miércoles, abril 18, 2018

Estrella y Mujer

¡Poesía al alba, ruiseñor,
la que te pide el cuerpo ahora!
La que tenía yo bien enterrada
Tras mis noches de zozobra

Que renace fuerte en mí
cual alborada o luz de aurora
cuando te cruzo insólita al pasar
en el día primaveral ¡Tú y no otra!

Qué cambiada estabas mi amor
En la ausencia (¿o en la deshora?),
pero eras siempre tú la misma
en tu belleza y en tu sombra

¿O era el sol brillando a rabiar
O el viento por la calle angosta?
¡Que va! Ni los cambios ni el azar
sino la vida que me decía ¡hola!

Viéndote amor justo al pasar
Sorprendente (¡eso siempre!) ¡y misteriosa!
Viéndote cuando no te creía aquí
¡Qué aparición, niña hermosa!

Y me pregunto lo que tu tendrás
Que cuando reapareces como ahora
amanece otra vez (Grecia) en mí
Y es que eres buena/nueva ¡niña tonta!

Y poniéndome a silbar y a reír,
se van, de la culpa/negra (¡odiosa!),
las nubes, una detrás de otra,
¡Oh mala/nueva! Peor que todas!

que hace dudar, ¡y llorar!
¡Del apóstol de la verdad a medias
que estuvo a punto amor de hundirme
¡Que me arrastrasen las olas!

Por eso fue verte y reír
¡Como un poseso! (yo a solas)
-porque no esperaba verte más (…)-
Cuando irrumpiste, caprichosa

¡Estrella y mujer! Celosa

2 comentarios:

Anónimo dijo...

http://nonpossumus-vcr.blogspot.com.es/2018/04/comentario-eleison-n-dlxii-562-21-de.html

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Anónimo dijo...

https://pormiedoalosjudios.wordpress.com/2018/03/13/haavara-el-acuerdo-de-los-judios-con-los-nazis/