martes, mayo 08, 2018
Otra Ninfa
Todo llena de las huellas
De tu presencia siempre viva
Y tu ausencia –¡larga!- en cambio
deja a la ciudad vacía
¿Te escondes tú o es al revés, ninfa?
Que raudo caí en la cuenta
de lo que realmente sucedía
que aquello no era más que un disfraz
de otra cosa muy distinta
Lo que estaba en juego (o en liza)
Y es que era un grandioso desafío,
el amor que yo sentía
En los prendados de tus ojos,
Y en los que les protegían
¿Será eso verdad o una burda mentira?
Y es que eso querría decir
lo que dice (y que “va a misa”),
que no era pasattiempo trivial,
Sino que en él me va la vida
Misa /negra, ¿y qué es eso amor?
Maliciosa me preguntas
-¡oh lo bajo (y vil) en la Mujer!-
Y es que no sé hacer de víctima
(que no hay amor sino hay lucha)
Solo en medio del ruedo
o en estadio de la villa olímpica
Así es como yo me sentía
En medio del espectáculo aquél,
De la ciudad triste y vacía
Vacía de ti, dulce amor,
Como una ciudad en ruinas
Vacía de mí, dulce amor,
Sin murallas de protección,
Ni "antemural(e)", ¡La patria mía!
Dispuesto a lidiar (a muerte)
-¿apuesta o visión de profecía?-
toros –o tigres de papel!-
que el color rojo tanto excita
Y contra mí arremetían
Y saldré a hombros júrolo
Siempre en el centro (o en la mirilla) (…)
estrella polar, centro del mundo
Mirándome tú bien fija
¡Mi besana, mi divisa!
Y en esas cavilaciones
surgió de pronto otra/ninfa,
¿igual a ti? ¡y qué! (¡cambiante luna!)
y la ciudad se llenó (igual que yo):
mi mirada en sus senos (prietos)
¡Y mi alma respiró tranquila!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario