domingo, octubre 25, 2015

¿PUEBLO MESTIZO LOS ESPAÑOLES?

El artículo que figura a continuación fue enviado a una publicación digital amiga por propio pedido de alguno de sus responsables, y visiblemente se ha visto objeto de censura, que creo que quepa atribuir a presiones exteriores o circunstancias ajenas a la voluntad de los que me lo solicitaron. No importa. No me retracto ni una jota de lo que escribí, aunque pienso que me quedé corto. El mestizaje masivo en la América (ex) hispana impuesto en mayor o menor medida por el poder colonial a partir de una cierta fase de la Conquista de América y por la prédica de los misioneros y religiosos que falsificaron a sabiendas nuestro pasado colonial e infundieron un complejo de culpa colectivo por cuenta de la conquista en la sociedad española, sembrando los gérmenes de una leyenda negra anti-española en versión clerical, cavó a la larga la tumba del Imperio español de América. Y el último botón de muestra de esa leyenda difamatoria sobre la conquista española de América lo son las recientes acusaciones injustas, infamantes y calumniosas por cuenta del pasado español, del papa ítalo/argentino

Mestizaje, una palabra tabú para algunos, y talismán potente en cambio para otros. ¿Somos mestizos (sic) los españoles? A creer a algunos aprendices de brujo que se sacan ahora a toda prisa de la manga citas de Ramiro Ledesma (fuera de toda sospecha), de su última fase para ser exactos, ese sería nuestro destino y nuestra divisa. ¿Era o se sentía Ramiro un mestizo (sic) como parecen indicarlo esas frases sacadas –en parte al menos- de su contexto? *

En un sentido obvio o una acepción inmediata la respuesta evidente es que no, y no hay más que echar un vistazo (somera) a cualquiera de los documento gráficos que de aquél habrán sido legados a la posterioridad para cerciorarnos, en alguien como él además tan pulcro y exigente en punto a su apariencia física (léase a su imagen pública), posando “para la foto” en varias de los instantáneas mas divulgados que de él se conservan ¿Un “la-ti-nó”, Ramiro como les dicen (significativamente) en Bélgica) -sin caer en lo peyorativo- a los hispanos (o ex hispanos) para distinguirlos de los españoles? ¡A otro perro con ese hueso!

Hay una interpretación plausible no obstante de esas frases de Ramiro que ahora nos echan algunos –como un espantajo- a la cara, en el contexto de la época en que fueron escritas, a saber, de auge del nacional socialismo y “pari passu” del de una figura que pasaría a la historia del movimiento nazi como uno de sus referentes ideológicos principales –aunque no su portavoz-, y me refiero a Alfred Rosenberg y a su obra de gran éxito editorial en los años que precedieron inmediatamente al triunfo y advenimiento del nazismo, “El Mito del Siglo XX” (1928)

En esa obra efectivamente se emplea a profusión la expresión de mestizaje (sic) con ayuda de un neologismo en lengua alemana (“mestizentum”) Y es cierto que de la lectura atenta y pormenorizada de esta obra todo menos trivial –que nunca alcanzó el rango nota bene de fuente de doctrina oficial del régimen nazi- nos sentimos movidos a pensar que Ramiro –en el que un mimetismo llamémosle alemán (o nacional socialista) sería difícil de negar-, con la obra aquella pudiese darse (dolorosamente) por aludido.

El mestizaje (“mestizentum) al que se refería Rosenberg podía efectivamente traducirse por la Europa de cultura latina –o por emplear una expresión cara al escritor fascista francés Drieu- La-Rochelle, “la civilización católico-mediterránea”-, por oposición al mundo anglo/germano, de cultura y religión protestantes. El mestizaje en su acepción más inmediatamente inteligible en lengua española hace referencia en cambio al que se dio históricamente en la América ex hispana o ex española, con las masas de población, indias o amerindias. Un (vasto) capitulo de nuestra historia, pendiente de revisión (urgente) desde un prisma de patriotismo español elemental tal y como lo tengo explicado y defendido en escritos difundidos en la red desde hace ya un rato.

Y es en la medida, o por culpa de un hecho histórico innegable que vengo denunciando ya de antiguo, y que di en llamar rebelión mestiza anti-española, que es lo que vino a traducir la llamada emancipación (hispano) americana. El mestizaje español en América arrastraba históricamente unas raíces innegablemente religiosas y confesionales que se hunden en lo que se puede convenir en llamar el complejo de culpa colectivo que la iglesia y sus ministro inculcarían y predicarían generación tras generación en la sociedad española por cuenta de la Conquista de América y de la actuación de los conquistadores (y de sus inmediatos descendientes)

Como lo ilustraría la llamada Controversia de Valladolid (1550-1551), en la que se enfrentaron adversarios y partidarios de la Conquista, representados respectivamente en Ginés de Sepúlveda humanista ilustre y consejero del emperador Carlos V,  y –horresco referens!- el (mal famado) padre Las Casas. La polémica quedaría en tablas tras la clausura de aquel certamen, no es óbice que a la larga los ganadores lo serían los devotos y partidarios de Las Casas (hoy camino de los altares)

Los españoles de América tenían, por motivos de conciencia (dirigida por la santa/madre iglesia y bajo pena del infierno) que mestizarse (en masa) renunciando y renegando así del “apartheid” (paternalista y nada inhumano) del sistema de encomiendas (primera época) que implantaron los conquistadores, para así poder rescatarse o redimirse de alguna manera del pecado colectivo (sic) de la Conquista (transmitido como el pecado original a sus descendientes) Y así nos iría tres siglos después, en el momento de las guerras de independencia americana (…)

Somos lo que somos, europeos y españoles. Y desde luego no somos tal como se nos ve en la imagen de leyenda negra –versión criolla (léase mestiza) - difundida y anclada en la memoria colectiva de los países del otro lado del Atlántico tras el triunfo –¡ay dolor!- de la (llamada) emancipación americana, léase la rebelión mestiza anti-española

En el debate que se siguió en la red sobre esta cuestión polémica, vinimos a saber que las frases prestadas a Ramiro Ledesma sobre el mestizaje no eran propiamente de él sino de uno de sus compañeros de combate político, José María Cordero Torres, escindido junto con Ramiro de FE de las JONS (enero del 35) La puntualizacion no afecta no obstante -se me antoja- a la argumentacion defendida en este artículo -por más que la refuerze, al contrario-, y es en la medida que si las frases atribuidas a Ramiro no eran propiamente de él, no fueron menos avaladas por su aparicion en la publicación ("Nuestra Revolución") de la que Ramiro era responsable


ADDDENDA Aqui os dejo el enlace donde mi articulo aparece publicado

 

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