Lo que fue o lo que estuvo en un tris
Pero no fue, no es lo que no pudo (¿por qué?)
Lo que fue o estuvo en un tris de ser
No es lo que pudo ser, sin más,
a donde todos -¡lástima¡- nos llamaban
y dejamos pasar el tranvía fatal (...)
¡Tranvía último, fatal!
¿Negro fantasma o luz de claridad
O sueño del surrealista genial?
¡No quiero lutos, no quiero!
Que me apartan del Destino (divinal)
¡Gloria al Fatum divino y celestial!
sin miedo ni reproche ¡Salve a ti!,
Lo que los astros sellaron (en mí)
Zumo de estrellas, lo que a cambio nos dan
Para nuestros poros ardientes (de ansiedad)
¡Esponja emocionada, mi corazón inquieto!
Lleno de maleza, de surcos y recovecos,
Loco, inquieto, ridículo y pueril (¡más aún!)
Pero incapaz de hacerte el menor mal
Porque sé que está escrito con tinta astral
El lugar y la fecha y hora de nuestra cita
Que yo ya sé cual es, en un tiempo poético
De los que solo sé las claves y la señal
Que lo veo ya en mis sueños (¡de verdad¡)
El escenario heroico y erótico
En medio del circo romano (imperial)
¡Y al que tú no podrás faltar!
Aunque los cielos se hundan y me muevan
el piso donde me apoyo ¡hace tanto ya¡
¡Zumo de estrellas, lo que yo te daré!
Y no me preguntes lo que es, ¡que será!
Lo que me alienta y alimenta
en mis fiebres (de invierno polar)
Y noches blancas, sin luces ni reloj
en un cielo de estrellas (boreal
Poesía trasterrada la mía ¡acéptala!
Poesía de futuro que todo mueve,
todo lo puede en tu alma, mujer
(y todo te abre, de par en par)
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