La encuesta de esta semana del Mundo sobre la guerra civil española, con su serie de entrevistas diarias desde el domingo pasado, no descubre nada nuevo que no se supiera y a la vez es una noticia, un noticion que digo? revelador del cambio de los vientos y de los tiempos en "el tema": desde el Dos Mil digamos, cuando el diario Mundo celebraba el año Nuevo despidiendo a la vez al siglo XX, con una entrevista del mayor destaque a FranciscoUmbral en el "zenith" entonces de su gloria guerra/civilista, erigiendolo ante los españoles cual oraculo intocable de la memoria. La entrevista de hoy, la sexta de la serie a Santiago Carrillo, no tiene desperdicio, aunque no diga nada nuevo, o precisamente por eso....Que "al marques de Paracuellos" el diario Mundo de Pedro Jota se permita el restregarle en plena cara (por vez primera) un tema que no le deja ya ni a sol ni a sombra hasta que se muera, es uno de los acontecimientos periodisticos, politicos e ideologicos de este verano catastrófico del 2005, que yo personalmente ya digo no me lo esperaba.
Despues de las otras entrevistas que le han precedido de la serie -victimas todos ellos, de los unos o de los otros, y para empezar digmos...un "turista" amigo, o si se prefiere corresponsal de guerra...- cabia esperarse como digo otra descaradamente apologetica sobre el personaje, de un Francisco Umbral pongamos por caso, su intimo amigo de los años transicionales, una de esas entrevistas relamidas y lacrimogenas de las que el susodicho (veterania en el oficio obliga) es tan ducho y especialista. A mayor escarnio de los muertos irredentos of course, y "ad mayorem gloriam" de la difunta madre del escritor guerra/civilista, funcionaria modelo del ayuntamiento socialista de Valladolid durante la Republica (segun su hijo lo cuenta)...
Pues no, habra resultado mas o menos lo contrario el final: el principio del todo ("the begin of the begin") de un emplazamiento publico que algunos llevamos ya tantos años esperando? Se acabaron de cualquier forma los aires y las infulas de un padre de la patria (y de la democracia) por encima de la verdad y de la mentira, o cuando menos de un vejete venerable -presa entre parentesis de unas crisis terminales de amnesia inenarrables- ejercitandose en unos interminables pinitos literarios a base de unas memorias por entregas no menos interminables, las que nos habra infligido durante mas de veintinco años, en un espectaculo insostenible: Paracuellos en cambio revoloteando desde el principio hasta el final de la entrevista, como un fantasma obsesionante.
Si para ello habra sido preciso la defenestracion tan insultante (y todo lo que se le haba seguido), Oh felix culpa! que estatuas son al fin y al cabo solo estatuas, que se erigen y se derrumban, la Memoria en cambio permanece...Que se ande con cuidado no entanto el entrevistador -a todas luces muy joven- que en la España de hoy, mas que nunca si cabe, sigue habiendo "tabus" intocables y el marques/de/Paracuellos -el unico ciudadano al que el rey/borbon trata de tu...- es sin la menor duda uno de ellos.
Ese habra sido el envite, el ordago a la grande de esta entrevista penultima de la serie guerra/civilista. Lo demas -en ella- no es mas que detalle nimio, "peccata minuta"; su argumento por ejemplo -identico "nota bene" al del catalan Fontana (segunda entrevista, dios los cria y ellos se juntan, los verdugos y las "victimas"?)- sobre Sanjurjo y el Diez de Agosto, en una replica directa al (muy odiado) Pio Moa. Entre parentesis Carrillo habla de "conversos" (los de ahora), y yo le recuerdos los de entonces, la legion innombrable de los rojos (conversos) del tardo/franquismo -por el nombre de pila se me antoja tambien el propio Pio Moa- de familias "fachas" muchos de ellos, descendientes incluso de sus propias victimas (suyas, de Carrillo), sin el concurso inestimable de los cuales, entonces, el no estaria donde esta ahora.
Y si la guerra empezo ya en el 32, como lo pretenden Carrillo y sus amiguetes "recuperacionistas , quiere decir que no hubo ni siquiera Republica ("legalmente establecida", o"consolidada"...): un fantasma a penas de nuestra memoria colectiva, un vacio (sobrecogedor) en los anales de nuestra historia. Y si no existio la Republica tampoco existio Stalin, -ni el Gulag, puro mito (de los fascistas) como el rollo de su intervencion en la guerra civil española-, por eso tal vez que "el marques" (la soga en casa del ahorcado) en sus destapes historicos tan desbocados sobre los años treinta ni lo nombra...
La serie la clausura mañana domingo Miguel Primo de Rivera: otro signo de los tiempos inequivoco, inconfundible.. Yo no se la que voy a decir o a anunciar o a declarar el sobrino (carnal) de Jose Antonio, puestos a hacer pronosticos se diria como si le quisieran hacer poner el broche final a una serie iniciada y proseguida incansablemente bajo el lema (transicional) de "ni vencedores ni vencidos". Yo conoci personalmente a Miguel Primo de Rivera, en mis años (muy) jovenes; el papel de garante supremo -en el plano de la memoria- de la democracia transicional que "nollens vollens" se le habra atribuido -desde las mas altas instancias del regimen que no rige- no creo no entanto que nadie podra ponerlo en duda.
Recuerdo ademas una acerba polemica en la que se vio envuelto en ABC, tras la publicacion de los (valiosisimos) "papeles potumos", con Manolo Valdes, falangista historico, dirigente de la Primera Linea durante la Republica y amigo personal de Jose Antonio. La piedra de escandalo de la polemica aquella lo fueron precisamente las matanzas de Noviembre del 36, lo que desperto en mi precisamente la memoria...La evocacion de Manolo Valdes a los "miles de los nuestros caidos en Paracuellos"...
Yo pienso sin embargo estoy intimamente convencido que aquella polemica traducia un profundo malentendido (no menos tragico) entre generaciones. Cada generacion habra traido su propia vision de la guerra civil, ha declarado con acierto Ricardo de la Cierva en sus entrevista, y Miguel Primo de Rivera, digno descendiente sin la menor duda de su ilustres precedesores, de su tio carnal y de su propio padre, (victimas "martiriales" -mencion de honor de ambos, en la evocacion- de las matanzas de Noviembre...) no habra pretendido siempre con certeza mas que hacerse el eco o el interprete de una generacion(no poco infeliz), la suya, en su papel de hombre publico....lastrado ineludiblemente no entanto -lo quiera el o no- de una mision de oraculo (profetica, de verdad y no postiza o mercenaria como la de otros), por imperativos ineludibles de un deber sagrado de memoria familiar, propia, no solo historica...
Y no creo -de ello estoy convencido, y lo digo antes de leer su entrevista- que la desierte. Si asi es, que el dios/de/la/memoria se lo premie (y si no, se lo demande)