En román paladino, "QUEMADO POR EL SOL", film ruso post/soviético -Premio del Festival de Cannes, de 1994-, que vi en Bruselas con la mayor sorpresa y especial atención. Una parábola guerra civilista de la Historia de Rusia contemporánea, comparable (mutatis mutandis) a aquella de la que los españoles estamos (ansiosamente) a la espera. En aras de la Reconciliación
Una de las pistas mas inexploradas y más fértiles potencialmente en la resolución del magma de enigmas que nos sigue brindando nuestra guerra civil, nos lo ofrecen la historia y la memoria de los vencidos no de la guerra civil del 36, sino del carlismo (definitivamente) vencido y de la ultima guerra carlista madre y matriz de la del 36 que la siguió. Y para ello a modo de signos o señales de pista (sic) nos serviremos a guisa de hilo conductor, de una serie de hitos mayores, la de figuras o personajes históricos de dicha procedencia y de gran relevancia y protagonismo del bando de los vencidos de nuestra guerra civil. Primero de los cuales nos viene a la mente el nombre de Ignacio HIDALGO DE CISNEROS, ministro de Aviación del bando rojo/republicano, cónyuge de la también aristócrata Constancia de la MORA, nieta de Don Antonio MAURA -de la que acabaría separándose al finalizar la guerra-, y con una brillante hoja de servicios a cuestas remontándose a la guerra del RIF en la que participó. Y ahí, al hilo de mi relato, viene curiosamente a figurar un testimonio que trasmitiría él mismo de forma indirecta, en sus memorias, y es sobre mi tío abuelo (por alianza) Enrique MICÓ, compañero suyo de armas -del Ejército de Tierra, mi tío, cuerpo de Intendencia- al que le unían fuertes lazos de amistad y de camaradería -desde los tiempos de la guerra del RIF, y al que evocaba en sus Memorias, en recordación de las noches que compartieron juntos de vuelta a la Península -en MADRID-, de vida bohemia, diciendo (de un tono jocoso y de aire divertido) que no recordaba de haber conocido o visto en su vida a nadie mas juerguista (o algo así) que aquél. Coincidente grosso modo con los testimonios de la memoria familiar -de mis abuelos y de mi tías abuelas- que llegaron hasta a mí. Un aventurero más que otra cosa (en la paz como en la guerra), pues, el ministro (comunista) del Aire (o de Aviación) de la Republica, con una Memoria de vencidos -personal y colectiva- que reivindicar, rehabilitar y defender. Otro hito mayor justo a seguir, es el de Andrés (o Andreu) NIN, el infortunado fundador y jefe del POUM (trotskista o según las fuentes marxista-leninista, anti-estaliniano pues) de procedencia familiar igualmente carlista, como el anterior , y que sea tal vez el mayor de todos los enigmas de la guerra civil, en su trayectoria como en las circunstancias de su muerte, asesinado tras verse salvajemente torturado -hasta la desfiguración (...)- sin que sus raptores consiguieran no obstante hacerle confesar todos los cargos y "horrores" (de fascista) de los que le acusaban (verosímilmente por ordenes directamente emanadas de la URSS). Fiel a sí mismo pues, hasta el fin. Que me haría recordar el personaje aquél del film ruso postsoviético -de octubre de 1994- "Quemados por el sol" De un antiguo miembro de la policía zarista -y de los ejércitos blancos (...)- reconvertido en agente de STALIN, que vuelve a la tierra de los suyos a ajustar cuentas, al cabo de los años, al rival (amoroso), de la vieja guardia bolchevique, que le había robado a su amor de juventud, y al que lleva a la muerte bajo tortura en una de las últimas escenas del film, a la que siguen otras para terminar, donde se le ve presa de remordimientos y abrazado a la vez (ebrio total) a una de las pancartas propagandísticas del "padrecito de los pueblos" que proliferaban en postes y paredes de la vía publica allí. Como "quemado por el sol", sí. Así lo recuerdo yo.
Y de la biografía de aquél, retuve a su vez algunos datos que se me antoja entresacar de interés para mis lectores. Y fue su postura ante la persecución política y religiosa (feroz) desatada en Cataluña, los primeros meses de la guerra civil . "La gente de izquierdas ha resuelto el problema de la Iglesia -declaró- y es no dejando ni una en pie" A lo que añadiría como a modo de contrapunto -o de oposición dialéctica más bien- su postura resuelta contra "el atentado individual" Y el tercer caso del que me he propuesto hacer mención aquí es el de un personaje de la bohemia madrileña se principios de siglo, -"un 98 menor" los llamaría UMBRAL-, de la obra "Desgarrados y excéntricos" de Juan Manuel de PRADA (próximo, por un intervalo, de aquél) Y es el de Pedro Luis GALVEZ, poeta y anarquista fusilado al final de la guerra civil, que habría estado implicado en la muerte de Pedro MUÑOZ SECA al que habría brindado un beso (poético) en la frente, él, de chequista y el otro, preso durante la guerra, poco antes la muerte del dramaturgo, muerto fusilado justo después. Un personaje como sea, de fuerte colorido (como aficionan de decir los belgas) y del que se seguirá disputando (apuesto) entre las muchas fatales secuelas de la guerra civil interminable, "por los siglos a venir" Y del que cabe hacer mención a modo de apostilla aquí y es de la fuerte aversión que sentía hacia la monarquía y la dinastía alfonsina y en particular hacia el general (GARCÍA DE) POLAVIEJA, personaje del mayor relieve del regimen monarquico (alfonsino) y en particular de la Regencia de Maria Cristina con la que tuvo estrecha relación, de brillante hoja de servicios -en la última guerra carlista (entre otras), en la que -en el bando liberal- de un gran protagonismo participó. Y blanco de las injurias de Pedro Luis GALVEZ (como no podía ser menos, apunto yo) Que le valieron a éste condena y pena de cárcel (atención)
Y a modo de epilogo de esta disquisición sobre la guerra civil del 36 y el carlismo vencido el siglo anterior, no puedo aquí menos de añadir un testimonio personal e intransferible y es de la memoria familiar de la guerra civil en el pueblo de los míos por la vía paterna, MANCHA REAL, provincia de JAEN. EN donde jugó un papel de la mayor importancia y relieve, el contencioso o problemática -remontándose al siglo anterior- de las desamortizaciones eclesiásticas (sic), uno de los caballos de batalla y pliego de cargos y acusaciones del carlismo vencido contra el bando liberal alfonsino de los vencedores, revestido de rabiosa actualidad a dia de hoy y es en el marco del debate desatado por las leyes de Memoria en la que se ven fatalmente emplazados y puestos en la picota -nombres y apellidos, y precios de las fanegas compradas- los compradores "sacrilegos" de bienes eclesiásticos desamortizados (antepasados inmediatos de los terratenientes crminalizados y calumniados de los tiempos de la guerra civil)-a los que la Iglesia jerárquica (a aquellos, hasta hoy) nunca inquietó. Como en un retorno de boomerang de la vieja reclamación (guerra civilista) del carlimo vencido (el siglo anterior) ¿Madre de todas nuestras guerras civiles (como yo la llamé), la guerra civil castellana -1351-1369- (de los 18 Años), o la estirpe misma del pueblo/español? La pregunta del millón
Vista de la plaza y de la iglesia catedral de MANCHA REAL, provincia de Jaén. El pueblo de mis familiares e inmediatos antepasados por la vía paterna. Donde tuvo un protagonismo mayor -comparado a otras localidades de España e incluso de Andalucía-, el problema social derivado del latifundio y en donde se presta una considerable importancia, en la narrativa en vigor sobre la guerra civil y sus causas allí, al contencioso de las desamortizaciones eclesiásticas (s. XIX), donde se puede apreciar una extraña coincidencia de puntos de vista -a la hora sobre todo de señalar con nombres y apellidos y los menores detalles de los contratos de aquellas compras, a familas enteras herederos o descendientes los compradores sacrílegos (sic) de aquella época, entre la izquirda y la memoria de los vencidos del 36, y la del carlismo vencido (el siglo anterior)