Portada de la edición dominical del diario Arriba del 29 de enero de 1961, tras la muerte de Humberto Delgado junto a la frontera portuguesa. Y viéndola ahora tantos años después –navegando en la Red- la reconocí sin pena, de haberla visto en casa (con once años de edad), con comentarios (familiares) a no dudar bien profusos de la noticia-, en donde aquel diario (falangista, en vías de extinción) llegaba sin falta, todos los días (…) Una tentativa (a la desesperada) de ocultamiento –apagamiento “black out”- de la (cruda) verdad de los hechos, cargada no obstante de verdades (y de Memoria) y de moraleja (sin moralina) Y ahí va la glosa (sin el menor complejo de culpa): y era del fracaso histórico de “la tercera vía” (en Portugal como en España) –(inapelablemente) sentenciada con el desenlace de la Segunda Guerra Mundial-, y de aquello de “ni de izquierdas ni derechas” (…) Lo que vienen (trágicamente) a simbolizar para muchos la vida, y la muerte del general portugués y con él, del Portugal de antes de Abril, el del “Estado Nuovo” (el de “la Vieja Señora”) ¿Queda claro ahora? (…)
Portugal, ¡Oh Portugal! como un lamento de lo más hondo, que sólo ahora me doy cuenta tras una polémica enojosa (por lo intestina o fratricida) y no poco oportuna a la vez, sobre le revolución de los claveles, lo hondo que llevamos al país vecino –y hermano (irmao) - aun sin darnos cuenta de ello algunos españoles. “Los Leger somos atlánticos de padres a hijos” escribía en sus memorias, Alexis Léger (de Saint Léger), mas conocido fuera de su pais como el poeta (premio Nobel) Saint-John Perse, nacido efectivamente en las Antillas francesas y repatriado (nota bene) a la metrópoli en un mercante español cuando el Desastre del 98 (…), y ello todo junto y bien revuelto, sus orígenes criollos (créoles) –por razón (sólo) de su lugar de nacimiento- y su memoria infantil hispana o hispánica o pro-hispana, marcarían no poco su destino e influenciarían grandemente su trayectoria como se revelaría en su actitud de neutralidad (autentica) desde su puesto superinfluyente de secretario del Quai d’Orsay (Ministerio de Exteriores francés) en una actitud inalterable e intransigente durante nuestra guerra civil –frente a las presiones de los partidarios de la intervención- del principio al fin del conflicto, lo que la izquierda francesa pese a la trayectoria irreprochablemente correcta de aquél en la Segunda Guerra Mundial (de gaullista fuera de toda sospecha), todavía hoy no le perdonan (…) Y el autor de estas líneas, al cabo de una tan larga expatriación por países del Poniente (atlántico) europeo salvo mis años suizos –la excepción que confirma la regla- me acabé asumiendo con ocasión de una cordial conversación con otro expatriado (alicantí) como lo que soy, un atlántico de pies a cabeza. Por razón no sólo de mi trayectoria sino de mi nacimiento –en Madrid- y de la “vertiente” atlántica jiennense (de la Andalucía occidental) de mi ascendencia paterna (…)
Explicándome a la opinión pública española tras mi autoexilio, con mis crónicas de Bruselas
miércoles, abril 29, 2020
viernes, abril 17, 2020
Sol de Primavera
¡Salve a ti, dios inmortal,
Sol de Primavera!
Que te creía ya muerto
¡Y hete ahí tú con más fuerza!
Brillando tú, huidizo,
como escondido (entre grietas)
en estas tierras del Norte
y estos tiempos de pandemia
y con ese ritmo y compás
¡Qué música! ¿mora? ¡nuestra!
Fundiendo malentendidos
Y sus secuelas funestas
Mientras me encamino hacia ti
Siempre fiel (¿y qué te piensas?)
Lo que me pide a mí el Cuerpo
(¡Estrella Polar, Alma Eterna!)
¡Religión de nuestros cuerpos
(Santuarios de belleza
Templos (griegos) del Espíritu
Entre Romas y entre Atenas!)
Que me arropa e ilumina
(¡oh cuánto!) mi vida entera
Y a la que rendí honores
O eso quise (¡que lo sepas!)
a la Verdad de mí mismo
(de mis fuerzas y flaquezas)
La Verdad de mi amor por ti
tan puro ¡Blanca Doncella!
Y de su danzar ratonil,
la música se va, mientras,
entre la tierra y el mar
Y tantas cosas con ella
Y me recojo y me digo
Que me faltó, sí, entereza,
En mis luchas (y en mis odios) (...)
Que mantengo contigo, mi Reina
¡Amor redentor, Eros, de esta era!
Sol de Primavera!
Que te creía ya muerto
¡Y hete ahí tú con más fuerza!
Brillando tú, huidizo,
como escondido (entre grietas)
en estas tierras del Norte
y estos tiempos de pandemia
y con ese ritmo y compás
¡Qué música! ¿mora? ¡nuestra!
Fundiendo malentendidos
Y sus secuelas funestas
Mientras me encamino hacia ti
Siempre fiel (¿y qué te piensas?)
Lo que me pide a mí el Cuerpo
(¡Estrella Polar, Alma Eterna!)
¡Religión de nuestros cuerpos
(Santuarios de belleza
Templos (griegos) del Espíritu
Entre Romas y entre Atenas!)
Que me arropa e ilumina
(¡oh cuánto!) mi vida entera
Y a la que rendí honores
O eso quise (¡que lo sepas!)
a la Verdad de mí mismo
(de mis fuerzas y flaquezas)
La Verdad de mi amor por ti
tan puro ¡Blanca Doncella!
Y de su danzar ratonil,
la música se va, mientras,
entre la tierra y el mar
Y tantas cosas con ella
Y me recojo y me digo
Que me faltó, sí, entereza,
En mis luchas (y en mis odios) (...)
Que mantengo contigo, mi Reina
¡Amor redentor, Eros, de esta era!
jueves, abril 16, 2020
GESTAPO ¡REVISIÓN YA!
Rudolf Diels, primer jefe de la Gestapo (el rostro tallado de las cicatrices del deporte de esgrima que practicaba, en el espíritu de la época) Policía brillante antes del advenimiento del nacionalsocialismo e ilustración elocuente de algo cuidadosamente silenciado por la historiografía, y fue que la Gestapo –en el ámbito policial, lo mismo que se puede decir en el castrense de la Wehrmacht- no fue más que un puro producto o legado de la Prusia (imperial) de antes del régimen nazi. Policía de Estado, la Gestapo, brillante y eficiente en sus métodos, y como tal, elemento de moderación (sic) -Jean Marie Le Pen díxit- dentro del lado (moderno) represivo del régimen nazi y de la espiral de represalias –frente al terrorismo sangriento y sin límites ni control de la Resistencia- que conocieron los países europeos durante la Segunda Guerra Mundial bajo ocupación alemana. Moraleja, que hay que hacer de ella un demonio, encarnación del Mal (en la Historia), y sólo así poder erigir a los blancos u objetivos de sus capturas –como Companys- en victimas inocentes sin mancha de culpa alguna
Me gustan (como ya aquí lo dije) la música y la letra de las canciones de Joaquín Sabina, pero no soy –que conste- como él, él que lo negaba o lo “niega todo” y yo que lo asumo todo en cambio –semper idem-, quiero decir de lo que soy y de mi pasado que llevo a cuestas, y aunque me pese a veces más de la cuenta no tengo otra opción -to be or not to be- aunque me vea solo sin mas testigos entre cielos y tierra, y sin más compañía que las paginas de este blog y sus lectores anónimos que sabrán (por fin) comprender por qué pienso y porque siento esas cosas tan aciagas, tan funestas (en apariencia) y por qué las publico o las cuelgo aquí y sabrán descubrir la esperanza que me anima, la que ellas transpiran, tal vez lo que más escandaliza a esa legión de troles que me siguen y persiguen –aquí también- se diría que hasta el fin. “Lo asumo todo”, sí,
sábado, abril 11, 2020
¡¡¡VOLVERA A REÍR LA PRIMAVERA!!!
Jorg (Adolf-Joseph) Lanz Von Liebenfels, antiguo monje cisterciense austriaco exclaustrado, fue al decir de muchos, mentor principalísimo de Adolfo Hitler en sus inicios y figura central en los orígenes del nacionalsocialismo. Dirigió la revista “Ostara”, (“Primavera”) en la que difundía un neo paganismo (racial) de cultura católica -y de fondo germanista-, que se reviste –leyendas y caricaturas (y calumnias) a parte por cuenta de su fundador – de la más rabiosa actualidad en nuestros días. En estas fiestas de la Pascua judeocristiana, ensombrecidas por la pandemia. Hitler y otro de sus mentores, Dietrich Eckart, reconocieron ser lectores asiduos de su revista (….) El monje exclaustrado o el sacerdote/secularizado –Preziosi, Liebenfels- son (con perdón de la Bien/pensancia) arquetipos insoslayables tanto en los orígenes del nacionalsocialismo como en la fase final (“La Republica Social de Saló”) del régimen fascista. Y sin la dialéctica (anti paulina) que inevitablemente les rodea, sus figuras y su innegable protagonismo, nada se explica (…) Los pueblos que no aprenden de la Historia –y de sus actores- están condenados a repetirla
(…)
“El Nombre de la Rosa”, una novela de culto –junto con el film en que se inspira- gravitando más de cerca en la redacción de este articulo –como en el conjunto de mi trayectoria- mucho mas de lo que cuando me puse a escribirlo asi yo lo pensaba. ¿Cómo no pensar, es cierto, en el mentor de Hitler (del que me ocupo en la presentación grafica de esta entrada), el monje cisterciense germanista y neopagano exclaustrado precursor intelectual (y espiritual) del movimiento nazi, y director –y fundador. de la revista Ostara con el telón de fondo ambiental –una abadía benedictina de la Baja Edad Media que tiene de hecho de modelo de inspiración el Kloster de Eberbach (ver foto de abajo) en Alemania no lejos de la frontera italiana-, de la dicha novela –traducida al francés (lo que me la dio a conocer) -tras haber sido publicada un año antes- a pocas semanas pues de mi gesto de Fátima y también con alguno de sus personajes más celebres y emblemáticos y más estigmatizados –el uno como el otro- en la Literatura el primero como el segundo lo habrá sido en la Historia- tales que Jorge de Burgos (léase Borges en la vida real) el monje ciego y asesino (e incendiario) y español para mas inri y para más señas (….) Como no podía menos viniendo de quien venia, es lo que viene irresistiblemente a la mente a la vista de su autor el novelista italiano y filosofo e investigador y erudito Umberto Eco.
Viejo conocido del que esto escribe que recién llegado a Bélgica pude asistir a una conferencia que dio aquel ante un publico de jóvenes universitarios (de la Universidad Libre de Bruselas) en el centro de la capital belga. Y al que oí de mis propios oídos algo impensable en otro que no hubiera sido él –icono de lo bien/pensancia (de izquierdas) y (lo que no se sabía aquí entonces) con las credenciales (democráticas) que le daba su vieja militancia comunista (….), y como tal pues, fuera de toda sospecha ….) Y era –mezclado con unas evocaciones en extremo incorrectas, de Giuseppe Bottai por ejemplo, figura emblemática (aunque incalificable por lo heterodoxo) del régimen fascista-, que declaró allí -a modo de hipótesis aunque fuera- que el nacionalsocialismo se remontaba (sic) a una Tradición primordial, lo que hacía también inevitablemente pensar en unas resonantes declaraciones –en el seminario alemán Der Spiegel- del filósofo alemán Martín Heidegger (a finales de los ochenta, en sus últimos días), donde aquel entroncaba al nacionalsocialismo con la tradición filosófica (….) Y más cercano aún si cabe –de mi y de mi trayectoria y de los trances más divulgados de la misma- lo era el telón de fondo histórico (y doctrinal) de la novela, no otro que la celebre querella (de la pobreza) de los “espirituales” franciscanos que me tenia literalmente obsesionado – como se muestra enn uno de mis escritos de antes de aquello, que por ahí circulan. Uno de los puntos mas oscuros y enigmáticos e irresuelto a fe mía hasta hoy de la historia de la Iglesia católica (diga lo que diga y con los que no voy a discutir, la bien/pensancia política e histórica y teológicamente correcta).
Es un hecho historico irrefutable como sea, que la eclosión del movimiento franciscano y de su pauperismo bíblico -y proto/marxista o judeocristiano. puso un punto final al ideal (caballeresco y aristocrático, europeo y occidental) de la Cruzada –y a la vez (nota bene) de su versión española la Reconquista- que encarnaban las Ordenes militares, y en particular la Orden del Temple, la principal de todas ellas, -o la de los Caballeros Teutónicos-, que sirvieron al nacionalsocialismo (y ya digo que no discuto) de fuente mas o menos directa e inmediata de inspiración, como lo ilustra una de las fotos para la posteridad del fundador y director de Ostara, la mas difundida sin duda de todas ellas. Y es que la eclosión del movimiento franciscano que portaba la división intestina en su seno –como la escisión de los “espirituales” lo mostró de forma tan flagrante y a las claras- venia a sellar la muerte (a corto o a largo plazo) de la Iglesia y fue en la medida que con su fanatismo doctrinal y su radicalismo social (subversivo), no denunciaban menos el compromiso histórico –entre el viejo paganismo y el mensaje evangélico, del Evangelio de Jesus y no el de Pablo que Nietzsche califica (en el Anticristo) en oposición frontal a aquel -de “disangelio-, que vino a fundar y a cimentar la civilización cristiano/europea.Y todo ese conflicto histórico y doctrinal fundamentalmente irresuelto vino bruscamente a resurgir con la emergencia de los nazi/fascismos, y en el neo-paganismo racial (antes que racista) que fue uno de sus perfiles mas visibles y llamativos, De innegable cultura católica y por ende antiprotestante. Lo que ilustra a su vez el carácter de guerra de religión –Dominique Venner díxit- que tuvo la Segunda Guerra Mundial y su confrontación ideológica abierta entre marxismo y democracia por un lado y por el otro, los nazi/fascismos
Cegama (provincia de Guipuzcoa), patria chica del general Zumalacárregui y etapa en el Camino Real y también, en el Camino de Santiago, en la confluencia de las vertientes cantábrica y mediterráneas, y como tal uno de los raros sitios del país vasco de paisajes (insólitos) con amaneceres de cielo azul de alborada nórdica (y mediterránea), y donde la primavera reía como en pocos (bellos) paisajes del Norte (o Sur) –del Oeste o del Levante- de España. Nada de extraño ni anecdótico pues que inspirase tanto y a tantos poetas, entre ellos a la Corte literaria de José Antonio –a través de la música “Amanecer en Cegama”-, entre los que figuraban los autores del Cara al Sol. ¿Falange pagana? Un culto a la Primavera –a la fiesta de Pascua en el paganismo antiguo- innegablemente presente, eso es cierto, en su mística guerrera y patriótica –y erótica, y heroica-y en su (clásica) simbología, lo que vino paulatinamente a enterrar la moral judeocristiana al amparo de la desfalangistización –y de la clericalizacion en paralelo- de la España nacional tras la derrota del 45: un resurgir del culto pagano a la Belleza y a la Primavera (Giovinezza) lo que cabe entrever o vislumbrar tras el paso –como el del Mar Rojo- de este invierno, el más macabro y más lúgubre y mas fúnebre que muchos hayamos conocido. Y en las iglesias que vaciaron la pandemia y antes que ella, los vendavales del concilio, tras el balance –de fracaso y de derrota, y de tanta esperanza frustrada- del compromiso histórico, -el del renacer pagano con el judeo cristianismo- que trajo consigo en Italia como en España, el advenimiento del fascismo. Aviso a los navegantes, y a los mercaderes de esperanzas
.../...:...::/::::
Abadía cisterciense de Eberbach, en Alemania, que sirve de telón de fondo ambiental al "Nombre de la Rosa". Una tentativa –por cierto bastante lograda-, el film como la novela, de criminalizar por la vía de la novela ("negra") histórica toda una orden religioso/militar (fundada por Berrnardo de Claraval) y a la vez de toda una civilización, la nuestra, que en ellas se asentaba. Antros misteriosos, enfangados en el crimen y consumidos en el fuego inquisidor y situados –como por casualidad- como el bunker preferido del Fuhrer, en lo alto de las montañas. A la medida de los seres –monstruosos por propia definición, de novela o película de miedo- que los habitaban, como el mentor del Fuhrer y director de la revista Ostara. Al que se caricaturiza y ridiculiza –hasta la calumnia y la infamia- porque no se le puede acusar de nada. (más que de delito de lesa bien/pensancia) Perfil religioso en algunas de las más emblemáticas de sus figuras (secularizasas o exclaustradas), una vía de revisión histórica llena de promesas y todavía por explorar por uenta de los nazifascismos.. Mayormente por razón de interdictos canónicos o de censura eclesiástica (…)
(…)
“El Nombre de la Rosa”, una novela de culto –junto con el film en que se inspira- gravitando más de cerca en la redacción de este articulo –como en el conjunto de mi trayectoria- mucho mas de lo que cuando me puse a escribirlo asi yo lo pensaba. ¿Cómo no pensar, es cierto, en el mentor de Hitler (del que me ocupo en la presentación grafica de esta entrada), el monje cisterciense germanista y neopagano exclaustrado precursor intelectual (y espiritual) del movimiento nazi, y director –y fundador. de la revista Ostara con el telón de fondo ambiental –una abadía benedictina de la Baja Edad Media que tiene de hecho de modelo de inspiración el Kloster de Eberbach (ver foto de abajo) en Alemania no lejos de la frontera italiana-, de la dicha novela –traducida al francés (lo que me la dio a conocer) -tras haber sido publicada un año antes- a pocas semanas pues de mi gesto de Fátima y también con alguno de sus personajes más celebres y emblemáticos y más estigmatizados –el uno como el otro- en la Literatura el primero como el segundo lo habrá sido en la Historia- tales que Jorge de Burgos (léase Borges en la vida real) el monje ciego y asesino (e incendiario) y español para mas inri y para más señas (….) Como no podía menos viniendo de quien venia, es lo que viene irresistiblemente a la mente a la vista de su autor el novelista italiano y filosofo e investigador y erudito Umberto Eco.
Viejo conocido del que esto escribe que recién llegado a Bélgica pude asistir a una conferencia que dio aquel ante un publico de jóvenes universitarios (de la Universidad Libre de Bruselas) en el centro de la capital belga. Y al que oí de mis propios oídos algo impensable en otro que no hubiera sido él –icono de lo bien/pensancia (de izquierdas) y (lo que no se sabía aquí entonces) con las credenciales (democráticas) que le daba su vieja militancia comunista (….), y como tal pues, fuera de toda sospecha ….) Y era –mezclado con unas evocaciones en extremo incorrectas, de Giuseppe Bottai por ejemplo, figura emblemática (aunque incalificable por lo heterodoxo) del régimen fascista-, que declaró allí -a modo de hipótesis aunque fuera- que el nacionalsocialismo se remontaba (sic) a una Tradición primordial, lo que hacía también inevitablemente pensar en unas resonantes declaraciones –en el seminario alemán Der Spiegel- del filósofo alemán Martín Heidegger (a finales de los ochenta, en sus últimos días), donde aquel entroncaba al nacionalsocialismo con la tradición filosófica (….) Y más cercano aún si cabe –de mi y de mi trayectoria y de los trances más divulgados de la misma- lo era el telón de fondo histórico (y doctrinal) de la novela, no otro que la celebre querella (de la pobreza) de los “espirituales” franciscanos que me tenia literalmente obsesionado – como se muestra enn uno de mis escritos de antes de aquello, que por ahí circulan. Uno de los puntos mas oscuros y enigmáticos e irresuelto a fe mía hasta hoy de la historia de la Iglesia católica (diga lo que diga y con los que no voy a discutir, la bien/pensancia política e histórica y teológicamente correcta).
Es un hecho historico irrefutable como sea, que la eclosión del movimiento franciscano y de su pauperismo bíblico -y proto/marxista o judeocristiano. puso un punto final al ideal (caballeresco y aristocrático, europeo y occidental) de la Cruzada –y a la vez (nota bene) de su versión española la Reconquista- que encarnaban las Ordenes militares, y en particular la Orden del Temple, la principal de todas ellas, -o la de los Caballeros Teutónicos-, que sirvieron al nacionalsocialismo (y ya digo que no discuto) de fuente mas o menos directa e inmediata de inspiración, como lo ilustra una de las fotos para la posteridad del fundador y director de Ostara, la mas difundida sin duda de todas ellas. Y es que la eclosión del movimiento franciscano que portaba la división intestina en su seno –como la escisión de los “espirituales” lo mostró de forma tan flagrante y a las claras- venia a sellar la muerte (a corto o a largo plazo) de la Iglesia y fue en la medida que con su fanatismo doctrinal y su radicalismo social (subversivo), no denunciaban menos el compromiso histórico –entre el viejo paganismo y el mensaje evangélico, del Evangelio de Jesus y no el de Pablo que Nietzsche califica (en el Anticristo) en oposición frontal a aquel -de “disangelio-, que vino a fundar y a cimentar la civilización cristiano/europea.Y todo ese conflicto histórico y doctrinal fundamentalmente irresuelto vino bruscamente a resurgir con la emergencia de los nazi/fascismos, y en el neo-paganismo racial (antes que racista) que fue uno de sus perfiles mas visibles y llamativos, De innegable cultura católica y por ende antiprotestante. Lo que ilustra a su vez el carácter de guerra de religión –Dominique Venner díxit- que tuvo la Segunda Guerra Mundial y su confrontación ideológica abierta entre marxismo y democracia por un lado y por el otro, los nazi/fascismos
Cegama (provincia de Guipuzcoa), patria chica del general Zumalacárregui y etapa en el Camino Real y también, en el Camino de Santiago, en la confluencia de las vertientes cantábrica y mediterráneas, y como tal uno de los raros sitios del país vasco de paisajes (insólitos) con amaneceres de cielo azul de alborada nórdica (y mediterránea), y donde la primavera reía como en pocos (bellos) paisajes del Norte (o Sur) –del Oeste o del Levante- de España. Nada de extraño ni anecdótico pues que inspirase tanto y a tantos poetas, entre ellos a la Corte literaria de José Antonio –a través de la música “Amanecer en Cegama”-, entre los que figuraban los autores del Cara al Sol. ¿Falange pagana? Un culto a la Primavera –a la fiesta de Pascua en el paganismo antiguo- innegablemente presente, eso es cierto, en su mística guerrera y patriótica –y erótica, y heroica-y en su (clásica) simbología, lo que vino paulatinamente a enterrar la moral judeocristiana al amparo de la desfalangistización –y de la clericalizacion en paralelo- de la España nacional tras la derrota del 45: un resurgir del culto pagano a la Belleza y a la Primavera (Giovinezza) lo que cabe entrever o vislumbrar tras el paso –como el del Mar Rojo- de este invierno, el más macabro y más lúgubre y mas fúnebre que muchos hayamos conocido. Y en las iglesias que vaciaron la pandemia y antes que ella, los vendavales del concilio, tras el balance –de fracaso y de derrota, y de tanta esperanza frustrada- del compromiso histórico, -el del renacer pagano con el judeo cristianismo- que trajo consigo en Italia como en España, el advenimiento del fascismo. Aviso a los navegantes, y a los mercaderes de esperanzas
.../...:...::/::::
Abadía cisterciense de Eberbach, en Alemania, que sirve de telón de fondo ambiental al "Nombre de la Rosa". Una tentativa –por cierto bastante lograda-, el film como la novela, de criminalizar por la vía de la novela ("negra") histórica toda una orden religioso/militar (fundada por Berrnardo de Claraval) y a la vez de toda una civilización, la nuestra, que en ellas se asentaba. Antros misteriosos, enfangados en el crimen y consumidos en el fuego inquisidor y situados –como por casualidad- como el bunker preferido del Fuhrer, en lo alto de las montañas. A la medida de los seres –monstruosos por propia definición, de novela o película de miedo- que los habitaban, como el mentor del Fuhrer y director de la revista Ostara. Al que se caricaturiza y ridiculiza –hasta la calumnia y la infamia- porque no se le puede acusar de nada. (más que de delito de lesa bien/pensancia) Perfil religioso en algunas de las más emblemáticas de sus figuras (secularizasas o exclaustradas), una vía de revisión histórica llena de promesas y todavía por explorar por uenta de los nazifascismos.. Mayormente por razón de interdictos canónicos o de censura eclesiástica (…)
domingo, abril 05, 2020
¡¡¡PEDRO SÁNCHEZ DIMISION Y RECLUSIÓN!!!
Campos de reclusión. La formula mágica que Pedro SÁNCHEZ -con desfachatez y sin pudor y en una vulneración flagrante de la Constitución (arts. 9 y 55.1)- viene a ofrecernos, sin más. ¿Dónde están ahora los “bisontes de la juridicidad” –tales que OSSORIO Y GALLARDO (como Falange Española lo etiquetó)- que reprochaban (hipócritamente) al monarca su violación de la Constitución con la Dictadura? (lo que llevó a donde nos llevó)
“Los pueblos que no aprenden de la Historia” (…/…), de la ajena o de la suya propia habría que glosar el famoso adagio (de Oswald Spengler) que tanto aficiono de citar y evocar aquí. Y los fantasmas de la Historia moderna casi contemporánea se despiertan, es verdad, y se agitan y soliviantan ante el anuncio –¿propuesta real o globo sonda a un (simple) efecto de amenaza e intimidación?- de Marlaska, ministro (socialista) del Interior, de encerrar –o “aparcar” como le dicen aquí- a una gran parte de la población –los llamados “no sintomáticos”- en recintos cerrados (palacios de congreso, polideportivos y demás) para hacer frente a la amenaza del corona virus y frenar así su expansión. ¿Campos de concentración como los que idearon por vez primera en la historia los ingleses –y más de medio siglo antes del Congreso de Nuremberg que juzgó y condenó su uso por la primera vez- en la guerra de los boers (1877-1902) en África del Sur? No creo en las meigas pero hay las.
O digamos, para no incurrir en la acusación de que exageramos -y con el propósito de reducir o conducir a limites y dimensiones más modestas la comparación-, en centros de detención preventiva (sic), en lugares de hacinamiento o si se prefiere –y (se me concederá) sé un poco de lo que hablo-, en patios (improvisados) de prisión. Con el hacinamiento propio de esos lugares y situaciones, con su promiscuidad, y presión psicológica y su tufo a marginalidad (legal o social) difícil de soportar y superar por personas “de orden”-léase normales, o por trillar (…), la inmensa mayoría de la población-, en lo que el filosofo de izquierdas francés (fuera pues de toda sospecha) Michel Foucault llamó en su obra “Historia de la Locura”, la fuerza de chantaje del “sistema” (democrático) –la Edad clásica como él la llama- , a través de las cárceles de derecho común y de la perspectiva de la pena de encarcelamiento)- sobre la masa de ciudadanos normales, ajenos e ignorantes y desprevenidos e indefensos cara a esos mundos y a esos ambientes –y a sus leyes no escritas, y por ende más brutales e implacables que las otras, por propia definición-, y del riesgo o la amenza pues apenas solapada, a su integridad física, no solo moral y psicológica de un choque (y desarraigo) tan brutal e inesperado. Y es con la fuerza moral y de convicción que le daba al filosofo citado (y profesor universitario) su anterior experiencia profesional, de educador de prisión.
Y es como lo que ahora parece que nos quieren vender, vendría a suponer para el ciudadano español medio del tipo digamos normal –no marginal (…)- , en clara ruptura todo ello de las pautas de comportamiento –individuales como colectivas- propias a las formas (normales) de convivencia –“en casa” (o en familia) (no en cárceles ni en saunas, o que sé yo)- en las que se habrá visto educada (antes y después de la llegada de la democracia) la inmensa mayoría de la población, lo que vienen aún más a ilustrar si cabe lo que estos “estados de alarma” que el gobierno de Pedro Sánchez /tan obstinadamente) nos vende sin el menor pudor, esconden agazapados de estados de sitio o de excepción (…)
Campos de concentración ingleses –primeros de la Historia- durante la guerra de los “boers” en África del Sur (1877-1902) en la que estuvo (nota bene) Winston Churchill de corresponsal de guerra- donde “aparcaban” juntas, en plan de hacinamiento y en régimen de excepción –y de estado de guerra-, la población blanca y de raza negra y donde estragaron las epidemias y la mortandad infantil. Niños y grandes, mujeres y niños, ricos y pobres, obreros y clase media en régimen ("chino" o anglosajón) de “melting pot” bajo su férula y su timón, ¿es a donde nos quiere llevar el delirio igualitario –y guerra civilista. (y liberticida) del presidente (“okupa”)? ¿Experimento -de ingeniería social- que en una loca huida hacia delante, quiere ensayar Pedro Sánchez con el conjunto de la población? ¿Queríais arroz, ¡¡¡tres tazas, ilusos demócrata/españoles!!! Que algunos no miran en mientes ni tienen (por las trazas) ni escrúpulos ni complejos, en su voluntad fanática y guerra civilista de ganar ochenta años mas tarde –y al amparo de la guerra bacteriológica- la (interminable) guerra civil (del 36)? ¡¡¡Pedro Sánchez, reclusión y dimisión!!!
Y con la amenaza en el horizonte (eso que no falte) de un resurgir del choque o enfrentamiento ideológico –de izquierdas y derechas), o de/clase –de obreros y empleados de los servicios, frente a las clases medias- léase de la (interminable) guerra civil (del 36). Eso es, no nos engañemos, la formula mágica como única receta que un gobierno desbordado y (políticamente) responsable –e incompetente e irresponsable- tiene para ofrecer al conjunto de la población. En violación o vulneración –grave- de la Constitución (art.9 y 55.1), lo denuncien o no –que parecen haberse vistos (¡ay dolor!) cogidos con el paso cambiado- los principales tenores de la oposición (del PP como de VOX)
Terrorismo psicológico (deliberado) vulnerando así la normalidad social, sociológica y legal y constitucional, no se nos ocurre otra calificación : lo que traduce esa medida en línea recta –¿y en una huida hacia delante de Pedro Sánchez? (…)- de la (otra) medida del confinamiento calificada por instancias autorizadas y responsables, de “ineficaz y humillante, traumatizante y destructiva”, y propicia a “la estigmatización”.
Lo que ilustra de manera más grafica y elocuente imposible, el forista que cierra el debate –de hasta 900 comentarios- de uno de los principales diarios de la prensa española global de hoy, en sus foros de opinión. Centros de reclusión (forzosa), a falta de tests y de mascarillas para el conjunto de la población. ¡¡¡No a los centros de detención preventiva ni a los campos de concentración!!! ¡¡¡PEDRO SÁNCHEZ DIMISION Y RECLUSIÓN!!!
“Los pueblos que no aprenden de la Historia” (…/…), de la ajena o de la suya propia habría que glosar el famoso adagio (de Oswald Spengler) que tanto aficiono de citar y evocar aquí. Y los fantasmas de la Historia moderna casi contemporánea se despiertan, es verdad, y se agitan y soliviantan ante el anuncio –¿propuesta real o globo sonda a un (simple) efecto de amenaza e intimidación?- de Marlaska, ministro (socialista) del Interior, de encerrar –o “aparcar” como le dicen aquí- a una gran parte de la población –los llamados “no sintomáticos”- en recintos cerrados (palacios de congreso, polideportivos y demás) para hacer frente a la amenaza del corona virus y frenar así su expansión. ¿Campos de concentración como los que idearon por vez primera en la historia los ingleses –y más de medio siglo antes del Congreso de Nuremberg que juzgó y condenó su uso por la primera vez- en la guerra de los boers (1877-1902) en África del Sur? No creo en las meigas pero hay las.
O digamos, para no incurrir en la acusación de que exageramos -y con el propósito de reducir o conducir a limites y dimensiones más modestas la comparación-, en centros de detención preventiva (sic), en lugares de hacinamiento o si se prefiere –y (se me concederá) sé un poco de lo que hablo-, en patios (improvisados) de prisión. Con el hacinamiento propio de esos lugares y situaciones, con su promiscuidad, y presión psicológica y su tufo a marginalidad (legal o social) difícil de soportar y superar por personas “de orden”-léase normales, o por trillar (…), la inmensa mayoría de la población-, en lo que el filosofo de izquierdas francés (fuera pues de toda sospecha) Michel Foucault llamó en su obra “Historia de la Locura”, la fuerza de chantaje del “sistema” (democrático) –la Edad clásica como él la llama- , a través de las cárceles de derecho común y de la perspectiva de la pena de encarcelamiento)- sobre la masa de ciudadanos normales, ajenos e ignorantes y desprevenidos e indefensos cara a esos mundos y a esos ambientes –y a sus leyes no escritas, y por ende más brutales e implacables que las otras, por propia definición-, y del riesgo o la amenza pues apenas solapada, a su integridad física, no solo moral y psicológica de un choque (y desarraigo) tan brutal e inesperado. Y es con la fuerza moral y de convicción que le daba al filosofo citado (y profesor universitario) su anterior experiencia profesional, de educador de prisión.
Y es como lo que ahora parece que nos quieren vender, vendría a suponer para el ciudadano español medio del tipo digamos normal –no marginal (…)- , en clara ruptura todo ello de las pautas de comportamiento –individuales como colectivas- propias a las formas (normales) de convivencia –“en casa” (o en familia) (no en cárceles ni en saunas, o que sé yo)- en las que se habrá visto educada (antes y después de la llegada de la democracia) la inmensa mayoría de la población, lo que vienen aún más a ilustrar si cabe lo que estos “estados de alarma” que el gobierno de Pedro Sánchez /tan obstinadamente) nos vende sin el menor pudor, esconden agazapados de estados de sitio o de excepción (…)
Campos de concentración ingleses –primeros de la Historia- durante la guerra de los “boers” en África del Sur (1877-1902) en la que estuvo (nota bene) Winston Churchill de corresponsal de guerra- donde “aparcaban” juntas, en plan de hacinamiento y en régimen de excepción –y de estado de guerra-, la población blanca y de raza negra y donde estragaron las epidemias y la mortandad infantil. Niños y grandes, mujeres y niños, ricos y pobres, obreros y clase media en régimen ("chino" o anglosajón) de “melting pot” bajo su férula y su timón, ¿es a donde nos quiere llevar el delirio igualitario –y guerra civilista. (y liberticida) del presidente (“okupa”)? ¿Experimento -de ingeniería social- que en una loca huida hacia delante, quiere ensayar Pedro Sánchez con el conjunto de la población? ¿Queríais arroz, ¡¡¡tres tazas, ilusos demócrata/españoles!!! Que algunos no miran en mientes ni tienen (por las trazas) ni escrúpulos ni complejos, en su voluntad fanática y guerra civilista de ganar ochenta años mas tarde –y al amparo de la guerra bacteriológica- la (interminable) guerra civil (del 36)? ¡¡¡Pedro Sánchez, reclusión y dimisión!!!
Y con la amenaza en el horizonte (eso que no falte) de un resurgir del choque o enfrentamiento ideológico –de izquierdas y derechas), o de/clase –de obreros y empleados de los servicios, frente a las clases medias- léase de la (interminable) guerra civil (del 36). Eso es, no nos engañemos, la formula mágica como única receta que un gobierno desbordado y (políticamente) responsable –e incompetente e irresponsable- tiene para ofrecer al conjunto de la población. En violación o vulneración –grave- de la Constitución (art.9 y 55.1), lo denuncien o no –que parecen haberse vistos (¡ay dolor!) cogidos con el paso cambiado- los principales tenores de la oposición (del PP como de VOX)
Terrorismo psicológico (deliberado) vulnerando así la normalidad social, sociológica y legal y constitucional, no se nos ocurre otra calificación : lo que traduce esa medida en línea recta –¿y en una huida hacia delante de Pedro Sánchez? (…)- de la (otra) medida del confinamiento calificada por instancias autorizadas y responsables, de “ineficaz y humillante, traumatizante y destructiva”, y propicia a “la estigmatización”.
Lo que ilustra de manera más grafica y elocuente imposible, el forista que cierra el debate –de hasta 900 comentarios- de uno de los principales diarios de la prensa española global de hoy, en sus foros de opinión. Centros de reclusión (forzosa), a falta de tests y de mascarillas para el conjunto de la población. ¡¡¡No a los centros de detención preventiva ni a los campos de concentración!!! ¡¡¡PEDRO SÁNCHEZ DIMISION Y RECLUSIÓN!!!
miércoles, abril 01, 2020
¿GOBIERNO DE EMERGENCIA NACIONAL?
El fracaso de la Dictadura, cavó la tumba de la Monarquía, y nos llevó a la guerra civil. Los pueblos que no aprenden de la Historia están condenados a repetirla. Y más que nunca, en la actual situación de emergencia/nacional, de la que el actual monarca, cierto, no se debe inhibir, pero sólo in extremis. Y en espera que la epidemia –y con ella la psicosis- empiece a remitir
Llevo muchos años fuera, víctima o blanco además de un boicot tenaz que me impuso un férreo aislamiento y –fatal secuela- una falta elemental de contactos, y por vía de consecuencia un desconocimiento,´salvo lo que nos informan los medios- de lo que esta ocurriendo en España en la actual situación . No me escondo, ni oculto o agacho ni arrío mis banderas no obstante, pensé desde el principio y sigo pensando que se está ex profeso exagerando en los medios, unánimemente concordes –hablo de la prensa global “main stream”- en políticas destinadas a fabricar y a mantener la psicosis (individual y colectiva) bien previstas y elaboradas, y a cercenar la libertad física (sic) primera en la lista de libertades y derechos fundamentales. Y me sigue mereciendo aplauso y apoyo el doctor biólogo e infecciólogo, Raoult (de Marsella), que ha puesto en ese sentido –de combatir la psicosis y de minimizar la epidemia- toda la carne –de su prestigio innegable y de su larga experiencia, frente a la polvareda levantada en torno suyo- en el asador. Tal y como lo he venido defendiendo y postulando en mis dos mensajes a la población en este blog. Y no me retracto ni una jota. Y sin embargo (…)
Llevo muchos años fuera, víctima o blanco además de un boicot tenaz que me impuso un férreo aislamiento y –fatal secuela- una falta elemental de contactos, y por vía de consecuencia un desconocimiento,´salvo lo que nos informan los medios- de lo que esta ocurriendo en España en la actual situación . No me escondo, ni oculto o agacho ni arrío mis banderas no obstante, pensé desde el principio y sigo pensando que se está ex profeso exagerando en los medios, unánimemente concordes –hablo de la prensa global “main stream”- en políticas destinadas a fabricar y a mantener la psicosis (individual y colectiva) bien previstas y elaboradas, y a cercenar la libertad física (sic) primera en la lista de libertades y derechos fundamentales. Y me sigue mereciendo aplauso y apoyo el doctor biólogo e infecciólogo, Raoult (de Marsella), que ha puesto en ese sentido –de combatir la psicosis y de minimizar la epidemia- toda la carne –de su prestigio innegable y de su larga experiencia, frente a la polvareda levantada en torno suyo- en el asador. Tal y como lo he venido defendiendo y postulando en mis dos mensajes a la población en este blog. Y no me retracto ni una jota. Y sin embargo (…)