lunes, julio 25, 2022

HITLER Y LA GUERRA CIVIL EUROPEA

 


Las biografias del Fuhrer se suceden, aclarando el enigma o ahondando el mito más aún. Y equidistante entre uno y otro se muestra la obra descollante de Ernst Nolte que hace del Fuhrer una especie de imán(sic) - de espejo -por deformante (sic) que ello fuera- de la Historia convulsa y cambiante del pasado siglo (XX). El de la guerra civil europea

Criptico, hermético, sibilino, Ernst Nolte, de lo que no conseguía expresar o de lo que no se atrevia a decir? Igual por igual. Que me hace pensar -aqui ya lo tengo expuesto- en el caso de Francisco Umbral. Hueso duro de roer como sea, el volumen de la obra fundamental de aquél "El fascismo en su época" consagrado a Hitler y al nacionalsocialismo aleman, que no consigo perder de vista ni me decido a despachar de entre las reservas de mis obras de lectura diaria como por una necesidad -fisica?- de zambullirme en esta obra una vez y otra y otra (...) Y es cuando Nolte aborda la personalidad del Fuhrer, en un plano psicológico, antes de pasar a otros planos que le merecen igualmente su atención, en particular al aspecto sociológico y last but not least, a su aspecto historico. "Una figura actualizada por lo histórico", concluye Nolte -no menos enigmaticamente- por su cuenta (...) Sin aclarar no obstante el enigma, ahondándolo aún más yo diría, por lo que me he decidido a reservarle esta entrada, entre la historia y la bipgrafia, y al fuego de la actualidad más candente, y también para qué lo voy a ocultar, de la perplexidad o incomprension que puede haber suscitado entre algunos de mis lectores mi postura resuelta e inequívoca pro/rusa -que no pro/soviética- en el tema de la guerra en Ucrania (....) 

Hitler, mal supremo e indecible de la Historia contemporánea, explicado o justificado o exonerado -lo mismo me da que da lo mismo- a la luz de la Historia? Hitler y la guerra civil europea, o sea. Y esa es la glosa que me merece la lectura de los párrafos (numerosos) que le dedica el (fallecido) historiador alemán que parecía -y mido mis palabras- haber encontrado precisamente ahí -en el abordaje o tratamiento histórico, cientifico (sic), aséptico y teoricamente neutro o imparcial- del nazismo y del nazifacismo y de todas las figuras con el fenomeno aquél más intima y estrechamente relacionadas-, el subterfugio o la via escapatoria ideal, en su profesion -y vocación- de historiador, y escritor y profesor (universitario) de Historia, al duro e ingrato destino que el desenlace de la Segunda Guerra Mundial les reservaría a los alemanes todos, especialmente a ellos dedicada (...) 

Cuando compara por ejemplo en un volumen anterior, Mussolini -en el marco del desencadenamiento de la Primera Guerra Mndial- a un cometa (sic) desbocado buscando escapar por todos los medios a un marxismo comparado a una galaxia (sic) mental o intelectual en la que desde su más tierna infancia se veia submergido (y criado y educado)

O cuando se compara él mismo -a creer a lo que escribe Nolte- a un imán (sic), que le da ocasión para comparar Nolte por su cuenta (dando la vuelta al símil) - a un imán también, es decir, a la Historia en relación a él. Lo que le da pie a su vez a calificarle de ser o personaje historico. y no a-histórico -neologismo de transcripción difícil (como por definición)- ni punto final de a Historia (que gloso yo por mi cuenta) 

Un imán, la Historia del pasado siglo XX, en sus aspectos extremos (sic) -léase cambiantes- para el Fuhrer del nacionalsocialismo que se vio -como en un espejo deformante (sic)- o reflejó en ellos. Y entre todos esos aspectos cambiantes, nuevos, inéditos -y extremos (sic)-, cabe mencionar en primer lugar el fenómeno (dominante) de la guerra civil, rondando y merodeando la historia europea desde hace siglos, transmutado de guerra de religion en guerra ideológica que es lo que fueron en grado emblemático la Segunda Guerra Mundia y con ella la guerra civil española (....)   

Y me decide sobre todo a darle a la tecla en este tema la cita que Nolte recoge del Fuhrer en guisa de (mal) ejemplo de lo que él llama -en enguaje espiritista-  aspecto extraterrestre, de medio (léase "medium") entre los vivos y los muertos, del lider del nacionalsocialismo. Sin otra glosa cualquiera. Y es de las esperanzas universales (locas por definicion) que conseguia transmtir y alumbrar entre las masas que le escuchaban: "Ostento orgullosamente la  esperanza que llegará el día cuando esas bandas bravías se convertirán en batallones, los batallones en regimientos, los regimientos en divisiones, cuando las viejas escarapelas sean recogidas de en medio del barro, cuando la reconciliación tendrá lugar ante el tribunal supremo divino y eterno ante el que estamos dispuestos a presentarnos (Amén)" (He dicho) Un profeta (sic) de la reconciliación -social ("entre las clases")- lo que nos muestra -como un mesaje bíblico- ese párrafo revelador, y a Nolte no le inspira en cambio ni una glosa, ya digo, por mínima que fuera. 

Y ello tras presentarlo como un ser ridículamente pueril, y monómano o monomaníaco con una monomanía u obsesion -y aversión- principal que era lo que le inspiraba en sus años de paria (o de lumpenproletariat) en Viena la emergencia del socialismo naciente, haciendo asi economía de una autocrítica evidente:  que si los sentimentos colectivos de la masa de trabajadores le eran completamente extraños, eso era por culpa de su educacion burguesa y provincial (sic), porque él no trabajaba bien (sic), por más que se viera sumido en la miseria, y porque no estaba soltero y no tenía a cargo una famillia (....) Que el juego de espejos no se acaba ahí, ni por cuenta suya ni por cuenta mía (....) 

Y como a modo de ilustracion de lo que él calla y aquí gloso yo por mi cuenta , deja igualmente registrado que le sucedía el que los obreros (sic) le partieran la cara (óp. cit. p. 52). Suceso trivial y anodino a fe mía! (....) Y no precisamente una invitación a la empatía -o a la autocrítica-, no me digan! (...)

Reconciliacion entre las clases, el mensaje que se desprende de las formulaciones ideológicas y programáticas del nacionalsocialismo y de los trazos biográficos principales de su principal figura, desde los prístinos inicios de su trayectoria politica (....) Mucho más laborioso y complejo y complicado desde luego que el despâchar (gratis) un expediente de psiquiatrización o criminalizacion (médica), no me digan! 

Hitler y la guerra civil europea, el fondo de mi pensamiento y de mis ideas, con el trasfondo de la guerra en Ucrania, de mi postura resuelta prorrusa y -a modo de consecuencia- en respuesta al desafio antinazi y antisfascista (sic) de Vladimir Putin. Aunque me quede (otra vez) más solo que la una (....) 

Y es un deje de melancolia es cierto, el que se desprende del final de estas lineas tras el film que vi ayer -en cartelera en las salas del centro de Bruselas-, con el telón de fondo geográfico e historico de una familia de la alta aristocracia al salir de la Primera Guerra Mundial, en lo más profundo de la campiña inglesa. Una comedia romantica (sic) Asi le califica la crítica (extrañamente) bien dispuesta ante un film con tantos premios y tantas credenciales (inglesas de preferencia) 

Un eufemismo apenas. Porque el verdadero drama es el que esconde y a la vez trasluce ese film tan poco trivial: entre el abismo social (sobrecogedor) que separaba a ese medio aristócrata "british" y la criada del servicio, heroína del film y su principal protagonista. Un drama social -en suma, el de la lucha de clases, en imagen "british" o en clave anglosajona- que se disuelve o diluye por arte de magia, la que le da el séptimo arte sin lugar a dudas. Y es  en las escenas dominantes y archirepetidas  del film, de la criada paseándose desnuda y sola entre tanto lujo y distincion de la vieja mansión aquella. A  sus anchas, como una reina. Exorcismo a bajo precio, ese (bello) cuento de hadas (en inglés), no me digan! 

Mientras que en los pueblos mucho menos aristocráticos, católico-mediterráneos -Drieu La Rochelle díxit- tendremos que cargar con el problema social como un problema racial (sic) (léase una maldición biblica) "ad vitam aeternam" Mientras, continúa la guerra de las memorias (....) Hitler y la guerra civil europea. O sea


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