En la guerra como en la guerra amor,
viéndole el rostro de cerca
de lúgubre y de macabro:
lo que el Tiempo me reserva?
al cabo de los mil sueños
de mi juventud señera
que se fueron uno a uno
sin decir adiós siquiera!
Salvo uno que se quedó
por qué? que lo diga mi estrella
que me orientó y me guió
por desiertos y mesetas
Que se quedó por ti, mi amor
porque le abriste la puerta
solo a él y ya muy tarde
aquella noche tan negra!
y al abrirme lució el sol
de tus cabellos, pequeña,
rubia de mil trigales,
de tu sonrisa tan tierna
de tus andares tan cautos,
y de tu mirada aviesa
y de tu sombra y del misterio
del melocotón de tu boca!
que me llama: "atrévete!,
sucio/español, cabeza loca!
por qué esperas, a qué temes?"
(riéndote de mi y mi sombra)
No tengo miedo de nadie
y menos de ti, mi sirena!
sólo que estoy esperando
el tiempo de las cerezas
cuando tú al fin te decidas
y el Tiempo pare su rueda
-ese tiempo que malgasté-
y se pose raudo a mi vera
y siempre al aire y al ritmo
que a cruzarte yo así quiera
cuando los tiempos se cumplan
y ría y ría la primavera
y triunfes tú y tu estilo
Mujer de Clase! (obrera)
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