Un poder femenino en la sombra saliendo a la luz en la órbita de Sociedad Civil Catalana, de Ciudadanos e irradiando en los demás partidos anti-secesionistas. ¿La rebelión redentora (y no feminista) de las mujeres –como la rebelión de las masas cien años atrás-, acaso la que salve a Cataluña para España, como la rebelión de las mujeres en Chile preparó la caída del régimen marxista? Signos inequívocos así parecen indicarlo como la manifestación de hoy plaza de San Jaime contra el golpe de estado parlamentario (secesionista) ¡Vivir para ver fantasmas míos!Algo se está moviendo en Cataluña, hablo en serio, de cosas seria, no de fantochadas como la que preparan los secesionistas sediciosos en “su” parlamento. Hoy se celebró una concentración –importante dos mil personas según los organizadores, quinientos según los medios- que no consiguieron llenar del todo (por las instantáneas graficas que nos habrán llegado) la barcelonesa plaza de San Jaime, pero casi, casi, como sucedió en el 2012 en la celebración del Doce de Octubre en la plaza de Cataluña que sirvió no obstante para que el año siguiente se llenase –por las fotos, que yo en cambio ya no estuve allí sino en Montjuich. Porque está claro que el acto de hoy es indicio de algo que va a más (…)
La Sociedad Civil Catalana en la que tengo amigos, madrileños instalados en Cataluña es sin duda una iniciativa importante que parece estar cobrando protagonismo in crescendo –y a un ritmo acelerado- al calor de los acontecimientos y de la agravación de la situación en Cataluña las horas que corren.
El bilingüismo de rigor entre ellos enfría y opaca de entrada un poco, es cierto, la imagen que consiguen dar de sí mismos en las instantáneas que nos habrán llegado del acto, de pancartas en castellano y en catalán, las primeras -un poco mas relevantes pese a todo-, y del discurso babélico (y caótico) –intercambiando frases en castellano y en catalán- del nuevo presidente de esa agrupación (asturiano de origen) lo que parece responder a una consigna destinada a este tipo de actos (españolistas) como lo pude comprobar hace tres años en la plaza de Cataluña.
Hay que registrar como sea un fenómeno en acenso por detrás de este tipo de iniciativas anti-separatistas –y no anti-soberanistas (al pan, pan y al vino vino)- y es esa especie de poder femenino en la sombra que parece estar saliendo a la luz en el ámbito de los tres grandes partidos que acaban de sellar un pacto anti-separatista. Nombres de mujeres políticos dinámicas y brillantes en extremo por las trazas –y a fe mía fotogénicas y atractivas a cual más- de las que (confiteor) me tengo que hacer forzosamente de nuevas, porque no me sonaban (expatriación obliga) ni los nombres ni las caras, que parecen estar llenando el espacio público –de los medios, de las instituciones- desde hace un rato y de las que se se diría por el acto de hoy que están empezando también a pisar la calle con firmeza y sin escrúpulo ninguno ni inhibiciones.
No doy nombres –algunos, algunas que me diga en la mente de todos-, pero en las confesiones (un tanto agustinianas) en las que suelen acabar convirtiéndose en estas entradas, me hubiera negado a mí mismo si no hubiera dejado constancia de la impresión profunda y del impacto (favorable) que me causan. Ilustración fehaciente, así me lo parecen, de ese fenómeno del mayor alcance y dimensiones que convine en llamar (ya de antiguo) rebelión de la Mujer (o de las mujeres) en una terminología evocadora de la rebelión (orteguiana) de las masas, y que parece estar cristalizando sobre odo en torno a Ciudadanos y a la renovación que la emergencia y el auge –ya propiamente fulgurante- de este partido, esta imparablemente suscitando en el PP e incluso en el partido socialista.
Ciudadanos es un partido del que ya hablé aquí en más de una ocasión que está lejos de entusiasmarme, el pacto anti-secesionista que acaban de sellar con dos partidos rivales se merece no obstante mi aplauso sin reservas, eso desde luego, y les coloca ipso facto en primera línea del frente de la defensa de la unidad territorial de España, lo que ya de entrada es un honor, y que políticamente no es poco ni mucho menos. Entretanto, el Tribunal Constitucional –como cabía esperar-acaba de pronunciarse, decidiendo no pronunciarse, que viene a ser eso más o menos.
El señor ministro del interior se ponía terminantemente a sus ordenes en sus declaraciones a los medios de anteayer que aquí ya comentamos, lo que deja presagiar lo peor a tenor de lo que acaba de ocurrir, que a fe mía que se nos pone la carne de gallina nada mas de pensar que el señor ministro ponga en práctica lo que anunció anteayer, a saber, el limitarse a esperar ordenes de ese augusto tribunal –no poco desprestigiado en la opinión- para poder actuar en defensa de la unidad y de la integridad territorial de la Nación amenazada.
¿Va hacer lo mismo su superior jerárquico el presidente del gobierno, Mariano Rajoy? Entre tanto el presidente (en la actualidad) del partido UDyP, Herzog acaba de dirigirse al monarca Felipe VI pidiéndole que lidere la respuesta al desafío institucional en curso. Y una pregunta ingenua me viene de pronto a la mente. Será preciso el arbolar un apellido de origen notoriamente extranjero –¿alemán o judío alemán?- para poder dirigirnos sin tapujos ni complejos al monarca reinante, como acaba de hacer el político acabado de mencionar, en lo que no dejará de ser interpretado por algunos –cortesanos o no cortesanos- como una amonestación al soberano en toda regla proveniente de sus súbditos.
Por si ese fuera el caso no dejo de suscribir a petición tan oportuna y a la vez tan patética por lo que trasluce de la situación de indefensión en la que la sociedad española y sus instituciones se encuentran de cara a la agresión secesionista.
El rey lo es "de las Españas". Algo ha amagado Montoro, que no le importa crearse "enemigos", y que ha hablado de controlar la pasta que se entrega a la autonomía catalana. Don Tancredo, sin citar a Montoro, ha dicho que entiende que haya gente que piense así, pero "que esto no se puede hacer", pues perjudicaría a gente que no tiene culpa y a España. En cambio, en declaraciones recientesde estos días, preguntado sobre lo que ha dedicado el presupuesto a la memoria histórica, dice que cero euros, pues es un asunto que no interesa a la gente.
ResponderEliminarSaludos