lunes, julio 14, 2008
VANGUARDISTAS DE CAMISA AZUL (y 5) Epilogo en clave hispano/atlantica y "luisiada"
(A Isaac Ferreiro, viejo amigo y camarada)
11 de Julio, fiesta nacional del Portugal antiguo, en Bruselas. Verano del 2008. No queria quedarme, lo confieso, de verdad que iba a pasar de largo entre aquel gentio que llenaba la plaza Flagey, del que habra casi hasta hoy sido mi barrio de Bruselas, en un concierto de fado, y de clausura (solemne) tambien de las obras que habran tenido paralizado el lugar durante ocho largos años. Iba ya camino de salir de la plaza como digo, cuando me senti alcanzado de pronto de un certero saetazo por dentro, en lo mas hondo, por culpa del lamento desgarrador que se escapaba de la voz desbordante de octavas y decibelios de la interprete, la joven fadista Mafalda Arnauth –todo un simbolo, su nombre, de un Portugal de lo mas rancio y a la vez cosmopolita de antiguo- toda de negro, en un decorado incomparable de ambiente portugues a la antigua, en la penumbra del estrado, medio a oscuras, rodeada de guitarristas o digamos mas bien de acompañantes instrumentistas, virtuosos y especialistas de todos los instrumentos tipicos del fado –guitarra portuguesa, parecida a la mandolina ; viola/de/fado como la guitarra nuestra solo que mas grande y guitarra/argentina con su tipica simetria…- sobriamente vestidos todos ellos, de chaqueta y corbata (oscuras) por supuesto, tan portugues y tan lusiada ya digo el escenario, que solo faltaban la luz de las velas, las tazas de "vinho verde" y el grito patriotico de « ¡Ca esta Portugal ! » (de rigor en el Estado Novo) y poder asi dar un salto acrobatico en el tunel del tiemp hasta antes del diluvio, hasta el Portugal del 24 de Abril me refiero, el de la vieja/señora….Y faltaban ademas, salvo contadas exceciones entra el gentio,–se me olvidaba el pequeno detalle-los portugueses del barrio en resumidas cuentas, del grupo mas nutrido tal vez de portugueses emigrantes de toda la orografia de la aglomeracion/de/Bruselas , « fatalmente » se diria : dos Españas …a este y al otro lado de la frontera hispano/portugesa…(iEspaña de los cinco/reynos de la edad media y de la Reconquista !.)
Tan conmovido y emocionado ya digo, de aquella voz desgarradora como un chorro o un torrente incontenible que llenaba toda la plaza de golpe de una atmosfera familiar para mi inconfundible, que para que no se me notara la emocion demasiado decidi apartarme un poco sin abandonar el concierto por supuesto, que aguante y escuche impavido y devoto a partir de aquel momento hasta el final, hasta la apoteosis con la que se cerraria, con un publico que aplaudia a rabiar, tan entusiasta que consiguio hasta por tres veces la vuelta al estrado de los interpretes …Era la culminacion como digo de una semana de festejos y de una jornada a la vez marcada por dos commemoraciones colectivas, de los portugeses de Belgica y tambien, curiosa coincidencia, de la Comunidad/flamenca (neerlandofona) en una especie de guiño de la Historia –plasmada en la efemerides que aqui evoco- a un pasado comun a unos y a otros, medieval, un tanto remoto, immortalizado en el recuerdo de la guerra de los Cien Años y cifrado (y descifrado) en la pista borgoñona (o burguiñona)
Por la tarde, una horas antes del con cierto estaba yo charlando con mi hijo, sentados los dos en uno de los bancos nuevos y flamantes de la plaza recien terminada cuando vimos pasar de largo, a toda prisa, un seqsuito muy con currido, rodeados de periodistas y de de policias, y en cabeza, al portuges Barroso, comisario de la UE, todos en direccion del monumento a Fernando Pessoa, que se disponian a inaugurar, en el otro extremo de la plaza. Y digamos que bajo un signo atlantico (y lusiada) mi alma y mi mente, -yo mismo todo entero, o si se prefiere mi lado o fondo atlantico, o « atlantida » y no menos hispano- se pondrian a volar por dentro tras el concierto, hasta el momento éste en que me dispongo a ponerlo todo por escrito, en conclusion o epilogo de mi serie de articulos sobre la vanguardia (pre/fascista) que se habran ido sin querer decantando hacia el tema del estilo o si se prefiere del estilo/decantado –en literatura y en politica como en la vida misma- de aquella version de las vanguardias europeas (pre/fascistas), que aborda en su ensayo la autora alemana. Al calor (y al fragor) de la guerra civil espanola.
La vanguardia en Portugal, como el modernismo (tanto monta monta tanto) se verian asociados aun mas intimamente que en otros sitios –mas incluso que en España- al « fascismo » o pre/fascismo lliterario, en aquellos años que coinciden con el final de la primera guera mundial y la fundacion y consolidacion del Estado Novo, que se verian surcados fugazmente y en sus inicios por la experiencia corta, efimera (en apariencia) y mal conocida del regimen corporativo de Sidonio Pais que habia sacado a su pais de la I guerra muundial (que habia iniciado en el bando de los aliados) Y se ven asociadas sobre todo a nombres emblematicos como el de Fernando Pessoa, por supuesto, del que ya hable, y con él otros tres nombres mas o menos ligados en el recuerdo a la memoria del Estado Novo, y me refiero a Jose Almada Negreiros, a Joaquin(m) Teixeiria de Pascoaes, que firmaba sus escritos « Joaquin(m) » y a Antonio Ferro.
Almada Negreiros, un nombre practicamente olvidado en los años que residi –a la fuerza- en Portugal (de 1982 a 1985), fue uno de los grandes nombres del futurismo portugues, pintor y a la vez poeta y escritor, que legaria un retrato celebre de Fernando Pessoa, y de una brillante carrera artistica y literaria que discurriria en gran parte en los años del estado Novo hasta su muerte cuatro años antes de la revolucion (en 1970), y que se veria caracterizada a la vez de por un cuño annticonvencional, e irreverente incluso, de denuncia de ciertos aspectos de la vida quotidiana y de la sociedad portugesa contempranea suya, y tambien por su contribucion de una manera u otra a la imagen y esfuerzos de propaganda del regiimen del Estado Nuovo.
Joaquin Teixeira de Pascoaes es menos conocido que el anterior y aunque su obra se deba catalogar mas bien dentro de una corriente simbolista y a la vez neo-romantica ofrece tambien ciertos rasgos vanguardistas inconfundibles, en particular sus trazos « oniricos » -de acumulacion de imagenes- que lo emparentan a los surrealistas. Y entre sus poemas destacaria uno de titulo revelador, « Señora de la Noche »…
Poeta de la noche y de la « saudade », e hispanista convicto y sincero, el portugues « Joaquim » fue amigo de Eugenio d’Ors, que le invito a dar conferencias en Barcelona en los años veinte, y fue tambien gran admirador de Unamuno, lo que le acercaria del poeta canario Alonso de Quesada quien se habia solidarizado con el rector de Salamanca duurante su confinamiento en Lanzarote, y que tradujo al castellano unas poemas de Joaquin sobre la Atlantida, en los que sentia el soplo poetico y espiritual de un mundo o un sustrato cultural "atlantico" (y occidental) que el mismo como español/canario compartia. El poeta español Luis Antonio de Villena atribuye a Joaquin la paternidad o el padrinazgo poetico de dos vocablos tipicamente portugueses –el de « saudade » y ese otro aun mas arquetipico de « luar » (« verbi gratia » claro de luna)- propiamente intraducibles al castellano es cierto…
El otro gran nombre del modernismo y de la vanguardia pre/fascista en Portugal lo es sin duda Antonio Ferro, fundador (y editor) de la revista Orpheu en 1915 en la que colaborarian todos los grandes nombres de las letras en lengua portuguesa de aquellos años, y que con la llegada del Estado Novo revelaria un genio indiscutible de propagandista y gran comunicador y pedagogo, a la cabeza de los servicios de informacion y propaganda del nuevo regimen, y de otra de sus instituciones mas emblematica, las Mocedades Portuguesas.
Antonio Ferro era uno de los grandes olvidados del Portugal de despues de Abril –en los años que alli pase- al que no se perdonaba su adhesion al Estado Nuovo, como si se viera rodeado de un tabu aun mas riguroso si cabe a la medida de su valia intelectual y de su relevancia indiscutible en la historia de las letras en lengua portuguesa. Pero su nombre, como un fantasma familiar o duende travieso surcaba de pronto la conversacion en las raras visitas que recibi de portugeses amigos o caritativos en aquellos años, visitadores (diocesanos) de prision –y de la vieja/mentalidad pues- mayormente casi todos ellos…
España, Portugal y entre los dos la muy española y muy atlantica Galicia, o si se prefiere el mundo medieval galaico/astur/leones, como un eslabon (perdido) de la España de los Cinco Reynos : dos nombres (gallegos) de la Falange literaria vienen es cierto a glosar o a concluir a modo de colofon este epilogo hispano/portugues –espanol y luisiada-, el de Eugenio Montes que colaboro en revistas de vanguardia (« ultraistas » sobre todo) desde muy joven tanto en Madrid como en sus tierra gallega y el de Alvaro Cunqueiro que ofrece muestras de una prosa en castellano inconfundible, en narrativa de ficcion como en relatos de viajes, gastronomicos y de cacerias, timbrados de una musicalidad suave y de una dulzura tipicas de su region -heredadas en parte de la llirica gallega contemporanea –de Rosalia de Castro y en parte tambien de la raigambre galaica (o astur/galaico/leonesa para ser exactos) de su obra y de su genealogia. « Le he cerrado los ojos a la cierva porque de quietos preguntaban » escribio en uno de sus relatos cinegeticos el autor de « El hombre que se parecia a Orestes » -lease Orestes por Jose Antonio…-, en unos destellos de genio inimitable.
Unos trazos de estilo o una paletadas "hispano/atlanticas y "lusiadas" que no vienen mas que añadirse al retrato o a un perfil completo como el que nos ofrece la semblanza que plasmar aqui habre pretendio de la Falange literaria (y « vanguardista » en sus origenes) Pero la gran leccion de estilo me la dio el Estado Novo al morir, a mi personalmente, como en directo….Y fue aquel portugues estoico y leal, que ya evoque tantas veces, pequeño de talla, de nariz ganchuda de rara ave tropical y grande -y hasta grandioso- en el fuego de sus ojos vivos (y claros) y en la ironia de sus frases restallantes (como latigazos) y los rugidos de risa que conseguia arrancar del auditorio.
Ocurrio en Fatima un un congreso de laicos/ingtegristas (o si se prefiere « integralistas ») un ano y medio antes « del fin » (al que yo asisti como ya habre contado muchas veces). Y es que aquel portuges tan ardiente y tan patriota tenia estilo, un algo nuevo para mi lo que de el se desprendia en cierto modo, es cierto: un tanto diferente al nuestro aquel estilo aquella forma de perorar, quiero decir, -a los paradigmas y modelos que habran mayormente circulado siempre entre epañoles… ; tan desgarrado tan emotivo, tan sentimental y tan tipicamente portugues en definitiva.
Lo mismo que la joven aquella –llena de vida y de fuego artistico, y a la vez tipicamente lisboeta- que en un escenario tan riguroso como aquel de santuario/mariano, y de canticos, plegarias y peregrinos, consiguio improvisar de pronto ella sola (casi) un festival de danza y musica folkloricas como un acto castrense en homenaje a su propio ejercito envuelto en una guerra colonial por aquel entonces…El Estado Novo su Imperio colonial enorme aun perfectamente enhiesto y en visperas de derumbe se hundio do digamos mas bien que se desplomo victima de una pupalada (trapera) por la espalda, pero al caer no dejo de despedir destellos de lo mas potentes, de estilo propio ya digo.
Gestos –y fastos- luisadas que ahi quedan como supendidos en el cielo (de la memoria colectiva) Del heroe anonimo aquel –¿el portugues estoico tal vez del que antes hable ?, siempre lo pense…- que se inmolo por el fuego en la plaza publica en Lisboa al estallar la Revolucion, el 25 de Abril del 74, envuelto en la bandera portuguesa (antigua) O de uno de los grandes nombres de lo que se podria denominar « la derecha militar » -los unicos que guardarian aun a seguir al 25 de Abril una cierta credibilidad fuera del campo de la izquierda y de un centro/izquierda mas o menos comprometidos con el marxismo-, el mayor Alpoim Galvao, que protagonizo justo por enntonces –cuando mi primer viaje a Fatima, en noviembre del 72- un raid aereo de gran estilo en solitario, quinientos kilometros selva adentro contra el palacio presidencial de Seku Ture, en Guinea Conakri, gran instigador de la agresion contra las colonias portuguesas y por ende responsable numero uno del estallido de la guerra colonial en la proganda del Estado Nuovo, quien se salvo por lo pelos, ausente en el intante preciso aquel ; y tras lo cual el general Spinola, comanditario supremo de la operacion desde su puesto de comandante en jefe de las tropas portuguesas mobilizadas en Guinea-Bissau, se pondria a buscar por su cuenta y riesgo un « futuro » -« verbi gratia » una solucion politica, un cambio de regimen- a Portugal, y a la guerra colonial….
Portugal, una nota, un sello una huella irremplazable e inimitable de estilo hispanico plasmada en su literatura, en su literatura, en su floklofre, tal y como se veria decantado (o « requintado ») a lo largo de su siglos de Historia de estado independiente y « pari passu » de vecindad o cohabitacion peninsular pacifica casi inninterrumpida, ya desde la fase final de la Reconquista, y del trancurso de su expansion colonial (hasta el 25 de Abril del 74), se escriba o se diga lo que se diga. Y que va y viene en mi mente y en espiritu de forma intermitente con fuerza impetuosa a veces como en el concierto de fado que aqui evoco…
Y es que un gran nombre de mujer sobre todo, una gran figura del fado y de Portugal de antes del 25 de Abril se destacaba de telon de fondo o por encima de del escenario aquel de festival veraniego del pasado sabado y era el de Amalia Rodrigues, icono y egeria a la vez del Estado Novo asociada –por obra y gracia de algunos de sus fados mas populares y mas celebres en España- a los recuerdos de mi infancia y a quien la joven fadista del sabado entendia prestar con su actuacion publico homenaje.
Fallecida en visperas del milenio –en octubre del 99- en una gran manifestacion de duelo nacional de todos los portugeses unidos todos sin distincion de ideologia en torno a sus restos, Amalia Rodrigues –Amalia de Fatima- habra sellado con su muerte la reconciliacion de un pais encismado –y que llego a estar, en el « verano caliente » del 75, al borde de la guerra civil. A la portuguesa, a su estilo y a su manera. Desgarrada y patetica…
Y es que el concierto de fado habra despertado en el fondo en mi –recien ahora que me acabo dando cuenta- la saudade al borde del llanto de un mundo desaparecido -de formas, de y de estilos, de moldes de patrones y de matrices comunes a españoles y portugeses y que se remontan a los tiempos de los Paises Bajos españoles cierto implicitamente evocados en pasado sabado, de cuando los espanoles y portugueses volvieron a estar unidos….
Gracias al Duque de Alba –¡honor gloria y y reparacion a su nombre insigne por lo siglos de los siglos !- que los reunio a la Corona de España tras la muerte y desaparicion del rey Don Sebastian en la batalla de Alcazarquivir- sin derramar ni una gota de sangre…
Y de donde solo se vinieron a despegar –o a desgajarse- por los manejos e intrigas de los enemigos del Imperio español –de Richelieu en particular, de Inglaterra y de los insurrectos holandeses protestantes- en el contexto de la guerra de los Treinta Anos.
Una bandera tambien –en esa danza de espectros o de fantasmas al compas de la saudade- en el concierto de fado del pasado sabado, es cierto : la cruz de San Andres, la bandera del Imperio español mas alla de los Pirineos, que enarbolaban los tercios espanoles en Rocroi, tumba del Imperio.
Y un nombre aun, el de Francisco de Melo, al mando en aquella celebre batalla : noble portugues y capitan general de los tercios de Flandes…¡Evocacion de España y Portugal en Belgica hoy, nostalgia -y saudade (al borde del llanto)- de un (viejo) estilo, imperial e hispano!
(Y un enfoque propio -para terminar- el de estas lineas, historico/literario, y en clave hispano/atlantica y "luisiada"...)
11 de Julio, fiesta nacional del Portugal antiguo, en Bruselas. Verano del 2008. No queria quedarme, lo confieso, de verdad que iba a pasar de largo entre aquel gentio que llenaba la plaza Flagey, del que habra casi hasta hoy sido mi barrio de Bruselas, en un concierto de fado, y de clausura (solemne) tambien de las obras que habran tenido paralizado el lugar durante ocho largos años. Iba ya camino de salir de la plaza como digo, cuando me senti alcanzado de pronto de un certero saetazo por dentro, en lo mas hondo, por culpa del lamento desgarrador que se escapaba de la voz desbordante de octavas y decibelios de la interprete, la joven fadista Mafalda Arnauth –todo un simbolo, su nombre, de un Portugal de lo mas rancio y a la vez cosmopolita de antiguo- toda de negro, en un decorado incomparable de ambiente portugues a la antigua, en la penumbra del estrado, medio a oscuras, rodeada de guitarristas o digamos mas bien de acompañantes instrumentistas, virtuosos y especialistas de todos los instrumentos tipicos del fado –guitarra portuguesa, parecida a la mandolina ; viola/de/fado como la guitarra nuestra solo que mas grande y guitarra/argentina con su tipica simetria…- sobriamente vestidos todos ellos, de chaqueta y corbata (oscuras) por supuesto, tan portugues y tan lusiada ya digo el escenario, que solo faltaban la luz de las velas, las tazas de "vinho verde" y el grito patriotico de « ¡Ca esta Portugal ! » (de rigor en el Estado Novo) y poder asi dar un salto acrobatico en el tunel del tiemp hasta antes del diluvio, hasta el Portugal del 24 de Abril me refiero, el de la vieja/señora….Y faltaban ademas, salvo contadas exceciones entra el gentio,–se me olvidaba el pequeno detalle-los portugueses del barrio en resumidas cuentas, del grupo mas nutrido tal vez de portugueses emigrantes de toda la orografia de la aglomeracion/de/Bruselas , « fatalmente » se diria : dos Españas …a este y al otro lado de la frontera hispano/portugesa…(iEspaña de los cinco/reynos de la edad media y de la Reconquista !.)
Tan conmovido y emocionado ya digo, de aquella voz desgarradora como un chorro o un torrente incontenible que llenaba toda la plaza de golpe de una atmosfera familiar para mi inconfundible, que para que no se me notara la emocion demasiado decidi apartarme un poco sin abandonar el concierto por supuesto, que aguante y escuche impavido y devoto a partir de aquel momento hasta el final, hasta la apoteosis con la que se cerraria, con un publico que aplaudia a rabiar, tan entusiasta que consiguio hasta por tres veces la vuelta al estrado de los interpretes …Era la culminacion como digo de una semana de festejos y de una jornada a la vez marcada por dos commemoraciones colectivas, de los portugeses de Belgica y tambien, curiosa coincidencia, de la Comunidad/flamenca (neerlandofona) en una especie de guiño de la Historia –plasmada en la efemerides que aqui evoco- a un pasado comun a unos y a otros, medieval, un tanto remoto, immortalizado en el recuerdo de la guerra de los Cien Años y cifrado (y descifrado) en la pista borgoñona (o burguiñona)
Por la tarde, una horas antes del con cierto estaba yo charlando con mi hijo, sentados los dos en uno de los bancos nuevos y flamantes de la plaza recien terminada cuando vimos pasar de largo, a toda prisa, un seqsuito muy con currido, rodeados de periodistas y de de policias, y en cabeza, al portuges Barroso, comisario de la UE, todos en direccion del monumento a Fernando Pessoa, que se disponian a inaugurar, en el otro extremo de la plaza. Y digamos que bajo un signo atlantico (y lusiada) mi alma y mi mente, -yo mismo todo entero, o si se prefiere mi lado o fondo atlantico, o « atlantida » y no menos hispano- se pondrian a volar por dentro tras el concierto, hasta el momento éste en que me dispongo a ponerlo todo por escrito, en conclusion o epilogo de mi serie de articulos sobre la vanguardia (pre/fascista) que se habran ido sin querer decantando hacia el tema del estilo o si se prefiere del estilo/decantado –en literatura y en politica como en la vida misma- de aquella version de las vanguardias europeas (pre/fascistas), que aborda en su ensayo la autora alemana. Al calor (y al fragor) de la guerra civil espanola.
La vanguardia en Portugal, como el modernismo (tanto monta monta tanto) se verian asociados aun mas intimamente que en otros sitios –mas incluso que en España- al « fascismo » o pre/fascismo lliterario, en aquellos años que coinciden con el final de la primera guera mundial y la fundacion y consolidacion del Estado Novo, que se verian surcados fugazmente y en sus inicios por la experiencia corta, efimera (en apariencia) y mal conocida del regimen corporativo de Sidonio Pais que habia sacado a su pais de la I guerra muundial (que habia iniciado en el bando de los aliados) Y se ven asociadas sobre todo a nombres emblematicos como el de Fernando Pessoa, por supuesto, del que ya hable, y con él otros tres nombres mas o menos ligados en el recuerdo a la memoria del Estado Novo, y me refiero a Jose Almada Negreiros, a Joaquin(m) Teixeiria de Pascoaes, que firmaba sus escritos « Joaquin(m) » y a Antonio Ferro.
Almada Negreiros, un nombre practicamente olvidado en los años que residi –a la fuerza- en Portugal (de 1982 a 1985), fue uno de los grandes nombres del futurismo portugues, pintor y a la vez poeta y escritor, que legaria un retrato celebre de Fernando Pessoa, y de una brillante carrera artistica y literaria que discurriria en gran parte en los años del estado Novo hasta su muerte cuatro años antes de la revolucion (en 1970), y que se veria caracterizada a la vez de por un cuño annticonvencional, e irreverente incluso, de denuncia de ciertos aspectos de la vida quotidiana y de la sociedad portugesa contempranea suya, y tambien por su contribucion de una manera u otra a la imagen y esfuerzos de propaganda del regiimen del Estado Nuovo.
Joaquin Teixeira de Pascoaes es menos conocido que el anterior y aunque su obra se deba catalogar mas bien dentro de una corriente simbolista y a la vez neo-romantica ofrece tambien ciertos rasgos vanguardistas inconfundibles, en particular sus trazos « oniricos » -de acumulacion de imagenes- que lo emparentan a los surrealistas. Y entre sus poemas destacaria uno de titulo revelador, « Señora de la Noche »…
Poeta de la noche y de la « saudade », e hispanista convicto y sincero, el portugues « Joaquim » fue amigo de Eugenio d’Ors, que le invito a dar conferencias en Barcelona en los años veinte, y fue tambien gran admirador de Unamuno, lo que le acercaria del poeta canario Alonso de Quesada quien se habia solidarizado con el rector de Salamanca duurante su confinamiento en Lanzarote, y que tradujo al castellano unas poemas de Joaquin sobre la Atlantida, en los que sentia el soplo poetico y espiritual de un mundo o un sustrato cultural "atlantico" (y occidental) que el mismo como español/canario compartia. El poeta español Luis Antonio de Villena atribuye a Joaquin la paternidad o el padrinazgo poetico de dos vocablos tipicamente portugueses –el de « saudade » y ese otro aun mas arquetipico de « luar » (« verbi gratia » claro de luna)- propiamente intraducibles al castellano es cierto…
El otro gran nombre del modernismo y de la vanguardia pre/fascista en Portugal lo es sin duda Antonio Ferro, fundador (y editor) de la revista Orpheu en 1915 en la que colaborarian todos los grandes nombres de las letras en lengua portuguesa de aquellos años, y que con la llegada del Estado Novo revelaria un genio indiscutible de propagandista y gran comunicador y pedagogo, a la cabeza de los servicios de informacion y propaganda del nuevo regimen, y de otra de sus instituciones mas emblematica, las Mocedades Portuguesas.
Antonio Ferro era uno de los grandes olvidados del Portugal de despues de Abril –en los años que alli pase- al que no se perdonaba su adhesion al Estado Nuovo, como si se viera rodeado de un tabu aun mas riguroso si cabe a la medida de su valia intelectual y de su relevancia indiscutible en la historia de las letras en lengua portuguesa. Pero su nombre, como un fantasma familiar o duende travieso surcaba de pronto la conversacion en las raras visitas que recibi de portugeses amigos o caritativos en aquellos años, visitadores (diocesanos) de prision –y de la vieja/mentalidad pues- mayormente casi todos ellos…
España, Portugal y entre los dos la muy española y muy atlantica Galicia, o si se prefiere el mundo medieval galaico/astur/leones, como un eslabon (perdido) de la España de los Cinco Reynos : dos nombres (gallegos) de la Falange literaria vienen es cierto a glosar o a concluir a modo de colofon este epilogo hispano/portugues –espanol y luisiada-, el de Eugenio Montes que colaboro en revistas de vanguardia (« ultraistas » sobre todo) desde muy joven tanto en Madrid como en sus tierra gallega y el de Alvaro Cunqueiro que ofrece muestras de una prosa en castellano inconfundible, en narrativa de ficcion como en relatos de viajes, gastronomicos y de cacerias, timbrados de una musicalidad suave y de una dulzura tipicas de su region -heredadas en parte de la llirica gallega contemporanea –de Rosalia de Castro y en parte tambien de la raigambre galaica (o astur/galaico/leonesa para ser exactos) de su obra y de su genealogia. « Le he cerrado los ojos a la cierva porque de quietos preguntaban » escribio en uno de sus relatos cinegeticos el autor de « El hombre que se parecia a Orestes » -lease Orestes por Jose Antonio…-, en unos destellos de genio inimitable.
Unos trazos de estilo o una paletadas "hispano/atlanticas y "lusiadas" que no vienen mas que añadirse al retrato o a un perfil completo como el que nos ofrece la semblanza que plasmar aqui habre pretendio de la Falange literaria (y « vanguardista » en sus origenes) Pero la gran leccion de estilo me la dio el Estado Novo al morir, a mi personalmente, como en directo….Y fue aquel portugues estoico y leal, que ya evoque tantas veces, pequeño de talla, de nariz ganchuda de rara ave tropical y grande -y hasta grandioso- en el fuego de sus ojos vivos (y claros) y en la ironia de sus frases restallantes (como latigazos) y los rugidos de risa que conseguia arrancar del auditorio.
Ocurrio en Fatima un un congreso de laicos/ingtegristas (o si se prefiere « integralistas ») un ano y medio antes « del fin » (al que yo asisti como ya habre contado muchas veces). Y es que aquel portuges tan ardiente y tan patriota tenia estilo, un algo nuevo para mi lo que de el se desprendia en cierto modo, es cierto: un tanto diferente al nuestro aquel estilo aquella forma de perorar, quiero decir, -a los paradigmas y modelos que habran mayormente circulado siempre entre epañoles… ; tan desgarrado tan emotivo, tan sentimental y tan tipicamente portugues en definitiva.
Lo mismo que la joven aquella –llena de vida y de fuego artistico, y a la vez tipicamente lisboeta- que en un escenario tan riguroso como aquel de santuario/mariano, y de canticos, plegarias y peregrinos, consiguio improvisar de pronto ella sola (casi) un festival de danza y musica folkloricas como un acto castrense en homenaje a su propio ejercito envuelto en una guerra colonial por aquel entonces…El Estado Novo su Imperio colonial enorme aun perfectamente enhiesto y en visperas de derumbe se hundio do digamos mas bien que se desplomo victima de una pupalada (trapera) por la espalda, pero al caer no dejo de despedir destellos de lo mas potentes, de estilo propio ya digo.
Gestos –y fastos- luisadas que ahi quedan como supendidos en el cielo (de la memoria colectiva) Del heroe anonimo aquel –¿el portugues estoico tal vez del que antes hable ?, siempre lo pense…- que se inmolo por el fuego en la plaza publica en Lisboa al estallar la Revolucion, el 25 de Abril del 74, envuelto en la bandera portuguesa (antigua) O de uno de los grandes nombres de lo que se podria denominar « la derecha militar » -los unicos que guardarian aun a seguir al 25 de Abril una cierta credibilidad fuera del campo de la izquierda y de un centro/izquierda mas o menos comprometidos con el marxismo-, el mayor Alpoim Galvao, que protagonizo justo por enntonces –cuando mi primer viaje a Fatima, en noviembre del 72- un raid aereo de gran estilo en solitario, quinientos kilometros selva adentro contra el palacio presidencial de Seku Ture, en Guinea Conakri, gran instigador de la agresion contra las colonias portuguesas y por ende responsable numero uno del estallido de la guerra colonial en la proganda del Estado Nuovo, quien se salvo por lo pelos, ausente en el intante preciso aquel ; y tras lo cual el general Spinola, comanditario supremo de la operacion desde su puesto de comandante en jefe de las tropas portuguesas mobilizadas en Guinea-Bissau, se pondria a buscar por su cuenta y riesgo un « futuro » -« verbi gratia » una solucion politica, un cambio de regimen- a Portugal, y a la guerra colonial….
Portugal, una nota, un sello una huella irremplazable e inimitable de estilo hispanico plasmada en su literatura, en su literatura, en su floklofre, tal y como se veria decantado (o « requintado ») a lo largo de su siglos de Historia de estado independiente y « pari passu » de vecindad o cohabitacion peninsular pacifica casi inninterrumpida, ya desde la fase final de la Reconquista, y del trancurso de su expansion colonial (hasta el 25 de Abril del 74), se escriba o se diga lo que se diga. Y que va y viene en mi mente y en espiritu de forma intermitente con fuerza impetuosa a veces como en el concierto de fado que aqui evoco…
Y es que un gran nombre de mujer sobre todo, una gran figura del fado y de Portugal de antes del 25 de Abril se destacaba de telon de fondo o por encima de del escenario aquel de festival veraniego del pasado sabado y era el de Amalia Rodrigues, icono y egeria a la vez del Estado Novo asociada –por obra y gracia de algunos de sus fados mas populares y mas celebres en España- a los recuerdos de mi infancia y a quien la joven fadista del sabado entendia prestar con su actuacion publico homenaje.
Fallecida en visperas del milenio –en octubre del 99- en una gran manifestacion de duelo nacional de todos los portugeses unidos todos sin distincion de ideologia en torno a sus restos, Amalia Rodrigues –Amalia de Fatima- habra sellado con su muerte la reconciliacion de un pais encismado –y que llego a estar, en el « verano caliente » del 75, al borde de la guerra civil. A la portuguesa, a su estilo y a su manera. Desgarrada y patetica…
Y es que el concierto de fado habra despertado en el fondo en mi –recien ahora que me acabo dando cuenta- la saudade al borde del llanto de un mundo desaparecido -de formas, de y de estilos, de moldes de patrones y de matrices comunes a españoles y portugeses y que se remontan a los tiempos de los Paises Bajos españoles cierto implicitamente evocados en pasado sabado, de cuando los espanoles y portugueses volvieron a estar unidos….
Gracias al Duque de Alba –¡honor gloria y y reparacion a su nombre insigne por lo siglos de los siglos !- que los reunio a la Corona de España tras la muerte y desaparicion del rey Don Sebastian en la batalla de Alcazarquivir- sin derramar ni una gota de sangre…
Y de donde solo se vinieron a despegar –o a desgajarse- por los manejos e intrigas de los enemigos del Imperio español –de Richelieu en particular, de Inglaterra y de los insurrectos holandeses protestantes- en el contexto de la guerra de los Treinta Anos.
Una bandera tambien –en esa danza de espectros o de fantasmas al compas de la saudade- en el concierto de fado del pasado sabado, es cierto : la cruz de San Andres, la bandera del Imperio español mas alla de los Pirineos, que enarbolaban los tercios espanoles en Rocroi, tumba del Imperio.
Y un nombre aun, el de Francisco de Melo, al mando en aquella celebre batalla : noble portugues y capitan general de los tercios de Flandes…¡Evocacion de España y Portugal en Belgica hoy, nostalgia -y saudade (al borde del llanto)- de un (viejo) estilo, imperial e hispano!
(Y un enfoque propio -para terminar- el de estas lineas, historico/literario, y en clave hispano/atlantica y "luisiada"...)
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1 comentario:
MAIS COMMENT COPIE-T-ON "LA GUERRE DANS LE CAUCASE" ? car ce jeune homme semble avoir du bon sens ! bravo pour l'effort !
un vieux petit gros croûton juif d'Alexandrie
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