Cayetana Álvarez de Toledo, y Peralta-Ramos y Madero, todo junto, de corrido y todo derecho. Lo que insiste y recalca ella a cada vez, como con cuidado o de miedo que se pase por alto su ascendencia argentina. Y a mucha honra. Y más honrosos sin duda todavía los esfuerzos que hace por adaptar su acento a la pronunciación española cuando habla de “yo” y de “ellos” y no de “essos” o de “sso(o)”. Y con eso y otros muchos guiños y detalles –de una tan carismática (y encantadora) personalidad- se está llevando de calle a un gran sector de la sociedad y de la opinión publica española. Ante la aprensión e inquietud y revuelo, obvios, del sector mas implacable –y guerra civilista- de sus tenaces adversarios que la esperan –¡que no se haga ilusiones!- a la vuelta de la esquina, para echarle encima bólidos de los más malolientes (“boules puantes” en francés), como sus (presuntos) lazos familiares con las Juntas militares argentinas. ¿No te arredres Cayetana, que tienes más seguidores –y admiradores (…) de los que tú misma te imaginas!
Marcel Lefebvre, durante la misa de Lille (29 de abril 1976) que selló su ruptura con la Iglesia oficial y el pontífice Pablo VI que le acababa de suspender “a divinis. En aquel acto de gran repercusión (polémica) en los medios españoles de inicios de la Transición –que empezaron a tildar a sus seguidores de “lefebvristas”-, el obispo francés tuvo palabras de elogio hacia la figura del general Franco y a la Junta militar argentina, ante el gran revuelo de los medios de lengua francesa. Unos meses mas tarde se procedería a la fundación en Buenos Aires de un seminario y de la rama argentina de su Fraternidad, con el concurso del “abbé” Jean Michel Faure –hoy obispo tradicionalista-, y del autor de estas líneas. En la Argentina pues de la Primera Junta, del General Videla
(No es Perón -con bigote-, aunque lo parezca) Teniente coronel Jorge Osinde, de la vieja guardia –política y sindical- peronista. Llevó hasta hoy el sambenito a rastras (entre otros) de principal responsable de la masacre de Ezeiza (20 de junio 1973), cuando la llegada –al aeropuerto de Buenos Aires- del general Perón tras su largo exilio español, en la Segunda Presidencia. Y a la vez, de la guerra civil larvada que se siguió al interior del movimiento justicialista, de preludio a su vez a la guerra (justa) de los militares, en las Juntas (operativo anti-terrorista) Y en un relato (argentino) de aquellos acontecimientos se recogía la escena en la que aquel militar peronista (de derechas) observaba de mirada sombría y amenazadora, tras un mitin presidencial, el alejarse del cortejo de los Montoneros (juventud dela izquierda peronista), con sus cantos y eslóganes desafiantes –y amenazas de muerte (….)-, tan característicos de aquella época, mientras que el General Perón en el otro lado de la escena se dirigía a él, declarando en publico: “¡Mucho cuidado con mis chicos!” (o algo así) Lo que algunos interpretaban como una advertencia y otros en cambio -entre ellos yo-, como una mera coartada (hipócrita y demagógica) de la estrategia maquiavélica de regreso al poder del general, que contaba con el sacrificio -plenamente consentido por él- de ese segmento importante de la juventud argentina (de la izquierda peronista) Y quien declaraba por aquel entonces, que “en otras circunstancias él hubiera sido el primer Fidel Castro de América (…)
General Jorge Rafael Videla, presidente de la Argentina en la Primera Junta Militar (29 de marzo de 1976, 29 de marzo de 1981) Militar insigne, patriota y hombre de honor. Nunca reconoció ninguno de los cargos de los que se le acusaban (tras la guerra de las Malvinas). De guerra justa –y no “sucia- habló en su defensa. Asumiendo y justificando así unos operativos y unos métodos antiterroristas –contra un fenómeno de guerilla urbana e insurgencia (armada) juvenil sin parangón en movimientos europeos comparables de aquella época, ni en Francia ni en Italia ni en España-, que venían en parte inspirados de la actuación del ejército francés durante la guerra de Argelia. El (escandaloso) acoso judicial del que se vio blanco –tras el indulto del que benefició del presidente Saúl Carlos Menem- y su condena y su suerte final (y linchamiento consiguiente en los medios de allí, y no digamos acá) es algo inseparable del contexto en el que todo aquello tuvo lugar, de la derrota en las Malvinas (y de la guerra civil espaola interminable, faltaría) Y es todo ello inseparable también –y el rigor a su vez del que se vio blanco comparado a la suerte reservada a otras figuras de las Juntas- de su condición de argentino de ascendencia española (no criolla o mestiza) He dicho (A ti, Cayetana, va dedicada esta pagina de historia argentina que es en parte la mía)
(Continúa) (…)
Explicándome a la opinión pública española tras mi autoexilio, con mis crónicas de Bruselas
domingo, junio 28, 2020
viernes, junio 26, 2020
¿VERGÜENZA RACIAL EN FRAY JUNÍPERO SERRA?
Estatua de Fray Junípero Serra, blanco de agresión iconoclasta en los Estados Unidos, ante el silencio clamoroso de los hispanos. ¿De qué nos quejamos? No hacen más que seguir el ejemplo nuestro (en el Valle de los Caídos) ¿Y de que extrañarse también? La evangelización de los misioneros se tradujo en un mestizaje en masa que renegaba (en el fondo) de la Conquista –y de la memoria de los conquistadores-, como el único medio de redimir o de rescatarnos de aquella, calificada hoy por el actual pontífice –tras las huellas de Bartolomé De las Casas , camino de los altares (y franciscano también)- de “crimen de guerra?¡¡¡Vergüenza racial (bloede schande), el mestizaje español de America!!!
Fray Junípero Serra, nombre hondo anclado en nuestra memoria y especialmente señalado en los libros de Historia (en lengua española), viene siendo blanco en los últimos días de agresiones iconoclastas en España y en America. "Escribir peligrosamente", así glosé yo unos artículos que escribí en este blog, uno sobre las raíces –religión y nacionalidad- del franco/argelino Zinedine Zidane casado con una “andaluza” –léase (en su mente) "andalusí"- de la emigración en Francia (años setenta), y otro sobre la temática –por antonomasia peligrosa- de los quinquis o “mercheros”, en un obituario de uno de los miembros más emblemáticos de dicha comunidad –o grupo étnico/racial-, Paco, (el) de Lucía, el célebre guitarrista o “tocaor”, casado con la hija (única) del general Varela (que me habrán valido, el uno como el otro, unas cifras récord, con mucho, de visitas) Y lo de temática peligrosa no lo digo por el perfil biográfico –perfectamente pacifico- del monje y misionero franciscano, sino por lo que para muchos, hoy por hoy, mas que nada simboliza. Y me refiero a la llamada Evangelización/americana que vino a sustituir, en una segunda fase, a la Conquista de America, y de la que diserté en un articulo de hace ahora seis años con el que se puso fin (abrupto) a mi colaboración semanal en la páginas (web) de “Minuto Digital”, de lo que nunca se me dio razones y de lo que por lo tanto me siento en derecho de atribuirlo al articulo que publiqué entonces allí con el titulo elocuente de por si, “Calumnias del padre las Casas e inmigración masiva”. Donde vertí –con el nexo causal de telón de fondo, entre el buenismo católico/romano y la inmigración en masa (y en curso) en Europa afro/musulmana.
Un flujo de ideas que venia yo defendiendo desde hacia tiempo y que recogí de forma más sintética y ordenada en mi libro “Krohn el cura papicida”, en uno de sus capítulos no menos elocuente, “Mi opción por Europa de preferencia a la América ex hispana”, donde denunciaba (por mi cuenta y riesgo) lo que tuvo de rebelión mestiza antiespañola –a manos de los criollos- la (llamada) Emancipación americana, y el papel de instigador que en ello cupo al padre Bartolomé de Las Casas, y por encima de él. a la llamada –y nunca resuelta hasta hoy- Controversia (o Junta) de Valladolid (1550), donde se enfrentaron dialécticamente los defensores y adversarios de la Conquista, y de la que salió vencedor en la practica el mencionado franciscano como lo ilustra el hallarse –tantos siglos después bajo el pontificado del papa Francisco- camino de los altares (…) Y en la que se vendría a sancionar –o canonizar-, una versión histórica en la que se condenaba la Conquista en su primera fase –de “encomiendas” (a las que definí como un “apartheid de rostro humano”)-, la cual se veía (sólo) redimida por una segunda fase –de Evangelización- caracterizada por un mestizaje en masa, de resultas éste no de un fenómeno (natural, histórico y biológico a la vez) de fusión de razas, sino inspirada en la predicación de misioneros (como fray Junípero) y en un complejo de culpa colectivo –de raíz judeo/cristiana- en donde el mestizaje aquel venia como a redimir o a rescatar el pecado colectivo –o “crimen de guerra” (en terminología del papa actual)-, y lo que daría lugar al fenómeno social de los criollos, y de su crucial protagonismo en la rebelión mestiza antiespañola (americana)
“A la buena nueva de Jesús –dirán o glosarán aquí algunos ante estos asertos tan crudos- sucedió la de Pablo, la peor de todas”, como estoy yo tentado de glosar también, parafraseando los párrafos mas celebres y divulgados de Nietzsche en “El Anticristo”. Y así me asumo y así me veo hoy, cierto, como "un profeta de calamidades" –en la terminología progre contra la minoría tradicionalista (o “conservadora”) en el concilio vaticano segundo, o como una heraldo de malas/nuevas, y de “la peor de todas”: de lo que tuvo de históricamente errado, de funesto, en suma, de vergüenza racial (sic) –"bloede schande"- la Evangelización de América. Tales aguas, tales lodos, y así el misionero franciscano ejemplar que tanto hizo por los indios hasta predicar el amor –y la cópula sexual- con ellos, se ve hoy defenestrado y tratado de racista (sic), en el silencio clamoroso de hispánicos de toda laya, de los que le deben su supervivencia y el haberles evitado -él y sus hermanos en la fe- el genocidio que reservó la evangelización protestante a las comunidades indígenas.
Los pueblos que no aprenden de la Historia están condenados a repetirla- Y así es como se me antoja que hay que interpretar o reinterpretar –sin tabúes ni complejos- las voces destempladas de esas pasionarias desaforadas que aplauden en los medios y hasta en el Congreso, las defenestraciones iconoclastas en los Estados Unidos de América. Visión critica (sic), o reescritura o revisión de la Historia, sí. Pero sin agresión -ni furia- iconoclasta. Como en Estados Unidos hoy, y ayer, en Flandes (hoy Bélgica)
Fray Junípero Serra, nombre hondo anclado en nuestra memoria y especialmente señalado en los libros de Historia (en lengua española), viene siendo blanco en los últimos días de agresiones iconoclastas en España y en America. "Escribir peligrosamente", así glosé yo unos artículos que escribí en este blog, uno sobre las raíces –religión y nacionalidad- del franco/argelino Zinedine Zidane casado con una “andaluza” –léase (en su mente) "andalusí"- de la emigración en Francia (años setenta), y otro sobre la temática –por antonomasia peligrosa- de los quinquis o “mercheros”, en un obituario de uno de los miembros más emblemáticos de dicha comunidad –o grupo étnico/racial-, Paco, (el) de Lucía, el célebre guitarrista o “tocaor”, casado con la hija (única) del general Varela (que me habrán valido, el uno como el otro, unas cifras récord, con mucho, de visitas) Y lo de temática peligrosa no lo digo por el perfil biográfico –perfectamente pacifico- del monje y misionero franciscano, sino por lo que para muchos, hoy por hoy, mas que nada simboliza. Y me refiero a la llamada Evangelización/americana que vino a sustituir, en una segunda fase, a la Conquista de America, y de la que diserté en un articulo de hace ahora seis años con el que se puso fin (abrupto) a mi colaboración semanal en la páginas (web) de “Minuto Digital”, de lo que nunca se me dio razones y de lo que por lo tanto me siento en derecho de atribuirlo al articulo que publiqué entonces allí con el titulo elocuente de por si, “Calumnias del padre las Casas e inmigración masiva”. Donde vertí –con el nexo causal de telón de fondo, entre el buenismo católico/romano y la inmigración en masa (y en curso) en Europa afro/musulmana.
Un flujo de ideas que venia yo defendiendo desde hacia tiempo y que recogí de forma más sintética y ordenada en mi libro “Krohn el cura papicida”, en uno de sus capítulos no menos elocuente, “Mi opción por Europa de preferencia a la América ex hispana”, donde denunciaba (por mi cuenta y riesgo) lo que tuvo de rebelión mestiza antiespañola –a manos de los criollos- la (llamada) Emancipación americana, y el papel de instigador que en ello cupo al padre Bartolomé de Las Casas, y por encima de él. a la llamada –y nunca resuelta hasta hoy- Controversia (o Junta) de Valladolid (1550), donde se enfrentaron dialécticamente los defensores y adversarios de la Conquista, y de la que salió vencedor en la practica el mencionado franciscano como lo ilustra el hallarse –tantos siglos después bajo el pontificado del papa Francisco- camino de los altares (…) Y en la que se vendría a sancionar –o canonizar-, una versión histórica en la que se condenaba la Conquista en su primera fase –de “encomiendas” (a las que definí como un “apartheid de rostro humano”)-, la cual se veía (sólo) redimida por una segunda fase –de Evangelización- caracterizada por un mestizaje en masa, de resultas éste no de un fenómeno (natural, histórico y biológico a la vez) de fusión de razas, sino inspirada en la predicación de misioneros (como fray Junípero) y en un complejo de culpa colectivo –de raíz judeo/cristiana- en donde el mestizaje aquel venia como a redimir o a rescatar el pecado colectivo –o “crimen de guerra” (en terminología del papa actual)-, y lo que daría lugar al fenómeno social de los criollos, y de su crucial protagonismo en la rebelión mestiza antiespañola (americana)
“A la buena nueva de Jesús –dirán o glosarán aquí algunos ante estos asertos tan crudos- sucedió la de Pablo, la peor de todas”, como estoy yo tentado de glosar también, parafraseando los párrafos mas celebres y divulgados de Nietzsche en “El Anticristo”. Y así me asumo y así me veo hoy, cierto, como "un profeta de calamidades" –en la terminología progre contra la minoría tradicionalista (o “conservadora”) en el concilio vaticano segundo, o como una heraldo de malas/nuevas, y de “la peor de todas”: de lo que tuvo de históricamente errado, de funesto, en suma, de vergüenza racial (sic) –"bloede schande"- la Evangelización de América. Tales aguas, tales lodos, y así el misionero franciscano ejemplar que tanto hizo por los indios hasta predicar el amor –y la cópula sexual- con ellos, se ve hoy defenestrado y tratado de racista (sic), en el silencio clamoroso de hispánicos de toda laya, de los que le deben su supervivencia y el haberles evitado -él y sus hermanos en la fe- el genocidio que reservó la evangelización protestante a las comunidades indígenas.
Los pueblos que no aprenden de la Historia están condenados a repetirla- Y así es como se me antoja que hay que interpretar o reinterpretar –sin tabúes ni complejos- las voces destempladas de esas pasionarias desaforadas que aplauden en los medios y hasta en el Congreso, las defenestraciones iconoclastas en los Estados Unidos de América. Visión critica (sic), o reescritura o revisión de la Historia, sí. Pero sin agresión -ni furia- iconoclasta. Como en Estados Unidos hoy, y ayer, en Flandes (hoy Bélgica)
miércoles, junio 24, 2020
Pregunta Que Me Quema
Soledad, la de Pigmalión,
¿Por qué la quise sin igual?
¿Por qué me avergoncé de ella,
De ese amor tan puro y total?
La Soledad es libre y bella,
Y desnuda (en noche de San Juan)
Es profunda como un cielo
Y no como un pozo fatal
Y la pedí humilde perdón
De avergonzarme (¡oh carcamal!)
De haberla tanto ignorado
De no haberla sabido amar
Por esos raros complejos,
y esa obsesión (del más/allá)
Que me extraviaban lejos,
al cruce fatídico (en francés, “impassse”)
Que me hacían dudar de mí,
errar y tartamudear
Como aquel héroe antiguo
(leyenda del Santo Graal)
Que embelesado de aquella
De su belleza sin igual
Balbuceaba su nombre
Sin acertar a decirlo (a preguntar
lo único que importaba´
que da sentido a mi vida
y a la Historia en mayúsculas
de mi vida y mi raza) (astral)
Y a la Historia de tu vida´
De tu ir aquí y hasta allá
Cual corza bella (alpina)
Que no sabe más que trotar
Y esa pregunta, reina, amor,
que me hacia tanto daño (y mal)
que me quemaba los labios
Y que me impedía soñar
-porque te has ido princesa
sin dejar huella o rastro ¿verdad?-,
es pregunta que me quema
y es solo ésta, amor ¿Volverás?
¿Por qué la quise sin igual?
¿Por qué me avergoncé de ella,
De ese amor tan puro y total?
La Soledad es libre y bella,
Y desnuda (en noche de San Juan)
Es profunda como un cielo
Y no como un pozo fatal
Y la pedí humilde perdón
De avergonzarme (¡oh carcamal!)
De haberla tanto ignorado
De no haberla sabido amar
Por esos raros complejos,
y esa obsesión (del más/allá)
Que me extraviaban lejos,
al cruce fatídico (en francés, “impassse”)
Que me hacían dudar de mí,
errar y tartamudear
Como aquel héroe antiguo
(leyenda del Santo Graal)
Que embelesado de aquella
De su belleza sin igual
Balbuceaba su nombre
Sin acertar a decirlo (a preguntar
lo único que importaba´
que da sentido a mi vida
y a la Historia en mayúsculas
de mi vida y mi raza) (astral)
Y a la Historia de tu vida´
De tu ir aquí y hasta allá
Cual corza bella (alpina)
Que no sabe más que trotar
Y esa pregunta, reina, amor,
que me hacia tanto daño (y mal)
que me quemaba los labios
Y que me impedía soñar
-porque te has ido princesa
sin dejar huella o rastro ¿verdad?-,
es pregunta que me quema
y es solo ésta, amor ¿Volverás?
domingo, junio 21, 2020
NOVELA CONTRA LITERATURA EN RUIZ ZAFÓN
Ostende, paseo marítimo (la digue) A la izquierda el pasillo (interminable) de soportales que le acompaña. Teatro de mis noches de estudio –yo solo- cuando allí viví, y poblado de fantasmas más tarde cada vez que vuelvo allí (…) No menos rico de motivos de inspiración en relatos de terror que la Barcelona de la posguerra inmediata y de la guerra civil. ¿“Terror” –histórico”- apolítico en mí, guerra civilista en cambio en la novela de Ruiz Zafón?
Se ha muerto Carlos Ruiz Zafón, de un cáncer de colon –en Los Ángeles donde residía- , a los 55 años. ¡Vaya por Dios! Y no se vea un deje de ironía o falta de respeto en esta glosa funeraria, porque no hay tal, sí en cambio algo de ese halo de frustración –común o frecuente en otros por lo que leo en comentarios a su muerte en la Red- ante un autor tan vendido y tan plebiscitado (y jaleado) –en la critica, en los medios y en la Moncloa (nota bene)- del que nunca me entró ni una línea tan siquiera. Misterio de aversión, al que rindo culto y homenaje no obstante dedicándole estas líneas, a él y sobre todo a la lengua y a la literatura española –la única patria que me queda en verdad, tras tantos años de expatriación (…)- que de puertas afuera por razones literarias o muy otras tan mal que bien él llego a encarnar. Con (el) Falcones, Mendoza, Montalbán, Juan Marsé, y siguen las firmas como diria Francisco Umbral. Todo lo que la marca España -se diría- consiguio vender fuera, libros y con ellos se diria tambien toda una lengua todo un alma (colectiva) a la par. “La Sombra del viento” una obra de la que escribo sin haberla leído lo confieso, como un (callado) homenaje más que otra cosa –lo digo y lo repito.- a su autor (….) Páginas y más páginas por lo que leo, de las que cabe preguntarse si los que tanto la elogian consiguieron leerla hasta el final, o si así lo consiguieron, si ello fue por criterios o incentivos literarios u otros que no lo fueron. Misterios de guerra civil, como muchos otros, los que rodean al encadilamiento que rodea a esa novela y a ese autor. Algo rayano en la obsesión (sic) y no lo digo yo,
Se ha muerto Carlos Ruiz Zafón, de un cáncer de colon –en Los Ángeles donde residía- , a los 55 años. ¡Vaya por Dios! Y no se vea un deje de ironía o falta de respeto en esta glosa funeraria, porque no hay tal, sí en cambio algo de ese halo de frustración –común o frecuente en otros por lo que leo en comentarios a su muerte en la Red- ante un autor tan vendido y tan plebiscitado (y jaleado) –en la critica, en los medios y en la Moncloa (nota bene)- del que nunca me entró ni una línea tan siquiera. Misterio de aversión, al que rindo culto y homenaje no obstante dedicándole estas líneas, a él y sobre todo a la lengua y a la literatura española –la única patria que me queda en verdad, tras tantos años de expatriación (…)- que de puertas afuera por razones literarias o muy otras tan mal que bien él llego a encarnar. Con (el) Falcones, Mendoza, Montalbán, Juan Marsé, y siguen las firmas como diria Francisco Umbral. Todo lo que la marca España -se diría- consiguio vender fuera, libros y con ellos se diria tambien toda una lengua todo un alma (colectiva) a la par. “La Sombra del viento” una obra de la que escribo sin haberla leído lo confieso, como un (callado) homenaje más que otra cosa –lo digo y lo repito.- a su autor (….) Páginas y más páginas por lo que leo, de las que cabe preguntarse si los que tanto la elogian consiguieron leerla hasta el final, o si así lo consiguieron, si ello fue por criterios o incentivos literarios u otros que no lo fueron. Misterios de guerra civil, como muchos otros, los que rodean al encadilamiento que rodea a esa novela y a ese autor. Algo rayano en la obsesión (sic) y no lo digo yo,
miércoles, junio 17, 2020
DONALD TRUMP Y LOS SUDISTAS
Monumento ecuestre al General Lee, en Richmond (capital del Estado de Virginia) Blanco de vandalismo en los últimos días y de manifestaciones pidiendo su retirada. Los incidentes raciales –a favor de la onda de indignación y de escándalo tras la muerte de Georges Floyd- habrán puesto de manifiesto lo vivo y operante de la Memoria de los vencidos de la guerra civil americana. A la que Donald Trump respeta y se abstiene de embestir de frente, por las razones que sean (….)
En su edición de ayer el diario francés “Le Figaro” publica un reportaje sobre la polémica colateral a los incidentes de fondo racial –y de tinte "antirracista"- que tras la muerte del joven de raza negra, Georges Floyd, están sacudiendo la sociedad norteamericana de pies a cabeza. Y es por la furia propiamente iconoclasta que se está abatiendo sobre estatuas de figuras relevantes del bando sudista –de la Confederación-, de la guerra civil americana, o sin necesidad de estatuas tan siquiera. Y en la que el presidente Donald Trump está demostrando una vez más no dejarse arrastrar por la tempestad y guardar en cambio bien en su sitio la cabeza. De los generales Braxton Bragge y John Bell Hood –y Henry Louis Benning- que dan su nombre a grandes bases del ejército USA, a estatuas bien visibles de grandes figuras de la Confederación, entre los que cabe desatacar la de Jefferson Davis, presidente de la Confederación, blanco reciente de vandalismo, y la estatua ecuestre sobre todo del general Lee, amenazada de un destino análogo como lo muestran las manifestaciones en su entorno pidiendo su desaparición los últimos días, y las últimas horas (...)
En su edición de ayer el diario francés “Le Figaro” publica un reportaje sobre la polémica colateral a los incidentes de fondo racial –y de tinte "antirracista"- que tras la muerte del joven de raza negra, Georges Floyd, están sacudiendo la sociedad norteamericana de pies a cabeza. Y es por la furia propiamente iconoclasta que se está abatiendo sobre estatuas de figuras relevantes del bando sudista –de la Confederación-, de la guerra civil americana, o sin necesidad de estatuas tan siquiera. Y en la que el presidente Donald Trump está demostrando una vez más no dejarse arrastrar por la tempestad y guardar en cambio bien en su sitio la cabeza. De los generales Braxton Bragge y John Bell Hood –y Henry Louis Benning- que dan su nombre a grandes bases del ejército USA, a estatuas bien visibles de grandes figuras de la Confederación, entre los que cabe desatacar la de Jefferson Davis, presidente de la Confederación, blanco reciente de vandalismo, y la estatua ecuestre sobre todo del general Lee, amenazada de un destino análogo como lo muestran las manifestaciones en su entorno pidiendo su desaparición los últimos días, y las últimas horas (...)
martes, junio 16, 2020
"ESPAÑA SIEMPRE" ¿El OPUS DEI? (en defensa propia)
Acabo de ser objeto de un (doble) ataque –en Tweeter-, por sorpresa, lanzado por la Plataforma “España siempre”, de la que no sabía gran cosa pero de la que aprendo –en la Red- estar patrocinada por el antiguo político de la UCD –y cofundador en sus inicios de VOX (de donde más tarde se apartó) – Ignacio Camuñas, al que no conozco tampoco. Sin trampa ni cartón. No pretendo –con mis artículos en este blog y con mis sucesivas tomas de posición (de un tiempo a esta parte sobre todo)- herir los sentimientos religioso y patrióticos de nadie y menos aun de mis propios compatriotas, y si alguna vez fue así denlo por no escrito (o proferido) Tampoco pretendo “robar las esperanzas” de nadie –de católicos bautizados- ni borrarles sus horizontes de futuro. Me limito a expresar libremente mis ideas en materias (civilmente) opinables, y a asumir mi trayectoria pública y notoria, tratando de explicarla –sin justificarme de nada- lo mejor que buenamente pueda, y si ello desata la indignación o el escándalo de algunos (de buena fe), ese es su problema. Como parece que ocurre ahora con la expresión que yo utilizo a menudo –a posta- de “mi gesto de Fátima”, léase mi tentativa de atentado contra el papa Juan Pablo II (el 12 de mayo de 1982): no lo intentaría ni volvería a hacer, lo repetí en público no sé cuantas veces en vida del anterior pontífice. No me siento obligado no obstante a pedir perdón de aquello a quien sea, por tratarse de algo –el perdón- libre por definición.
domingo, junio 14, 2020
Dioses de Bruselas
¡Azúcar caliente, caliente,
Para ti amor estos versos!
(para que la emoción no huya,
escritos de prisa y corriendo).
Versos y mil otras cosas
A veces flores, otras, besos
que te mandaba yo
Y te los llevaba el viento
Corriendo amor por los aires
Como mil pájaros sueltos,
Alegres y revoltosos
Cual niños, y el pico lleno
De mis mensajes de amor
(¡Mis pájaros mensajeros!)
Que viajan y que vuelan
Alto y alto igual que sueños
Sueños de amor, mi vida,
¡jardines en el desierto!
Los de mi corazón cautivo
de tus encantos (¡ay!) preso
¿Y que me dices tú, reina
de este tiempo recio y feo?
Que nos separó de pronto
(¡invernando los recuerdos!)
¿Será un signo o augurio
de los dioses (tan secretos)
que no quieren vernos juntos
aunque se finjan contentos?
O justamente al contrario
prendas de unos dioses buenos
que no saben de otra cosa
más que de Amor (y el Sexo)
Contentos de nuestro amor
sin envidias y sin celos
Contentos de verte, bella
y cándida flor (¡te quiero!)
¡Dioses –¿o elfos?- de Bruselas
de mil esperanzas llenos!
¡Que bendicen nuestro amor
en la tierra y en los cielos!
Para ti amor estos versos!
(para que la emoción no huya,
escritos de prisa y corriendo).
Versos y mil otras cosas
A veces flores, otras, besos
que te mandaba yo
Y te los llevaba el viento
Corriendo amor por los aires
Como mil pájaros sueltos,
Alegres y revoltosos
Cual niños, y el pico lleno
De mis mensajes de amor
(¡Mis pájaros mensajeros!)
Que viajan y que vuelan
Alto y alto igual que sueños
Sueños de amor, mi vida,
¡jardines en el desierto!
Los de mi corazón cautivo
de tus encantos (¡ay!) preso
¿Y que me dices tú, reina
de este tiempo recio y feo?
Que nos separó de pronto
(¡invernando los recuerdos!)
¿Será un signo o augurio
de los dioses (tan secretos)
que no quieren vernos juntos
aunque se finjan contentos?
O justamente al contrario
prendas de unos dioses buenos
que no saben de otra cosa
más que de Amor (y el Sexo)
Contentos de nuestro amor
sin envidias y sin celos
Contentos de verte, bella
y cándida flor (¡te quiero!)
¡Dioses –¿o elfos?- de Bruselas
de mil esperanzas llenos!
¡Que bendicen nuestro amor
en la tierra y en los cielos!
martes, junio 09, 2020
ODIO ANTI-BLANCO AL REY LEOPOLDO
El buen/rey Leopoldo de los Belgas, y la amenaza de implosión de Bélgica. Sus estatuas que jalonan la capital de la UE –la cual le debe tanto- son desde hace un tiempo blanco sistemático de vandalismo, aventado ahora por la onda de protesta anti-racista –léase de racismo anti-blanco- desatada –y orquestada- a raíz de los sucesos de Minneapolis por la Prensa global americana y europea. Victima (como nosotros) de una leyenda negra alimentada en parte en los tópicos raciales –de guerra de propaganda- de la Guerra Civil americana (antiesclavistas) Como el bulo de que aquel monarca hizo exhibir personas de raza negra en el Zoológico de Bruselas. ¿Pruebas?
“Yo comparo –y cito de corrido y de memoria- con el maestro de Flemalle al rey Leopoldo II que cuando sir Stanley volvió del Congo le hizo llamar para ver si era verdad lo que había oído contar sobre las selvas vírgenes”, de lo que recuerdo haber leído de Eugenio Montes en el libro “Falange y Literatura” (de José Carlos Mainer, Labor, 1971), reproducido de una de las obras principales de aquél “El viajero y su sombra” Y el hecho de que se me halla quedado grabado denota lo poco trivial de la citación por su cargazón evocadora del personaje, y de su faceta sin par, aventurera y soñadora, y por el hondo anclaje de un texto anecdótico en apariencia en lo mas hondo de la Memoria, de españoles como de belgas. Y es sobre todo por revestirse de rabiosa actualidad con los últimos acontecimientos, con la honda de choque global,
miércoles, junio 03, 2020
MARINE SE RINDE A DE GAULLE
8 de Junio de 1970. Encuentro en el marco del castillo/parador de Santa Catalina (Jaén) de Franco y el general De Gaulle. ¿Por qué, qué fue lo que llevó a España a De Gaulle (a pocos meses de fallecer)? ¿Fue una peineta (“piez de ned”) a sus compatriotas que le acababan -por corta mayoría- de decir NO en referéndum? O, como me comentó un amigo italiano con experiencia (de alto/funcionario) en el campo de las relaciones internacionales, ¿porque veía en el Caudillo el militar vencedor en el campo de batalla, que él –pese a su talla y envergadura de estadista indiscutibles- no llegó a ser? Lo uno y lo otro tal vez, y también, lo que el propio interesado confió a uno de sus partidarios (francés) tras la visita. Que le dijo a Franco que “había sido positivo para España”. “Lo que en el fondo pienso”, continuó“¿Que habría sido de España si el comunismo allí llega a vencer?” Lo que habría aprobado y suscrito el Mariscal Pétain (…)
Agarrar el toro por los cuernos, o más modesto o crúdamente aún, ponerle el cascabel al gato, lo que me inspira el entrar al trapo “nolens volens” de la polémica desatada –y lo que dará- por la presidenta de lo que fue el Frente Nacional, que se ha desatado en un texto lleno de efluvios líricos –muy de su estilo- en homenaje al general De Gaulle, rompiendo así o consumando la ruptura más bien con su propio genitor y con el partido que hereda en línea directa de él. Y eso es lo que más comentario (de execración) me merece en ese texto y ese gesto –de un simbolismo tan extremo-, mucho más que el juicio que me pueda merecer la figura tan compleja y de aspectos o facetas discutibles del augusto general. Marine Le Pen entiende así proseguir hasta las ultimas consecuencias la “desdiabolización”, una consigna de difícil traducción –y transcripción- en español, y revestida de una fatalidad ineluctable como si le viniese dictada desde lo más alto o en el nombre de la Historia que según ella “para siempre falló”. ¿Se le pide o se le pedía tanto?
Agarrar el toro por los cuernos, o más modesto o crúdamente aún, ponerle el cascabel al gato, lo que me inspira el entrar al trapo “nolens volens” de la polémica desatada –y lo que dará- por la presidenta de lo que fue el Frente Nacional, que se ha desatado en un texto lleno de efluvios líricos –muy de su estilo- en homenaje al general De Gaulle, rompiendo así o consumando la ruptura más bien con su propio genitor y con el partido que hereda en línea directa de él. Y eso es lo que más comentario (de execración) me merece en ese texto y ese gesto –de un simbolismo tan extremo-, mucho más que el juicio que me pueda merecer la figura tan compleja y de aspectos o facetas discutibles del augusto general. Marine Le Pen entiende así proseguir hasta las ultimas consecuencias la “desdiabolización”, una consigna de difícil traducción –y transcripción- en español, y revestida de una fatalidad ineluctable como si le viniese dictada desde lo más alto o en el nombre de la Historia que según ella “para siempre falló”. ¿Se le pide o se le pedía tanto?