BARRIO DE GRACIA ¡LA GUARDIA CIVIL YA!

Milicianos anarquistas tras el desenlace de la batalla de Barcelona -que decidió la actitud de la Guardia Civil- al atardecer del 19 de julio del 36. Uno de los teatros de la batalla lo fue el Cinco de Oros -hasta ahora plaza de Juan Carlos I-, lindando con el barrio de Gracia, teatro de los disturbios que duran ya una semana. Donde las tropas sublevadas sufrieron una emboscada. Señal inequívoca (una más) que sobre los acontecimientos actuales sigue planeando la sombra de la guerra civil interminable. En Cataluña y en el resto de España

¡La Guardia Civil al barrio de Gracia ya! Sería desde luego la mejor manera de redimirse (un poco más) de la mala imagen que dejaron sus compañeros de Cuerpo -y que ellos nolens volens aún hoy arrastran- por esos mismos barrios, por esas mismas zonas urbanas hace ahora ochenta años en la batalla de Barcelona.

¡No me digan! Lindando con ese barrio ahora en ebullición está la glorieta -en el cruce de Diagonal con el paseo de Gracia- que la alcaldía actual ha convenido en rebautizar Cinco de Oros (hasta hoy plaza de Juan Carlos I y antes plaza de la Victoria) , teatro el 19 de julio de 1936 de una emboscada a las fuerzas sublevadas que descendían de los cuarteles de Pedralbes, a manos de los guardias de asalto al mando de Federico Escofet, uno de los secuaces de Companys a quien la Guardia Civil de Cataluña en bloque como un solo hombre, con sus mandos al frente -Aranguren y Escobar- rendiría publico homenaje aquel mismo día unas horas mas tarde desfilando ante él -de pie asomado al balcón de la sede la generalitat-, y decidiendo así la suerte hasta sesos momentos indecisa de la batalla en la Ciudad Condal y dando con ello paso a una guerra civil que duraría (oficialmente) casi tres años.

Vox pueri vox dei, reza el adagio antiguo. Lo mismo cabria decir -en clave secularizada no obstante- de la voz de los ancianos. Y de las ancianas, como la señora que se ha enfrentado hoy a los okupas que vienen practicando la guerrilla urbana en ese barrio barcelonés (tan señero) desde hace ya una semana. Vivir sin pagar, que me diga pagándoselo los otros, como la superabuela (que así la llaman) les habrá echado encara aprovechando a la vez para denunciar al anterior alcalde -Trías de Convergencia- que estuvo pagando durante años el alquiler del edificio que ellos okupaban y comprando con ello la paz social y el orden publico que en Cataluña por lo que se ve hoy por hoy tiene un precio (y no muy alto por lo que se ve tampoco)

En Can Vies el año pasado acabaron saliéndose con la suya ¿lo mismo ocurrirá ahora con esta antiguo banco hoy propiedad de un particular (del que los okupas se saben tan bien el nombre)? Acabarán dando su brazo a torcer -por presión de lo alto- los mozos de escuadra pasado mañana miércoles cuando los asaltantes tiene convocada otra manifestación monstruo? Se admiten apuestas. De la actual alcaldesa que parece querer mantenerse -¿lo conseguirá?- en un segundo plano en esta asunto, se puede esperar poco desde luego, por razón de su trayectoria (okupa y anti-desahucios)

¿O acaso nos encontremos ante una maniobra de objetivos electorales de gran aliento?. A saber ante un golpe teledirigido desde Ferraz -y de sus peones en el ayuntamiento de Barcelona (y en el equipo de la actual alcaldesa, su aliada de circunstancias en la Ciudad Condal)- contra uno de los buques insignias del actual gobierno en funciones a saber el Orden Publico y lo que sociatas y rojelios de toda laya llaman ley mordaza (ellos y otros que no lo son o ye dicen no serlo aunque lo parecen) Okupas y habla catalana, la ecuación de la que nadie habla y que salta sin embargo a la vista.

Instrumento de agitación lingüística (separatista) el movimiento okupa como lo pone al destape uno de los okupas de Gracia haciendo constar en las redes sociales que en el local ocupado se daban clases de catalán gratis. Sin duda la actividad mas emblemática de todas las suyas -a parte el botellón y los porros y la coca (etcétera, etcétera), y del no hacer nada y del no lavarse y de andar encismando por dentro y por fuera de las paredes aquellas y de dormir todos junto en union , sin saber lo que puedes acabar encontrándote -o tragándote- en laav entura (etcétera, etcétera)

Y ese fue sin duda el módico/alquiler que tuvieron que pagar hasta hoy y eso es sin duda lo que mantuvo la soldadura entre la extrema izquierda okupa (y separatista) y la derecha clerical catalanista. Y a todo esto ¿qué opina de la situación creada en Gracia el nuevo obispo (catalanoparlante) de Barcelona? ¿No está y no se lo espera?