Ada Colau, por poner solo un ejemplo ilustrativo de los exabruptos del concejal díscolo y de sus escandaleras, es un modelo de vulgaridad dialéctica -y de arrogancia (poco femenina)- como no dejamos de registrarlo en este blog de mucho antes de verse alcaldesa de Barcelona. Tratarla de fregona no obstante suena a burda provocación, en la medida sobre todo que se viene así a re encender fatalmente esa faceta de lucha de clases que arrastra la guerra civil (del 36) interminable. Pero sea tal vez mucho pedir abundamientos históricos de ese tipo a un concejal con ese apellidoBerman -castellanizado con acento agudo Bermán- es un apellido alemán, así a primera vista. Aunque extendido sin duda en otros países europeos como en Francia tal y como lo ilustra el autor francés de ese mismo nombre de una obra (apasionante) de referencia sobre teoría de la traducción que me fue dado el tener que consultar en estudios de traducción literaria en Bélgica. Esa era por lo menos la idea -mas o menos vaga- que tenia yo de ese nombre.
Hasta que me topo, con frecuencia e intensidad in crescendo de unos días a esta parte, con un concejal de a localidad de la provincia de Barcelona (Palafols) que se llama así también. Y hoy ,indagando un poco al azar sobre ese nombre en la red vengo a dar con unos foros judíos (sic) donde se viene a atestar -sin mas pruebas concretas- que se trate de un nombre judío alemán o austriaco, o (para hablar con propiedad) denotando una ascendencia judía a partir de uno de esos dos países, Austria o Alemania.
¿Judío español -o chueta mallorquín o catalán- el concejal de Palafols (en la Maresma por el que viene ahora el escándalo, que pone a su partido el PP en un serio aprieto? No creo en las meigas pero hay las. ¿A quien favorece todo el revuelo mediático que viene armando de uno días a esta parte este concejal díscolo, con sus declaraciones a los cuatro vientos -por cuenta de la Legión, de Ada Colau, de Franco, de los andaluces, de las facultades de Sociología, de la ideología del género, de Cataluña, Andalucia y tutti quanti- como si fuera el portavoz parlamentario de su partido y no un modesto concejal (de pueblo, aunque sea en Cataluña)?
Unas declaraciones a fe mía provistas de “níhil óbstat” El concejal del PP de Palafols, Óscar Bermán (con acento en la a) -en el centro de la foto- por el que viene ahora el escándalo fotografiado con ocasión de la medalla de oro que le fue concedida por el Foro Europa -una plataforma política y del ámbito profesional y del mundo de los negocios del Banco de Santander- a principios del pasado año. ¿A quien aprovechan sus exabruptos de ahora coreados por toda la ultra derecha mediática y la derecha anti-PP por cuenta de la pinza (“extrema derecha”) del PSOE buscando a vendernos desde el inicio de la crisis a Zeta Pedro al mejor precio? No creo en las meigas pero hay lasEstá claro como sea, que el concejal increpador viene a poner en serio aprieto a su partido el PP en unos momentos sumamente cruciales y delicados, cuando la crisis política que se alarga desde hace tres meses esta ya alcanzando niveles de paroxismo, y está claro también que se ve claramente manipulado por una ultra derecha o derecha mediatice anti-PP -rehén o clientela de antiguo del PSOE- a través de la pinza de extrema derecha que esgrimen los socialistas de réplica a las pinzas de extrema izquierda (o izquierda radical o indignada) del PP, que les están haciendo tanto daño las horas que corren, y que nos vienen vendiendo al mejor precio a Zeta Pedro y a un gobierno de Frente Popular presidido por él o a lo sumo de centro izquierda que seria muy poco de centro y sí muy de izquierdas (y guerra civilista)
En una operación nota bene de marketing política dirigida a una franja estratégica del electorado, la misma que llevó a los socialistas a la Mocloa tras los atentados del 11 de marzo. Tal y como lo ilustran la propaganda fide a su favor de una publicación como Alerta Digital y sobre todo la entrevista claramente publicitaria que le sirve ahora en bandeja el nuevo diario digital de Pedro Jota, enemigo jurado de Mariano Rajoy -del que había puesto nota bene la cabeza a precio- que le hizo morder el polvo de la derrota, obligándole a dimitir del diario que había fundado. Que lo disciplinen los suyos (mientras les sea posible)
No hay comentarios:
Publicar un comentario