I knew my name"
Me preguntas mujer quién soy
y juro el quererlo saber,
quién soy y cómo me llamo,
misterio amor, ser o no ser
¿y qué es la vida sino eso?
Una búsqueda o afán, una sed,
siempre en pos de nuestro nombre
de un nombre de guerra (y de fe)
y venir a descubrir
que lo que nombra es lo que se es
desvelándose así el secreto
de un destino, de un quehacer
de una trayectoria errática
impredecible amor ¿y por qué?
Como el de una estrella apagada
luciendo aún mil años después
¿será ese acaso mi sino amor
vivir de lo que brillaré
después de hundirme en lo opaco
y cuando yo aquí ya no esté?
En la prosa gris mi amor
de una existencia al envés
yo que nací para brillar,
y es que o brillo o no seré
del brillo amor de tu rostro
como un reflejo de atardecer
que me alumbró sin ya esperarlo,
de ese fuego que me hizo arder
y me consume por dentro
cuando te ausentas mujer cruel
cuando me pongo a mirarme
al espejo a ver quién soy ¿ves?
Lo que hiciste de mí amor
del espejo de ti, mi querer,
que brilla cuando tú brillas
que luce de tu luz ¡Belle!
Y que se ve amor condenado
a verse objeto de desdén
de irrisión y de desprecio
sólo porque te quiero ¡eso es!
Que en el fondo amor fue eso
lo que me llevó al trance aquél
a verme en medio del ruedo
de donde salí indemne (en pie)
y fue que te vi a lo lejos
mirándo sin perder el tren
sin dejarte amor arrastrar
por lo que oías al vaivén
de los bulos, de los chismes
de la tormenta, del lío aquél
que captaste amor al instante,
lo noté en tus ojos (la otra vez) (...)
y es que me salvó tu intuición
tu mirada amor de Mujer
El Tiempo no pasa en balde amor
¡fantasmas surcando el aire
de aquellos lugares de paso
que recorrí a ritmo “andante”!
en revisita ahora de pronto
cuando ya se me hacía tarde
para acudir a esa cita
de la eternidad del instante,
cuando nuestros sinos se unan
y cuando el Tiempo se pare
y los augurios se cumplan
y seas mía o de nadie
que sé lo que andas buscando,
que no haces más que esperarme,
esperando no sé el qué,
una señal tal vez de mi parte
que así amor todo se explica
y así lo leo en tu semblante
y si no, nada se entiende
de este corazón amante
que conozco y desconozco
que se cierra amor y se abre
al compás que le marcas tú
mi amor, mi estrella/errante
que se cierra cuando te alejas
y cuando te ve renace
aunque se hunda en lo hondo
de la noche a fuer de amarte
a fuer de contar los días
y a fuer de esperar, de anhelarte
y que empieza ver fantasmas
un poco por todas partes
a verte en esta o aquella
de noche, mañana y tarde,
a añorarte a cada paso
invocándote y cantándote
en prosa amor como en verso
que incluso hasta en los mensajes
y en las entradas de este blog
se asoma tu cara de ángel
de virgen de libro/de/horas
que sabe (¡ay!) castigarme
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