se realice el reemplazo generacional...

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Y considerando todo esto... es penoso constatar que cuando se trata de acceder a una pagina web de la Asociacion Asturiana de PRO VIDA, desde un ordenador dependiente del Principado... aparece el mensaje de...

ACCESO DENEGADO!!!

ES DECIR, si se intenta entrar desde un ordenador de la Biblioteca Pública del Fontan, en Oviedo, en
la siguiente dirección:


http://aborto.cc/asociaciones-provida-en-asturias.html


ACCESO DENEGADO

Anónimo dijo...

http://www.elespiadigital.com/index.php/noticias/historico-de-noticias/9864-piden-6-meses-de-carcel-para-historiador-revisionista-frances-robert-faurisson

Juan Fernandez Krohn dijo...

Te lo publico con mucho gusto, ya sabes no obstante como pienso -si eres quien creo- por haberme expresado claramente en el tema y no me retracto ni un ápice, y, me sigo alegrando de la retirada del proyecto Gallardón, que me parecía -por sectario y abusivo e influenciado por lo históricamente correcto (y filo judío)- nocivo y contraproducente. En el tema en concreto de las malformaciones -graves- que no incapacidades (aunque mezclen tanto las cartas los anti-abortistas)

Y me alegro también de las restricciones que introdujo más tarde -de la autorización de los padres- el partido en el poder, que me parecían razonables y con las que estoy de acuerdo. Te recuerdo no obstante que los anti-abortistas asturianos les dieron las llaves del poder del antiguo al PSOE en el Principado. No creo que consideraciones natalistas deban mezclarse con otras de estrictamente moral y religiosa como suelen hacer los grupos pro vida situados todos ellos –a España, me refiero- en la órbita de la iglesia.

Hay mucha ley del embudo (eclesiástico) además en ese tema. ¿Le exigen o le exigieron acaso certificado de anti-abortismo a Pablo Iglesias y a los de Podemos los medios de la derecha religiosa (la Gaceta, Intereconomía, el Gato al agua) artífices principales del auge de aquellos en la política y en la sociedad españolas? Se lo exigen a los que saben que tienen bien seguro bajo su férula (y su poder de chantaje moral, en el foro interno)

Y no creo honestamente par ser claro del todo que se pueda equiparar los abortos con terrorismo o con genocidio, como lo pregonó –hasta la sociedad- el papa polaco que parecía saber mucho de terrorismo y de genocidio de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial y de la inmediata posguerra y concretamente la resistencia armada durante la ocupación alemana, y más tarde del exterminio –por millones- de los alemanes del Este a manos de los polacos en la inmediata posguerra, y que no tuvo nunc el menos gesto o palabra de reconciliación en dirección de los alemanes, él, que pertenecía a un pueblo enemigo histórico de aquellos, como lo eran los polacos.

Y piensa de mi lo que quieras (si eres quien yo pienso) Que como dicen los portugueses, quien no se resiente no es buena gente