Judío entre los judíos, gentil entre los gentiles, predicó el judío Saulo de Tarso. Francés entre los franceses, eso el de la foto ya lo consiguió. ¿Español también entre españoles...en Cataluña? Eso es sin duda mucho pedirle a este oriundo, hijo de nacionalista catalán, que acaba de ser nombrado jefe del gobierno francés, mientras que las nubes negras no hacen más que acumularse en el cielo de Cataluña -y de toda España- a unos meses escasos de la consulta de auto/determinación secesionígena con la que amenaza la Generalitat separatistaVoy a hacerme abuchear aquí de algunos con esta entrada, mucho me temo, ¿Qué le vamos a hacer? No veo mejor forma como sea de combatir los fantasmas que empezaron a danzarme ayer noche por dentro más que sacándolos a relucir, y me estoy refiriendo al malestar innegable que me entró para que lo voy a negar desde que se confirmó la noticia -ya tarde por la noche- del triunfo insólito en las elecciones de ayer de la candidata socialista a la alcaldía de Paris, Anne (Ana en español) Hidalgo, nacida en la localidad gaditana de San Fernando.
Una oriunda ante/el/altísimo (en francés periodístico) y de izquierdas como si acaso se precisase decir. Aquí ya vengo ocupándome hace un rato casi un artículo sí y otro también, es verdad, de las secuelas múltiples de nuestra derrota mundial en el 45, de resultas de la derrota de la Alemania nazi y del desenlace de la Segunda Guerra Mundial y una de ellas tal vez la que más hueso duro de roer (durante décadas) me habrá dado hasta el punto que se puede decir que solo hace poco y a la luz precisamente de ese dato o hito histórico crucial que también solo hace poco terminé por adquirir -o por asumir-, conseguí captar de una forma cabal, lo sería sin duda el de la emigración española de los cincuenta y de los sesenta por cima de los Pirineos en un fenómeno no poco concomitante con el exilio republicano tras el final de la guerra civil.